CAPITULO XX

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REY

Malditos ruidos no dejan dormir, abro un ojo y veo todo oscuro.

-Demonios!, qué hora es?

-Cállatedejaaa dormir demoniosss.

Escucho una voz adormecida de un tipo, pero no veo nada, mis ojos se están acostumbrando a la espesura de la oscuridad.

-Quien ha dicho eso??

-A ti que demonios te importaaa, deja de hacerrrr ruido.

Volteo para tratar ponerme de pie, pero todo me da vueltas.

-Demonios!

Como puedo lo hago, pero me duele mucho la cabeza, y al momento percibo el olor a alcohol en el ambiente, como no lo había notado antes, volví a perderme más de la cuenta en la cantina, y como un rayo recuerdo todo, esa maldita cara, era ella, estoy casi seguro que era ella.

-Pero está muerta, no puede ser, que diablos se trata.

Oigo una voz a mi derecha, toda adormecida y tartamudeante.

-Oye yo yo conozco esa voz, tu tu eres el Rey cierto??

Yo solo me quedo callado, pero para que negar, tantas veces que eh venido a este lugar, cuando me siento perdido el alcohol es mi cura, desde que murió mi esposa y nada ha sido igual, ella era mi todo, una parte de mí se fue con ella, y Dita a pesar de todo no ha sido una hija ejemplar, le he dado todo lo que eh podido pero no lo sabe agradecer, a veces pienso que la hija que perdimos pudiera ser mejor que ella, con un corazón noble como su mama, con esa luz que la caracterizaba y que fue lo que me enamoro de ella, pero esa mujer que estaba en los calabozos, es idéntica a ella, no sé pero siento que necesito verla de nuevo y hablar con ella, pero eso me afectara, tantos años que estoy tratando de superarla y de repente aparece una mujer parecida a ella, esto no puede ser. De repente esa voz, me saca de mi retardo.

-Oiga no me ha contestado.

-Eso a usted no le importa.

-Joderrrr si es el Rey.

Oigo claramente como varias personas que no aparecen en mi campo de visión por la oscuridad pasan rápido y salen del lugar como alma en diablo, eso me causa una mueca de satisfacción en mí, por un momento se me olvidaba que yo era el Rey del lugar y puedo hacer mi orden como me venga en gana.

-Malditos infelices así saludan a su Rey, que mal agradecidos son conmigo.

Empiezo a caminar un poco tambaleante hacia la puerta del lugar, cuando la abro me entra la luz de lleno y me tapo los ojos con mi antebrazo, maldita claridad, pero eso no me detendrá para hablar con esa chiquilla y saber de dónde diablos ha salido, y me vale si es esposa de Cole, tendrá que hablar con migo, con el Rey de este lugar.



DITA

-Donde diablos estamos??

Volteo a ver al cochero, y este me ve con cara de interrogación.

-Mi lady usted me dijo que la trajera lo más lejos posible, y bueno yo estas tierras no las conozco mucho, permítame investigar con un aldeano el nombre del lugar.

Yo solo le hago mala cara, malditos ineptos, si fueran mis cocheros fuera diferente, pero no pude arriesgarme en ausentarme unos días con la guardia real atrás de mí y delatar mi identidad.

...Devuélveme a la Vida... [+18]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora