XIII. Amigos con beneficios.

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Maratón: 2 / 3.

12 de Junio del 2014.

De: Camila.
Estoy afuera de tu pieza, abre porfa😔

A los instantes el Gary salió refregándose los ojos, al ver en el estado en que estaba me miró confundido y me hizo pasar.

–¿Qué sucede cabra chica? Estay pal pico– murmuró el Gary.

–Gary, tengo tanto que contarte, se lo diría a la Mari, pero tiene hartos problemas así que estay obligado a escucharme– me miró horrorizado–. Me encontré con el David, casi me mata, pero luego apareció el Charles y fue tan lindo conmigo, y onda yo sé que a él no le gusto, lo hace porque me ve como su hermanita, pero hueon creo que me gusta, y caleta, y cuando me besó en Brasil...

–Espera espera espera, ¿te besó en Brasil?– frunció el ceño.

–Gary hueon, ¿eso es lo único que escuchaste?

–Pero es que hueona, ese tipo está loco por ti, solo que no lo quiere admitir porque sabe que contigo no es igual que con todas, sabe que si lo hace contigo no vay a desaparecer así como así, y además está el Arturo– suspiré–. ¿Y te encontraste con el David? ¿Ese culiao no estaba en la cárcel?

–El que tiene plata sale fácil, sus palabras no las mías.

–Mira Cami, esto es lo que vamos a hacer, hoy hay carrete por el buen debut, así que te vay a poner bella y vamos a ir a carretear, a demostrarle a todos que no necesitai ni un mino, a la chucha los hombres, y mira que te quiero harto si lo digo porque soy un hombre. Ahora porfa vamos a dormir que son las siete de la mañana.

Con el Gary la verdad no me daba vergüenza dormir, es como un hermano, ahora que recuerdo la vez que dormí con el Charles sí me incomodó, o sea no, pero estaba raja curá, quizás si estaba sobria... Ay por la chucha Camila, tan temprano y pensando en tu drama amoroso. Hablando de eso, creo que es bastante hipócrita seguir con el Sergio, no quiero que sufra por mi causa.  

De: Camila
Tenemos que hablar, te parece a las 11 en tu casa?

***

Creo que ya imaginan lo que ocurrió, me sentía mal por hacerle esto al Sergio, pero me sentiría peor si seguía con él a pesar de mis sentimientos hacia el Charles, eso no es honesto, ni con él ni conmigo.

–Oye Gary, ¿y dónde es este carrete?– pregunté a mi amigo, íbamos en camino al carrete.

–En la casa del Charles– respondió tranquilamente, yo me detuve de golpe.

–Gary querido, ¿cómo chucha querí que me olvide de él si me llevai a su casa? ¿Voh erí hueon o te botaron cuando chico?

–Uy exagerada de mierda... Te voy a contar algo que te va a poner feliz– sonrió malvadamente. Oh no.

–¿Qué cosa?

–El Charles se está divorciando.

–No huei– estaba más impactada que la ctm–. ¿Y los niños?

–Teniai que ser parvularia, te cuento que el hueon que te gusta está libre y me preguntai por los cabros chicos– me sonrojé, en volá no podía evitarlo.

–Igual no creo que me pesque, van a haber ene minas mejores que yo– el Gary rodó los ojos y me agarró del brazo para que siguiéramos caminando.

La casa culia del Charles parecía proyecto x, estaba la cagá. Habían muchos de la selección, afortunadamente mi hermano no estaba porque la Eli se había enfermado y fue a pasar la noche con su esposa e hijos con permiso de Don Sampa. Un carrete sin Vidal, parecía una obra de fantasía.

–¡Camilita!– el Ale me saludó apenas entré.

–¿Tan temprano y ya curao?– me burlé.

–Sí, es que jugamos al nunca nunca, y como ya ves soy un hombre con muchas experiencias– se rió como hueon.

–¿En serio jugaron al nunca nunca?- me reí. Parecían cabros de cuarto medio en un carrete furtivo.

–Sí, sabí que lo más impactante fue que el capi fue el único en tomar cuando hablamos de culiar en el auto, el capi po– ctm, estábamos que nos meábamos de la risa.

No vi al Charles durante toda la fiesta, supongo que estaba ocupado con alguna mina, disfrutando que ahora que es soltero puede hacerlo sin preocuparse de si su esposa llegara o qué sé yo. Tomé algo, pero nada fuerte, no quería llegar raja curá a mi casa.

–Oye Cami ven, vamos a jugar 7 minutos en el paraíso– el Ale me agarró del brazo y me arrastró a donde estaban todos los que quedaban, incluyendo al Charles.

–¿Qué? Yo no quiero meterme en un closet a oscuras.

–Uy hueona, que erí fome, ven no más.

Al final tuve que jugar obligada, aunque admito que fue chistoso cuando al Gary le tocó con el Pinigol, quien estaba deseoso de que le tocara con una mina, su cara de espanto fue magnífica hueon, lo mejor de la noche. Luego al Ale le tocó con una mina amiga del Charles, volvieron todos rojos y acalorados, así que supongo que había onda ahí. Dieron vuelta la botella una vez más, y adivinen en quién paró.

En mí, y en el Charles.

El Gary me guiñó el ojo, ese hueon había dado vuelta la botella, oh ctm, ¿cómo? ¿Sabía de qué manera girarla pa que parara en los dos? Ah no, me tienen que estar huebiando, me voy a meter en un closet con este hueon...

Nos terminaron casi empujando al closet, estábamos demasiado cerca, podía sentir su respiración, ctm me iba a morir.

–Cami– murmuró, hasta ese momento no nos habíamos dirigido la palabra, yo estaba temblando de los nervios–. ¿Estay bien? Te noto tensa.

–Sí sí, no te preocupes– respondí entera roja, menos mal que no me podía ver.

–Oye, yo te quería pedir perdón por lo que pasó en Brasil.

–¿Qué cosa?– no sabía si por el beso, o por pedirme perdón por el beso.

–Por decirte que olvidarai lo que pasó, fui algo hueon con eso.

–Ah no te preocupí, supongo que fue pa mejor.

–Cami, a mí me atraes, harto, y ahora estoy soltero...

Ctm, me muero.

Cada vez lo sentía más cerca, yo ya estaba cerrando los ojos cuando tuvo que cagarla el gil.

–Quiero que quede claro, Cami, si aceptas, ya sabes que no soy tuyo y tú no eres mía, esto es solo para pasar el rato– me dijo en voz baja, asentí e inmediatamente después me tomó de la cabeza y me besó.

No sé por qué estaba haciéndolo, quizás porque era demasiado hueona y no me importaba cómo, yo solo quería estar con él, porque lo amaba.

Aunque claro, en ese entonces no lo sabía.

Friends with benefits // Charles AránguizDonde viven las historias. Descúbrelo ahora