Me oculte tras unos letreros que se encontraban ahí, de tal forma que ellos no pudieran verme pero yo si a ellos.
Ambos reían sobre quien sabe que cosa mientras patinaban. Mi vista se situó en sus manos entrelazadas.
El sentimiento de querer golpearla me invadió de nuevo. Apreté los puñado a mis costados y seguí observándolos.
Mi prima le susurró algo a su oído y Jos rió.
Maldita.
"Celos de tus ojos cuando miras a otra chica tengo celos, celos."
Mi subconsciente comenzó a cantar.
Maldita subconsciente, deja de cantar.
Comencé a idear un plan para arruinar su "cita" pero nada era suficientemente bueno para arruinarlo.
Tampoco podía a parecer y gritarle a mi prima que se alejara de Jos porque me vería como una total lunática.
Piensa Melissa, piensa.
— Hola Melissa. — Dijo alguien tras de mi lo que provoco que saltará por la sorpresa.
Me gire a ver quien me había hablado y me encontré con William quien sonreía.
— Perdón, no fue mi intención asustarte. — Se disculpó amablemente.
— Descuida, está bien, que bueno verte. — Respondo volviendo a observar a Karime y Jos.
— Lo mismo digo, siempre es grato verte. — Respondió aún tras de mi. — ¿A quien espías? —
Me congele sin saber que decir.
— Eh... A nadie. — Sonreí lo más normal que pude.
— ¿Segura?—
—Sip.—
—Bien, entonces te creo.—
—¿Qué te trae por aquí? — Pregunté tratando de hacer conversación.
— Nada importante en realidad, sólo vine a pasar el rato. — Me sonrió. — ¿Qué hay de ti?—
—Oh, nada, vine a pasar el rato igual.—
—Entonces ¿te molestaría pasar el rato conmigo? Digo, sólo si quieres. —
Mire hacia la pista de patinaje que ahora se encontraba vacía.
¿Dónde habrán ido?
Me gire a ver a William quien aún esperaba mi respuesta.
— Supongo que estaría bien. — Respondo.
Ambos comenzamos a caminar sin un destino fijo por toda la plaza.
Trataba de buscar a Jos y Karime con la mirada pero no habían rastros de ellos por ningún lugar.¿Se habrán ido?
Después de caminar y hablar un rato decidimos decidimos descansar.
— ¿Quieres un helado? — Me pregunto William cuando observamos el puesto cerca de nosotros. Asentí y me senté en una de las mesas mientras William iba por los helados.
— ¿Melissa? — Otra voz a mis espaldas hablo haciéndome sobré saltar del susto.
¿A caso hoy era el día de asustar a Melissa?
Me gire encontrándome con dos familiares rostros frente a mis ojos.
Jos y Karime, me veían confundidos y sorprendidos a la vez.
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(EN EDICIÓN) Un Deseo » J.C.
Fanfiction― ¿De qué habla? ― Reí. ― El collar te puede conceder lo que quieras, cualquier deseo ― Explicó. Repito, ¿Acaso está loco? ― Sí, claro ― Rodé los ojos. Todos quisiéramos tener la oportunidad de cumplir un deseo, ¿Tu qué pedirías? • Novela adaptada...