Capítulo 33

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Me encontraba andando por una calle que no conocía, era amplia, sin coches aparcados, filas de chalets iguales a cada lado y ni un alma por la calle, sólo mi silencio y yo.
Iba sin rumbo, sin pensar, solo seguía el camino mono temáticamente sin importarme nada.
Mientras andaba divisé una sombra a lo lejos inmóvil en medio de la carretera, no le di importancia por lo que seguí con mi paso constante. Poco a poco me iba acercando y divisando mejor a esa persona hasta que pude ver con claridad de quien se trataba...

-¿Robert? ¿Qué haces aquí? - dije mientras me acercaba más rápido.

No obtuve respuesta. Él se encontraba quieto mirando al frente, como si observara a un punto fijo en el horizonte. Yo intenté acercarme pero un grito femenino hizo que me detuviera en seco.

-¡¡¡Quieta!!! - oí de un punto que no distinguí cual era.

Me giré para ver si venía de mi espalda, pero en lugar de eso encontré a Liam a la misma distancia aproximadamente que Robert. También estaba inmóvil, mirando un punto fijo del horizonte.

-¿Liam? ¿Me estabas siguiendo?

Tampoco obtuve respuesta. Me quedé quieta en el sitio, confusa y sin saber que hacer. De repente una risa femenina apareció, busqué de dónde venía y la encontré, era Sofía saliendo de una casa paralela a mí, riendo maléficamente.

-¿¡Qué haces aquí y de qué te ríes!?- dije furiosa en el sitio.
- De ti, de lo patética que eres. - dijo deteniéndose a unos metros de mí.
- ¿Pero qué dices? Márchate de aquí ahora mismo.
- No, necesito hacerte una pregunta que llevo haciéndome mucho tiempo... - sonrió enarcando una ceja
- Suéltalo.
-¿A quién de los dos quieres más?

La pregunta hizo que un pequeño escalofrío recorriera mi cuerpo. ¿Por qué aquella reacción? Debería tenerlo claro... Pero en vez de eso me quedé quieta y sin palabras. De repente empezó a hacer frío y mis manos poco a poco se enfriaban costándome más moverme, intenté mover mis pies hacia donde estaba Sofía, pero no reaccionaban.

- Tu respuesta será muy sencilla. Hay dos trampillas, cada una bajo sus pies, el que salga escogido se salvará. - empezó a reír.- ah, y no podrás salvar al otro, ya que sólo podrás moverte en una dirección...

Mi cuerpo empezó a temblar aún más, casi no podía mantenerme en pie ni hablar. Pero cuando pensé que esto no podía ser peor, lo fue.

-Pilar... ¿Estás dudando? Eres mi novia, no deberías de dudar. - dijo Robert.
- ¿Acaso no recuerdas los momentos que pasamos?- añadió Liam.
- Yo te ayudé cuando estabas sola...- dijo Robert.
- No puedes decir que no al amor de tu vida, ni negar que aún sientes algo por mí.- dijo Liam.

No podía más, esto tenía que ser una pesadilla... Me agaché tapándome los oídos, las lágrimas salían como si de un manantial se tratase y de mi cabeza no salía la risa de Sofía...

-¡¡Pilar!! ¡Despierta! - oí mientras alguien me agitaba.

Abrí los ojos y vi a Liam a mi lado, de rodillas en el lado libre de la cama y sus manos sobre mí. Instantáneamente me lancé a abrazarle llorando, tenía por el cuerpo sudor frío y aún temblaba. Nunca había tenido una pesadilla así.

- Tranquila... Tranquila, ya pasó...- dijo acariciando mi cabeza hundiéndomela en su pecho.- sólo fue una pesadilla, tranquila...
- ¿Cómo sabes que estaba teniendo una pesadilla? - dije tranquilizándome un poco sin moverme de la postura.
- Estabas gritando y me levanté corriendo a ver si estabas bien. Tienes el corazón a mil por hora... ¿Qué soñaste?
- No quiero hablar de ello... Fue horrible...- dije abrazándole más fuerte.
- De acuerdo de acuerdo... Aún es un poco pronto, iré a recoger un poco, tú mientras descansa.- dijo separándose de mí y bajándose de la cama.
- ¡No! - dije sin pensar agarrándole la camiseta de tirantes que llevaba.- No te vayas por favor...- una lágrima volvió a caer.
- Está bien.- sonrió tiernamente.

Me tumbé en la cama y él también lo hizo. Me acurruqué en él mientras él me rodeaba con sus brazos. No dije nada, ni él tampoco, simplemente nos quedamos en silencio y volví a dormir.

*****

El vídeo de nuestra cover se subió esa misma tarde a Youtube. En unas horas sus reproducciones empezaban a subir más y más rápido, hasta el punto en tener 2.000 reproducciones en 5 horas.

-¡Aún no me puedo creer que ya tenga tantas reproducciones! - dijo Irene emocionada frente a la pantalla de su ordenador.

Tras la noche con Liam y Harry fui al hospital a ver a Robert, al que le estaban dando el alta y de nuevo volvía a estar como una rosa, por lo que pasé la mañana con él y después de comer fui a casa de Irene y le conté lo de su enfermedad.

- ¡Y que lo digas!- dije en la silla de al lado.
- A ver, a ti te pasa algo aparte de lo de tu novio, se te nota a la legua.
- ¿A sí experta? ¿En qué?- dije riendo.
- Por ejemplo en que si estuvieras bien habrías saltado por toda la habitación y habrías dicho un montón de expresiones tuyas o mil cosas de esas que hacer cuando te emocionas.
- A veces odio que me conozcáis tanto... - reí entre dientes.
- Puedes contármelo, ya lo sabes.
- Verás... Ayer tuve una pesadilla. En ella aparecían Liam, Robert y Sofía.
-¿¡Sofía!? ¿Qué haces tú soñando con esa guarra?
- Calla y escucha. Bueno, pues estaba en medio de una calle sola y aparecieron Liam y Robert, luego Sofía me hizo elegir a quién quería más y...
-¿Y? - preguntó confusa.
-¡No supe elegir! ¿Vale? ¡No pude! - grité estresada.
- ¿Cómooooo?
- Lo que oyes... Estoy muy confusa... Quiero a Robert con toda mi alma, pero... Algo me hace no poder olvidarme de Liam y hacer que dude...
- Pilar... No sé que decir... Ya sabes que los dos me caen muy bien, que cada uno es de una manera... Pero no sabría decirte cual debes elegir, porque eso lo debe hacer tu corazón.
- ¿Y por qué crees que estoy así? Me siento como una mierda... Louis sabría qué hacer en estos casos joder...
-¿Y por qué no le llamas?
-¿Si, no? Después de lo que pasamos le llamo como si nada para que me ayude.
- Pues sí. Sois como hermanos, ¡Por dios alguno tiene que tragarse su orgullo y hablarlo! Él te pidió perdón en la fiesta, ahora te toca a ti dar el paso.
-¿Crees que querrá?
- No lo creo, lo sé.- dijo cogiendo mi teléfono de la mesa y buscando el contacto.
-¿¡Ahora?!
- Sí, toma.- dijo dándome el teléfono que daba señal.

Tras un par de timbrerazos lo cogió.

-¿P-Pilar?- dijo tímido.
-Hola Louis...
-Qué sorpresa... ¿Qué quieres?
- Necesito hablar contigo y arreglar esto ya...- dije con la voz temblorosa.
- Vaya... Dios, has tenido el valor para hacer algo que llevo deseando hacer desde la fiesta...
- ¿Eso es un sí?
- Claro, pero en persona por favor. ¿Cuando te viene bien?
- ¿En una hora en nuestro árbol?
- De acuerdo. Echaba de menos esa frase.

Dicho esto los dos colgamos, aún temblando mis manos y mi corazón a cien.

-¡Vamos! ¡Ve a hablar con él! - dijo Irene levantándome de la silla.

Tras esto fui directa a nuestro punto de encuentro. Estaba realmente nerviosa y no sabía como iba a reaccionar y si todo volvería a ser igual. Oh dios, ¡Echaba de menos a mi mejor amigo! Necesitaba verle y contarle todo, olvidarme de lo que me hizo y volver a ser como éramos antes de todo esto.
Llegué 20 min antes de la hora, pero cuando llegué para mi sorpresa él ya se encontraba de pie apoyado en el árbol mirando al cielo. Me acerqué a él y al percatarse se giró hacia mí y me sonrió tiernamente.

- Hola Pilar, llegas pronto.
- Lo mismo digo... ¿Qué tal?
- Bien... Oye esto es incómodo, vamos al grano y olvidémonos de las típicas preguntitas del messenger. Lo siento, te lo repetiré mil veces, lo siento. Fui un imbécil al creer a una completa desconocida antes que a ti, mi mejor amiga. Pero estaba tan confuso y enfadado que no sé que hice... Nunca me he arrepentido de algo tanto como ahora.
- Yo también lo siento... Fui un poco brusca con todo el general, me cegué y no me di cuenta de las cosas... Joder Louis te echo de menos.- dije abrazándole fuerte.
- Y yo a ti... Nunca más, ¿Vale?
- Vale, te lo prometo.
- Ahora dime que te ocurre. Sé que te pasa algo con el amor, se te nota.
- ¿Cómo lo sabes? - dije con los ojos como platos.
- Te conozco demasiado bien como para saberlo, además tuve ayudita de Irene.- guiñó un ojo.
- Verás...- le conté todo lo de Liam y Robert, incluyendo su enfermedad y el sueño que tuve.
- Así que es eso...- dijo pensativo.
-¿Qué opinas? No sé que hacer...
- Te voy a ser lo más sincero que pueda. Sigues queriendo a Liam, pero también quieres a Robert, el problema es que del primero estás enamorada hasta los huesos y del segundo sólo le quieres más que a cualquier otro chico.
-¿¡Qué!?
- Lo que oyes, aunque lo intentes controlar, estás enamorada de Liam, sé bien lo que es eso, y sé que quieres a Robert y no podrías hacerle daño, pero eso no se puede controlar, si tu corazón a elegido no puedes llevarle la contraria.
- Pero... Liam sólo fue un capricho rápido que no funcionó...
- Eso es lo que tú quieres pensar. ¿Te digo un secreto? ¿Sabes por qué Sofía te odiaba? Porque se te notaba que estabas enamorada de él aunque estuvieses con Robert, quienes estamos entre medias de ese sentimiento sabemos ver cuando alguien lo está.
- Yo... Robert... Necesito estar con él...
- No alargues más algo que a la larga no se puede curar... Te lo digo de corazón.

Let me love you [Liam Payne - One Direction]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora