Let me love you [Liam Payne - One Direction]

Capítulo 34

Cascos puestos, música a tope al ritmo de "Heart by heart" de Demi Lovato andando por la calle sin pensar en nada, solo estábamos la música y yo. Así me encontraba, a pocos metros de la casa de Robert con el corazón encogido.

"Tenemos que hablar, es importante, te espero en mi casa. Te quiero" - decía el mensaje que me mandó pocos minutos antes.

¿Qué querría? ¿Por qué justo al día después de mi conversación con Louis? Tenía la cabeza que me iba a explotar, en esos momentos deseaba meterme en una caja, enviarme a otro país y olvidarme del mundo.

Cuando ya estaba en la casa llamé sin pensármelo, ya que si lo hacía me arrepentiría. Su madre me abrió la puerta con una gran sonrisa de oreja a oreja como de costumbre y me dejó pasar indicándome que subiera al cuarto de Robert ya que él estaba ahí, por lo que subí hasta este.

-¿Hola? - dije llamando a la puerta.

-¡Pasa, está abierto! - dijo él desde el interior.

Abrí la puerta sin que se notaran mis nervios y entré, él estaba encima de la cama tumbado con el móvil y al entrar me sonrió y se incorporó.

-¿Estás mejor...? - dije intentando que no pareciera brusco.

- Claro, ¿No me ves? - dijo dando una vuelta sobre sí mismo con los brazos estirados.

- Ya lo veo, ya.- sonreí.- ¿Qué querías?

- Bueno, es algo un poco delicado la verdad...- dijo rascándose la nuca. Eso significaba que en parte era malo.

- ¿Es malo? - dije frunciendo un poco el ceño.

- Pues, por una parte es muy buena, por otra no tanto...

- Dios Rob, dímelo ya por favor.- insistí.

- Siéntate.- dijo sentándose en la cama. Yo hice lo mismo.- Verás... Nos han informado que creen saber como curarme.- sonrió.

-¿¡QUÉÉ!? - grité eufórica mientras me lanzaba a abrazarle.- ¿¡Cómo?!

- Ahí viene la parte mala...- dijo separándome de él. Su rostro mostraba pena.- Para poder curarme tengo que viajar a EE.UU... - dijo bajando la mirada

- Espera... ¿Te vas? ¿Cuanto y cuando? - dije con un nudo en la garganta.

- Sí, me voy... Mañana por la tarde.

- ¡Pero si te lo acaban de decir no puedes irte tan pronto!

- Es que no lo sé desde hace poco, me lo dijeron hace unas semanas y lo adelantaron desde lo de anteayer. - dijo sin mirarme agarrándome de las manos.

- ¿Me lo has ocultado? ¿Otra vez?- dije confusa.

- No podía hacer otra cosa, no quería que nada fuera distinto. Estar contigo ha sido lo mejor que me ha pasado nunca ¿Entiendes? No te enfades, sabes de sobra que tú lo hubieras hecho también, te conozco demasiado bien.- acertó.

- El problema es que no sé como asumir todo esto tan de repente... Además, si te vas, ¿Qué es de nosotros?

- Ahí viene la otra parte...- sonrió a duras penas.- Dejo el camino libre a Liam, Pilar. No sé cuanto tiempo estaré fuera, lo mas probable es que bastante, por lo que no puedo competir contra alguien que está presente a tu lado todos los días y del que sigues...- se paró para mirar a otro lado de nuevo.- ...enamorada.

- ¿Q-qué estás diciendo?- dije con un nudo más grande en la garganta.

- Has oído bien.- dijo soltando mis manos. Sus ojos brillaban como nunca, quizá por las enormes ganas de llorar que reflejaba.- Pilar, como dije antes estar contigo ha sido lo mejor que me ha pasado, pero mientras estaba contigo pude notar en ti lo que sentías. Desde que os perdonasteis todo cambió.