Capítulo 43

1.4K 78 13
                                    

*CUENTA LIAM*

-Gira a la derecha, no nos queda mucho camino.- me indicó Harry mientras yo conducía.

La policía nos rogó que nos quedáramos quietos esperando, incluso nuestros amigos y amigas nos lo habían pedido casi de rodillas, "Es peligroso", "Os pueden matar", eran algunas de las frases que nos entraban por un oído y nos salían por el otro. Sabiendo dónde están no podíamos quedarnos de brazos cruzados, sería como pedir a un político que no robara, imposible.

La echaba de menos, no podía parar de pensar en ella, las pocas veces que congenié el sueño solo tenía pesadillas en las que algo malo la pasaba. No sé que me hizo aquel día que la conocí, pero me tiene atado de pies y manos a ella.

La velocidad excedía muy por encima los límites, pero sabía controlar el coche a la perfección. Tomamos otro camino que se adentraba por el campo para no cruzarnos con la policía y así quizá llegar antes que ellos, no sabíamos del todo lo que ocurriría cuando llegáramos, ni sabíamos que nos íbamos a encontrar, pero el corazón a veces puede más que la razón.

-¿Queda mucho?- dije nervioso sin quitar la vista de la carretera, era de noche y si me distraía quizá no la contaríamos.

- No, ya casi estamos, deberías bajar un poco la velocidad, no se ve nada y el motor se oye mucho.

- No.- dije seco.- Tenemos que llegar ya, no podemos perder más tiempo.

-¡Liam, deja de hacer el gilipollas! ¿No será mejor llegar enteros y con un plan que muertos?- su tono de reproche sonó demasiado convincente y su mirada hizo que no me lo pensara dos veces y bajara la velocidad.

Realmente no se veía nada, estaba todo oscuro y desierto, además la carretera era un auténtico caos.

-Liam... ¿Qué haremos cuando lleguemos?- preguntó muy serio.

- Abre el cajón que tienes delante, con eso nos bastará.

Harry no se lo pensó y abrió el cajón para luego quedarse mudo y sacar las dos pistolas que este contenía, sus ojos estaban abiertos como platos y su boca algo entre abierta.

-¿¡Qué cojones haces tú con esto aquí!?- gritó sorprendido examinándolas.

- Ten cuidado, están cargadas.- reí entre dientes.- ¿Recuerdas a mi tio Tom? Tiene una armería y me las ha regalado.

- Lo más normal del mundo, mientras la gente se pide videojuegos de pistolas, tú vas a lo grande y te pides las pistolas.- dijo irónico- Ni siquiera sé usar este trasto.

- Pero yo sí, tú harás como que sabes usarla y punto. - hice una pausa- ¿Qué es eso Harry?

A lo lejos pudimos observar una luz proveniente de una especie de casa enorme, no estaba muy lejos, un kilómetro o así, la sangre empezó a hervirme y apreté con fuerza el volante de los nervios.

- Es allí, no hay duda.- dijo Harry con un tono muy serio y una mirada de rabia.

-¿Preparado amigo?- dije frunciendo el ceño.

- Claro que sí.

Parecía interminable, lo que tardamos 5 minutos en recorrer parecieron años. En mi mente solo estaba ella, en la de Harry también, se veía en sus ojos las ganas que tenía de reencontrarse con Paula. Harry siempre había sido todo un rompecorazones, de esos que salía con chicas por pura diversión y cuando se cansaba de ellas buscaba a otras, pero esta vez había cambiado, nunca le había visto tan unido a alguien como para arriesgar su vida por ella, que día a día hable de ella sin parar y que ese brillo en los ojos fuera más intenso de lo normal. Todo esto era un laberinto sin respuestas ni salidas, amor lo llaman, no sé como saldré de esta, pero no me rendiré hasta poder volver a tenerla junto a mí aunque ella quizá no sienta lo mismo por mí.

Let me love you [Liam Payne - One Direction]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora