Let me love you [Liam Payne - One Direction]

Capítulo 22

Toda mi vida viví sin preocupaciones. De pequeña siempre preferí ir con chicos a jugar al pilla pilla y a los Pokemon que jugar a las casitas y muñecas, cuando veía a los adultos besarse siempre decía un sonoro "Aggggh" de asco y me decía a mi misma que nunca besaría a un chico. Al ir creciendo mis gustos fueron cambiando y de ser un medio chico me volví una auténtica chica, que poco a poco ese asco hacia los chicos fue desapareciendo, pero aún seguía diciendo que eso era muy lejano, los chicos eran idiotas, ¿Por qué nosotras éramos tan maduras y ellos no?

Sobre los 15 años todas las chicas empezamos a imaginarnos que esas películas de amor, esos libros de fantasía y demás nos ocurrirían a nosotras, pero yo siempre pensaba " Esos puteríos no pueden ser reales, ¿Cómo una chica va a estar con dos chicos?" Yo siempre he sido muy diferente a las demás chicas, soñaba con esas historias, pero siempre aparentaba que todas esas cosas me la resbalaban. Ahora mismo estaba viviendo mas o menos uno de esos "puteríos" como yo los llamaba y no sabía que hacer, quizá debería de haber visto más películas cuando tuve oportunidad en vez de jugar a la play con mis amigos, no sabía como salir de esto... ¿Y si me mudaba al polo sur y me hacía esquimal? En este momento cualquier solución me servía.

No quería ir al instituto, no quería ver la cara de nadie, sólo quería estar sola, ni siquiera dejé entrar a Amalia cuando llegó para hablar, ella no había hecho nada pero no quería pagarlo con ella. Mi madre me sacó de la cama amenazándome con una jarra de agua, así que me vestí y salí de casa sola, ni desayuné ni esperé a Amalia. Por el camino mis ganas de quedarme sentada en cualquier sitio y esperar a que pasara el día fueron indescriptibles, pero tuve que aguantarme e ir.

Al llegar entré directamente en la clase, sin pararme a hablar con nadie. Me senté y esperé a que el profesor llegara, casi no había nadie en el aula, hasta que Harry entró y se sentó junto a mi.

- Eeey, buenos dias- dijo algo nervioso. No obtuvo respuesta por mi parte.- Pilar... - dijo tocándome el hombro, pero quitó la mano rápidamente tras echarle una mirada fulminante.- Me gustaría hablar contigo...

- ¿Sobre qué? - dije al fin amenazadora- ¿Sobre como uno de mis mejores amigos me oculta que otro de ellos se junta con la persona que más asco tengo del mundo y luego dejarme en ridículo? Mejor paso de verdad. - dije apartando la mirada de el y mirando al frente apoyando los codos sobre la mesa y mi cabeza sobre mis manos entrelazadas.

- Esa no fue mi intención y lo sabes. No te lo dije para que no estuvieras peor, ¿Crees que no veo como estás día a día? Seguramente me lo niegues pero sé lo que pasa.

- No sabes lo que pasa, principalmente porque ni yo misma lo sé ¿Vale? - dije levantándome y cogiendo la mochila.

- ¿A donde vas? - dijo levantándose

- Fuera de aquí, necesito despejarme... Hablando en plata, pellas.- dije saliendo del aula. Noté como Harry me seguía y me giré hacia el a medio camino.- ¿Me vas a acompañar chico malo?

- Ni de coña me pierdo el hacer pellas.

Salimos fuera del instituto y nos dirigimos a su coche. Montamos y fuimos camino al parque del Retiro, el mismo al que fui con Liam. Andamos un rato y nos sentamos en una explanada de césped. Yo me tumbé boca arriba, apoyando la cabeza en mi mochila y Harry me imitó.

- Me va a caer la de Dios cuando llegue a casa...- dije mirando al cielo.

- Buah, yo ya estoy acostumbrado. ¿Por qué crees que repetí?

- Eres el mas malo de todo Madrid señor Styles - dije entre risas. - ¿Desde cuando Louis se junta con la perra amargada? - no me corté al llamarla así.