SERGIO
Miré el techo blanco y eso ya era una pista de donde me encontraba... después una imagen religiosa...
después mi pecho raro... y un tubo en mi boca....
me alteré...
- tranquilo hijo...
una monja de lentes se acercó a mi y me sonrió...
me puso la mano en el pecho y eso me ayudó a calmarme, después, retiró el tubo...
- madre superiora...
- ¿como estás hijo?
- no lo sé aún, todavía no me vuelve el alma al cuerpo...
mi voz era ronca, en exceso... ¿cuanto tiempo ha pasado?
- unas 15 horas... estás en cuidados intensivos, te operaron acá...
- pensé que sería en Guadalajara...
- tus padres no quisieron... por cuestiones que tu conoces con Marcia Alvarado, la gente de ese hospital le tiene algo de lealtad... pero acá todo salió bien...
- suerte la mía...
- la suerte no es para los hijos de Dios...
miro a mi alrededor y me percato de que estoy enchufado a 20 mil maquinas...
- ¿si se apaga alguna que pasa?
- esperemos mejor que no se apaguen... llamaré a tus padres...
- gracias...
le digo apenas audible...
la madre superiora abandona la habitación, minutos después aparece una enfermera que me coloca una cánula y revisa algo en mi abdomen... me acomoda de forma que casi estoy sentado... revisa mi pecho y las máquinas...
- si hay dolor, solo oprima el botón de acá...
me ofrece un control y asiento a medida que puedo...
- gracias...
susurro...
ella sale y miro al techo.... es increíble lo débil que me siento... apenas hace unos días estaba lanzándome de un paracaídas, y hoy, mírenme, con medio pecho abierto...
me sonrojo de tan solo pensar que la enfermera ya vio mi paquete, porque si llevo un par de días acá y no he ido al baño, es porque seguro tengo una sonda allí dentro de mi amigo...
gimo un poquito, me duele el pecho, me acomodo la cánula...
tengo la boca seca...
suspiro con prudencia y me froto los ojos...
en ese momento escucho que la puerta se abre...
- ¿cree que podría tomar agua?
- no lo sé...
la sola voz de Rosario me asusta... la miro, luce un traje azul, esos que llaman quirúrgicos, ladeo la cabeza, y la miro con atención, pero no puedo ocultar mi cansancio... ella me mira preocupada, con las manos empuñadas a la altura del pecho...
- ¿que haces aquí?
traga saliva... supongo que no tengo buen aspecto...
- vine a verte tonto ¿no es obvio? ¿como te sientes?
- cansado...
mi voz en susurro no es tan sensual como pensé...
se muerde los labios y los ojos le brillan...
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❖ 𝐌𝐚𝐟𝐢𝐚 𝐝𝐞 𝐑𝐞𝐲𝐞𝐬: 𝐋𝐚 𝐑𝐞𝐛𝐞𝐥𝐢ó𝐧 ❖
ActionDespués de que Isaac consumara su plan en Italia y resultara victorioso, llegó el momento de enfrentar a los locales, fue así como, después de unos meses, volvió a casa una vez que creyó que se encontraba mejor, pero no podía estar más alejado de la...