10

305 40 3
                                        

—¿Te parece si salimos? Alonso me comentó que mañana no tienes clases y ademas tienes dia libre en el trabajo, y bueno...—rascó su nuca, mientras caminaba ansioso por su habitación.—Si no quieres, no te preocupes, tal vez otro día.

Bryan había tomado valor para hablarle a Zoe por teléfono, esa chica lo estaba volviendo loco.

Me parece perfecto, me vendría bien un poco de distracción.—le contestó y sintió la tranquilidad volver a su cuerpo, se sentía como un niño pequeño.—Y bien, ¿a donde piensas llevarme?.

Zoe se encontraba en él suelo revisando sus fotografías para él proyecto final que tenía que entregar en un mes.

—¿Te parece al parque de diversiones?.—sugirió, fue él primer lugar que vino a su mente, la verdad es que no tenía nada planeado.

Me parece.—tomó una fotografía y la alzó para verla a mas detalle.—¿A que hora?

Paso por ti en una hora.

Se despidieron y colgaron. Bryan de inmediato se dirigió a su armario, quería causar una buena impresión en ella.

Y por otro lado Zoe solo se dedico toda esa hora a continuar en la búsqueda de su proyecto, al fin y al cabo ya estaba lista.

Bryan llego puntual a tocar a su puerta, al hacerlo no dejaba de secarse él sudor de sus manos en sus pantalones negros desgarrados. No paraba de cuestionarse que era lo que le pasaba.

—Hey, hola.—lo recibió con un abrazo, Zoe.—¿Gustas pasar?

—Si no hay problema.

—Que va, anda, pasa.—se hizo aun lado para dejarlo pasar.

Entro al pequeño pero acogedor departamento observando, tratando de captar cada detalle.

—¿Quieres algo para tomar?.—le ofreció mientras se dirigía a la cocina.

—No, gracias.—le sonrio agradeciendole. Alcanzó a ver un pequeño desastre en la habitación del fondo.—¿Qué hacías?

Preguntó curioso mientras Zoe regresaba con él.—Estaba revisando unas fotografías para mi proyecto final. Ven.

La siguió hacia la habitación y al entrar quedo maravillado, era como un pequeño mundo, había varios cuadros con fotos y cuadros que supuso ella había pintado, pues había esparcidas varias pinturas y además olía a aceite y acetona.

—Eres muy talentosa.—comentó sorprendido. Y se percató de las fotografías que se encontraban en él suelo.—Debe ser difícil elegir entre tantas obras maestras.

—Lo es. Y no por que sean obras maestras, sino por que cada una es única, muestran una historia y un sentimiento diferente.—dijo Zoe mientras veía las fotos.—Estoy en busca de la fotografía perfecta, una en la cual cuando la veas te haga sentir algo, que te enchine la piel sin necesidad de que te identifiques con la historia.

Bryan cada vez quedaba mas maravillado con ella, era fascinante.

—Pero bueno, basta, dejemos de hablar de mí.—rio levemente.—¿Te parece si nos vamos?

«»

Bryan trató de imitar la forma en la que Zoe caminaba pero exagerando.

—Que tonto eres.—golpeó su hombro riendo.

Para Zoe la incomodidad que le causaba Bryan cuando lo conoció había desaparecido. Aunque para su mala suerte, él hacia muy obvio que la pretendía, pero trataba de ignorar ese punto y relajarse.

fame ; j.c [ cancelada ]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora