No sabía que terminaría amándote.

7. "Sólo los dos sabemos la falta que nos hacemos."

-Eso no ha estado nada mal-Dijo Harry con una sonrisa torcida-

-No te acostumbres-Dije con aires victoriosos, en realidad sabía que se moría por mis besos-

Me dio un corto beso en los labios y su mano se entrelazó con la mía.

-¿Dónde quieres ir para celebrar lo de las notas?-Dijo Harry sin dejar de mirarme a los ojos-

-Primero necesito ir a mi casa, después podemos ir a la piscina.-Dije, ya que hacía un calor horrible, era uno de esos días muy calurosos que aquí en Londres solo pasan tres o cuatro veces al año-

-Tú mandas-Al decir eso Harry, me sentí algo mal, siempre soy yo la que “manda”, por decirlo de alguna manera-

Llegamos a mi casa, después de un camino que se hizo algo largo ya que no hablábamos nada, sólo íbamos mirando el paisaje desde el coche.

Llegamos a la calle donde se encontraba mi casa, bajamos del coche, metí la llave en la cerradura, no había nadie, como suponía, pero tenía que dejar todas las cosas en mi casa, no quería cargarlas. Estaba a punto de pisar el primer escalón para subir a mi habitación, cuando giré mi cuerpo en dirección a Harry.

-Sube si quieres, pero si está muy desordenada no entras-Dije con tono autoritario, no me gusta ser así con Harry, en realidad es un buen chico, pero a veces no puedo evitar ser tan fría-

-No creo que horrorice, habré tenido la habitación peor que tú-Dijo mientras reía, su sonrisa era simplemente alucinante-

-Espero que no te horrorices-Dije uniéndome a sus risas-

Subimos las escaleras, estaba concentrada en cada escalón subía, hasta que un fuerte agarre de mi trasero me hizo sobresaltar.

-Me encanta como reaccionas cuando te agarro el trasero-Dijo Harry divertido-

Seguí subiendo las escaleras pasando de lo que me había dicho Harry.

Llegamos a mi habitación que por suerte estaba ordenada.

Saqué un par de biquinis del armario, unos shorts y una camiseta que dejaba ver el ombligo.

Me metí en el baño con la intención de cambiarme, pero mientras llegaba al baño Harry dijo algo:

-Puedes cambiarte aquí si quieres, no me importa

Rodé los ojos, pero tuve una idea, le gastaría una broma. Retrocedí unos pasos hasta llegar a Harry, me puse en frente de él, desabroché el botón de los pantalones, baje con mucha lentitud la cremallera y Harry tragó saliva.

-Te has quedado con las ganas-Dije muy divertida-

-Eh, no es justo, una vez que empiezas lo acabas-Dijo Harry muy indignado-

Me metí en el baño mientras reía, me puse el biquini, después unos shorts y una camiseta, me dejé el pelo suelto. Salí del baño y me encontré a Harry mirando las fotos detenidamente. Cogí todo lo necesario para la piscina.

-Harry ¿quieres una toalla?

-No, no te preocupes

-Veo que ya tienes el bañador, así que vámonos directamente a la piscina.-Harry se había cambiado mientras yo estaba en el baño, puesto que antes tenía unos pantalones ajustados-

Nos subimos en el coche y le fui indicando el camino hasta llegar a la piscina municipal. Hoy era uno de los pocos días que la piscina estaba abierta debido al buen tiempo.

Había poca gente, algunos adolescentes y algún que otro adulto.

Fuimos rápido para coger unas tumbonas, me quité la ropa y me quedé solo en biquini, me puse protección solar y las gafas de sol y me tumbé en una de las tumbonas a tomar el sol.