Genesis.

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—Estás bien? —pregunto, esa voz que reconocería en cualquier parte.

—Sí—suspire—Oh dios estuve a punto de morir —me abrace mas a él, no me importaba en estos momentos que me sacara de quicio algunas veces.

—Tranquila —acaricio mi cabello cariñosamente, como nunca lo había visto hacerlo, lo hacía tan lentamente como si me fuera a romper si agregaba un poco mas de presión.

—Me salvaste la vida —susurre atónita, sentí como sonrió cerca de mi cabello y me beso la cabeza.

.—¿Te hiciste daño? —pregunto tomando mi rostro con ambas manos.

—Creo que no —suspire, y mire su ropa.

Ya no llevaba sus acostumbradas chaquetas y camisas, si no que llevaba ropa verde y café, ropa de camuflaje, como la mía.

—¿Qué hacías aquí?

—Yo...ehh —Por primera vez veía a Samuel de Luque nervioso. —Quería investigar a la competencia —respondió naturalmente, me miro curioso. — ¿Y tú? Por esa ropa al parecer estabas espiando.

—Charlotte me mando a vigilar a Rubén —mentí. —Al parecer no está, así que los dos perdemos nuestro tiempo —me levante de sus brazos y pude observar como perfectamente teníamos una vista panorámica de la entrada a la mansión.

—Mira —apunto hacia la entrada, levantándose. — ¿Ese no es el auto de Rubius? —apunto a su Porshe negro. —Al parecer no vinimos para nada —se coloco sus binoculares, iguales a los míos, ambos veníamos con la intención de espiarlo.

Aunque por motivos diferentes. Me coloque mis binoculares, que además tenían visión nocturna, podía ver perfectamente pero de color verde. Vi como estaciono su auto al frente de la puerta de entrada a su mansión. Bajo del lado del piloto, y rodeo el auto para abrir la puerta del copiloto.

Qué raro, pensé. Esta acompañado, pero no por un chico o si no, no haría eso. Una oleada de celos me recorrió como nunca me había pasado. Haciendo que respirase pesadamente. Cuando vi quien bajo del lado del copiloto, mi mandíbula perforo el suelo, no literalmente claro. Si no fuera porque Samuel estaba tan atento a la escena, lo hubiera notado.

En el rostro de Rubén no se visualizaba ninguna expresión, no sabía si estaba feliz, enojado o lo que sea. Nada.

Tomo la mano de Génesis y la guió hasta la entrada, donde con la mano que estaba libre saco las llaves del bolsillo trasero de su pantalón. Pero antes de que pudiera abrir la puerta, Génesis lo tomo por la camisa con su mano izquierda.

La expresión de Rubén seguía siendo nula.

Genesis poso sus labios sobre los de él, dándole un beso que estaba lo más lejos de ser tierno, ella soltó sus manos entrelazadas y lo atrajo con una mano desde su cuello hasta ella para profundizar más el beso.

||PAUSADA||Esclava de la vida, pero no de la mia|| Rubius & Tu.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora