Crudo | Harry Styles |

Capítulo cuatro

Empujo el carrito de compras sin ganas por los pasillos brillosos y luminosos del supermercado. Aún lado mio va el chico de cabellera  castaña.

-Ahora vuelvo iré por unos shampoos -Louis habla mientras se pone en marcha y se escabulle entre los pasillos.

Estaba en el pasillo de "cereales y lácteos " para ser sincera son los productos que más compro.

Cereal y leche, era mi desayuno de todos los días y aveces cuando se me apetecía un poco, era la cena.

Avanzo con pesadez en busca de mi cereal favorito y lo encuentro en el último piso del estante, un suspiro de derrota se me escapa de mis labios, estoy a punto de decidirme por otro, pero me doy aliento a mi misma y voy por ese.

Trato de dar un brinco para alcanzarlo pero fallo, mis rodillas se aguadan y el coraje de la impotencia hace que prosiga, no me voy a dar por vencida.

Respiro un poco por lo bajo, controlando mi sistema, me pongo en puntas mientras estiro mi cuerpo y doy otro brinco, esta vez mis manos tocan el material de la caja, logrando mi objetivo, la caja pesada se balancea sobre mi y soy capas de sostenerlo en mis manos cuando se deja caer.

Una sonrisa triunfante se posa en mis labios. Pero se esfuma cuando me acuerdo que necesito otra caja más para completarlo en mi lista de compras.
Me muerdo el labio inferior y observo el estante, sé que no voy a poder alcanzar otro.

Pero esfumo todo pensamiento negativo.

Esta vez usare otra estrategia, coloco mi pie en el primer piso del estante y con el otro me impulso desde el suelo, estiro mi brazo derecho hacia la caja más próxima que pueda tocar, mientras la otra se aferra a uno de los pisos del estante, mis dedos alcanzan el estante pero solo el polvo esparcido sobre el se impregna en mi piel.

Hecho mi cabeza hacia abajo y estiro un poco más el brazo, el esfuerzo ejercido era mayor que antes. Mi cuerpo estaba temblando y podía sentir una gota de sudor fría bajar por mi espalda. Una sonrisa jadeante se me escapa de mis labios cuando logro tocar la caja de cereal.

Pero un movimiento en falso hace que mi pie resbale del estante y mi cuerpo pierda el equilibrio, no tengo tiempo de reaccionar y mi espalda impacta brutalmente contra el suelo frío y limpio.

«¡Qué estúpida!

Un quejido sale de mis labios y trato de recuperar mi vista nublada y aturdida por el crudo golpe que me di en la cabeza. Trato de confirmar que este bien llevando mis manos hasta la parte trasera de mi cabeza pero soy consiente del alboroto que eh provocado, veo algunas personas asomarse por el inicio del pasillo pero no hacen más que ver y reírse internamente.

«Idiotas.
Pienso.

-¡Gen! -Una voz aguda estalla a lo lejos de mi y soy capas de ver a Louis hasta llegar a mis pies.

Deja un par de botellas en el carrito para luego encorvar su cuerpo hasta mi altura y tomar de mi brazo. Jala fuerte y suave al tiempo en que mi cuerpo se pone de pie.

-¿Estas bien? -pregunta con aire preocupado, le doy una mirada soñolienta y me obligo a cerrar los ojos por unos instantes, hasta que me siento más tranquila. Asiento con la cabeza levemente.
-No puedo creerlo -dice divertido, una sonrisa se inserta en sus labios para después hablar. -Te dejo un par de minutos y causas desorden, me impresionas Grisson.