2. Valencia.

2.5K 222 17
                                    

Íbamos en el AVE, como Charlie me había dicho que se llamaba, pues me corregía cada vez que lo pronunciaba mal o directamente le decía "tren" porque me era más fácil pronunciarlo ya que se parecía al inglés; train.

Era enorme y parecía un avión, tanto por fuera como por dentro. Estaba maravillada y encantada, pero no solo por el propio transporte en sí, si no por lo que había visto de la propia ciudad madrileña en la semana que estuve aquí.

Charlie y Jake me habían llevado a un grandioso parque que se llamaba "El Retiro", o eso creía porque no recordaba muy bien el nombre, que estaba en el centro de la ciudad donde pudimos navegar en una especie de estanque con unas barcas.

También fuimos a un teatro a ver una obra muy bonita que me hizo llorar, paseamos por una calle llamada "Gran Vía", compré muchos recuerdos, fuimos a unos museos, plazas, vimos muchos monumentos espectaculares, comimos mucha comida típica deliciosa y lo había pasado en grande.

Pero ahora Charlie y yo estábamos sentados en dos sillones con una tabla en medio imitando una especie de mesa mientras que una pareja de chicos de nuestra edad, más o menos, iban sentados de frente a nosotros, al otro lado de ese pedazo de madera.

Tenían un acento aún más extraño que el madrileño que había oído y su idioma nunca lo había escuchado, por no decir que no entendía absolutamente nada y me quedaba mirándolos intensamente con la boca abierta de curiosidad mezclada con asombro.

—Katie, no seas descarada, deja de mirarlos así. —Charlie, riendo, me dio un codazo llamando mi atención.

—Es que no sé qué idioma están hablando y me da curiosidad. Es extraño. —Fruncí el ceño y él rió.

—Están hablando en catalán, por eso no los entiendes. Yo tampoco, la verdad. —Murmuró para que los chicos no supieran que hablábamos de ellos.

—¿Y ese idioma de dónde es? Nunca lo había escuchado. —Ahora era la pareja quien nos miraba a nosotros con algo de curiosidad por hablar en inglés.

—De Cataluña, aunque el valenciano se parece mucho. Hay gente que dice que es el mismo idioma, otros que no... Es como el inglés americano y el inglés británico. Más o menos. —Se encogió de hombros indiferente y yo asentí sin tener mucha idea de lo que me estaba hablando.

Teníamos un mapa de toda España encima de la mesa por nuestro lado, pues mi amigo me estaba diciendo por donde íbamos, donde estábamos y donde iríamos, así como tachando las ciudades "despejadas" donde mi padre ya no estaba, por lo que señaló con el dedo la parte superior derecha de la península ibérica.

—¿Eso es Cataluña? —Le pregunté con una pésima pronunciación y asintió aguantando la risa.

La pareja no aguantó, se rió cuando nos vio señalar la provincia de "Cataluña" en el mapa y por oírme decir ese extraño nombre, así que supuse que habían entendido que hablábamos de ellos o de su acento y que mi acompañante me estaba explicando la procedencia.

En la siguiente parada, ellos dos se bajaron despidiéndose de nosotros con la mano, los despedimos y el AVE se puso en marcha de nuevo, así que miré por la ventana y el sueño me venció en la batalla enseguida por culpa de haberme dormido tarde anoche.

Abrí los ojos sobresaltada con la melodía de mi teléfono móvil y los zarandeos de Charlie a mi lado, dándome cuenta de que me estaban llamando y de que mi amigo se estaba levantando con su maleta de viaje.

Me levanté igual para cargarme la enorme mochila de aventuras a la espalda y descolgando el teléfono móvil para atender mientras nos bajábamos del enorme AVE entrando a la estación de la ciudad de Valencia.

Kay.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora