Tan mía (con Logan Henderson)

Capítulo 11:

-¿A dónde? ¿Es broma? -me dijo Macy-.

Yo reí.

-No, el lunes nos vamos y venimos el próximo sábado, teniendo un día de descanso antes de volver a clase. El vuelo sale por la mañana, hace escala en la capital de España y luego bajamos a Canarias. Llegaremos al otro día pero... Podemos disfrutar dos semanas fuera de aquí, que era lo que queríamos. En cuanto al precio, se que no es muy barato, pero en total son 540 dolares. Mi madre me ayudó a organizarlo todo. Nos quedamos en la casa en la que yo veraneo, la comida la pago yo, y la estancia igual. Hay una furgoneta que podemos usar, cabemos los ocho y solo habría que pagar la gasolina. -Todos estaban en silencio, así que dude si les gustaba-. ¿Os gusta? Aún estoy a tiempo de cancelarlo...

Unos aplausos y vitoreos me interrumpieron. Laura y Macy estaban muy emocionadas, y los demás super contentos.

-¿Bromeas? Es lo mejor del mundo. -dijo James-. Nos vamos de vacaciones, y a la playa encima. Eso es lo mejor. -me dijo-.

-Pues muy bien, mañana me dáis el dinero y compro los pasajes, que ya están reservados. Lo pasaremos genial, ya veréis. -dije-.

Logan me hizo un gesto de aprobación, y me aplaudió.

Yo me acerqué y le di un beso, delante de todos, por lo que provocamos un "uuuuh" general.

-¿Ya son novios? -dijo Macy-.

-No, aún no. -dijo él-.

Aún. Sonreí.

-Pronto, seguro. -dijo Lex-.

-Espero. -dije-. Si me disculpáis, voy fuera a hacer una llamada.

Salí de la habitación y lo que me encontré fuera nunca me lo hubiera esperado. En la pared de en frente, estaba Guideon apoyado. Intenté ignorarlo y llamar por teléfono. Pero se acercó y me agarró por los hombros, zarandeándome y empujandome contra la pared en la que él estaba apoyado.

-Esto, porque Laura ya no quiere estar conmigo. -me dijo. Y me pegó una patada en el costado, que me retorció-. Y esto, por fastidiar mi reputación. -Acto seguido, me dio otra en el estómago, que me hizo toser-. Y esto, por joderme la noche. Pero aún queda lo peor. -me sonrió amenazante-.

Hizo el amago de darme un puñetazo, pero se lo impedí, dándole una patada en las piernas que consiguió ponerle de rodillas en el suelo. Aproveché y me levanté, dando golpes en mi puerta en señal de que algo malo ocurría. Guideon se levantó rápido y me apartó de la puerta, y, de espaldas a ella, comenzó a empujare contra la pared. De repente, ya no sentí sus brazos dañándome. En un segundo, Logan estaba sobre él en el suelo dándole puñetazos. Yo lloraba y les gritaba que se separaran, pero Guideon daba guerra y le lanzaba puños aleatoriamente. Macy se fue corriendo y volvió con él de seguridad, que los separó.

Solo dos semanas aquí y ya estábamos en el despacho del director.

-Miller, ¿podría contarme usted que ha pasado? Desde el principio. -me pidió-.

Miré a todos. Todos estaban allí, Logan, Carlos, Lex, James, Kendall, macy y Laura.

-Todo empezó en una fiesta a la que fuimos el viernes pasado, señor director, ajena a la facultad. El alumno mantebía una relación sentimental con mi amiga, pero no andaba bien. Él, borracho y afectado por verla allí, la agarró y comenzó a insultarla a ella, a Macy, y a ellos -señalé a los chicos- e incluso me nombró a mí. Cosa que no me importó, pero si se mete con mis amigos, se mete conmigo. Yo le dije un par de cosas sobre él, verídicas, pero no le sentaron bien. Seguridad se lo llevó. Él me culpa de eso y de que todos ahora sepa que no es un chico tan bueno como parece. Al salir de mi habitación, me lo encontré. Él, comenzó a pegarme patadas... Logan, al ver que me estaba agrediendo, me defendió, no pudo hacerlo de otra manera ya que el alumno actuó de una manera muy violenta. -me expliqué-.

Se hizo un silencio horrible. El director miró una carpeta que tenía delante de él, y la abrió, leyendo su interior. Finalmente, habló.

-Señorita Miller, no me gustan las peleas. No me gustan que mis alumnos actúen de manera violenta, y menos si es contra un inocente, o una mujer. Se que usted se podría defender, igual que cualquiera, pero no me parece correcta la actitud. Y tomaré medidas contra él. En cuánto a usted, lo dejaré pasar por su expediente impecable, porque su padre es un gran ex alumno de aquí y ha dejado el nombre de esta facultad muy alta, y porque su explicación me ha convencido. En cuanto a usted -miró a Logan- señor...

-Henderson, Logan Henderson. -dijo él, acercándose a mí-.

-Señor Henderson, en cuánto a usted, podría ponerle una amonestación por pelear en un recinto privado y ajeno a usted y prohibirle el paso.-Hizo una pausa-. Pero no lo haré porque si usted no hubiera estado ahí, probablemente la cosa hubiera ido peor. Así que, solo me queda darle las gracias. -Dijo-.

-No hay que darlas, solo espero que el alumno tenga el castigo que merece. -dijo él-.

-Lo tendrá, se lo aseguro. -dijo-. ¿Pasaréis estas dos semanas fuera? -preguntó-.

-Sí, nos vamos el lunes. -le dijo Laura-.

-Espero que lo pasen bien y que les sirva para despejarse de lo ocurrido. Ya se pueden ir, buenas noches. -dijo-.

Nos despedimos y volvimos a nuestra habitación todos juntos.

-Para cambiar de tema. Miranda, ¿qué tan importante es tu padre? -dijo Kendall-.

Todos reímos.

-Es el pez gordo de los jueces. No te recomiendo demandarme, digamos que te dejaría sin casa. -Kendall fingió susto y todos reimos-. Solo bromeo, es importante solamente, es conocido. Dejémoslo así. -dije-.

-¿Y tus notas son tan buenas como para sacarte de líos? -dijo James-.

-Como para venir a estudiar aquí sin pagar nada más que la residencia. -dije-.

-Empollona. -dijo Laura-.

-Se quejó mi gran estudiante. -le dije-.

Me abrazó y me susurró un "gracias" en el oído, por lo que la apreté mucho más fuerte.

-Bueno chicos, yo creo que va siendo hora de que nos vayamos. Hay muchas maletas que preparar. -dijo Carlos-.

-Sí, y yo tengo sueño. Y mucho. Me dijo Alexa-.

-Id vosotros, yo os veo en casa. Me quedo con Miranda. -dijo Logan-.

Todos salieron de mi a¡habitación, despidiéndose y dándome las gracias. Cerré y quedamos solo Logan y yo. Éste se acercó y me abrazó muy fuerte. Nos sentamos en la cama.

-¿Estás bien? ¿Te hizo daño? -me preguntó-.

-No físico, estoy peor anímicamente. No puedo creerme que me haya pegado... -dije-.

Pero fue lo último que dije, puesto que volvió a abrazarme.

-Nunca te vayas. -me dijo-.

-Nunca lo haré. Y tenemos dos semanas para estar juntos. Van a ser geniales. -le dije-.

-Eres alucinante, has hecho tanto por nosotros... -dijo-.

-Sh, solo es que os quiero. Y lo voy a demostrar. -le dije-.

-Mi superheroína. -me susurró-.

-Te quiero. -le dije-.

-Y yo a ti, pequeña. Prepárate para las dos mejores semanas de nuestra vida. -dijo-.

-Sin duda lo serán. -aseguré-.