Juls - L.S ©

Louis: Reveal

―Por supuesto― respondió al instante Julianna, buscando algo dentro del bolso de su sudadera la cual prácticamente se me hacía conocida. ―, todo lo que necesitamos comprar esta anotado en esta hoja― meneo su mano con aquel pedazo de papel doblado.

Asintió.

Caminábamos sin mucha apuración en aquel supermercado que se encontraba cerca de la residencia de Liam. Teníamos una lista enorme de cosas que necesitábamos comprar para nuestra fiesta de año nuevo y en cierta manera agradecía la presencia de la pelirroja en la casa porque ella se había encargado de quitarme el tener que ayudar a Liam con la preparación de las cosas, además de que haber sido la que nos alimentó.

Por otro lado, el hecho de haber logrado que Liam la adorara, en un buen sentido, me cabreaba a sobremanera. Me había hecho reír con alguna de sus bromas o tonterías de chica, pero eso tomaba realmente poca importancia por el simple hecho que no podía quitar de mi cabeza que ella era la nueva pareja sentimental de Harry.

Y aunque Liam aún seguía insistiendo en que tal vez era sólo paranoia mía, algo me decía que no era así. Julianna no trabajaba con Modest! En realidad, no tenía nada que ver con algún truco publicitario para ganar más fama. ¿Cómo lo supe? Sencillamente, Modest! llego a preguntarme si sabía algo concreto sobre lo que estaba sucediendo acerca de Harry. ¿Qué podía decir? No sabía demasiado sobre él si no era gracias a Niall o a Liam.

Y bueno, no sé qué era lo que me hacía enojar más, la realidad de que yo haya terminado con alguien como lo era Harry o que él haya encontrado a alguien aparentemente mejor que yo.

Julianna era mucho mejor, era linda con esos ojos azules, su cabellera larga, lisa y pelirroja, su piel lechosa, las pequeñas pecas de sus mejillas y el envidiable cuerpo lleno de curvas que
le resaltaban; su gran amabilidad, una gran cocinera, divertida, risueña y lo más importante, una chica.

UNA CHICA.

Él no tendría problemas con la sociedad al estar con ella.

En otras palabras, ELLA es lo que el necesita a su lado y tal vez todo lo que yo no podría ser para él. ¿Cómo podía siquiera compararme?

―Deja de hacer eso Louis― exclamo molesto el castaño, reprochándome con la mirada.

― ¿Qué?

―Deja de compararte con ella. No es nada sano para ti que te estés haciendo menos por una chica. ― negó, mientras fijaba su vista en la silueta de la pelirroja, quien daba saltitos de felicidad mientras andaba por los pasillos del supermercado.

―No es algo que quiera discutir en este lugar, Liam.

―Pero es algo que puedes dejar de hacer, Louis, sólo es una chica que no puede hacer más que ningún daño. ― suspiro ― Eres el único aquí que se está alterando por una simple y sencilla chica pelirroja que conoce al rizado…Sólo, sólo deberías dejar depensar las peores cosas y tratar de vivir.

― ¿En realidad crees que no lo intento? ― negué ―Es lo que más he tratado de hacer por casi más de un año, no me vengas con esas estupideces, que el que sufre aquí soy yo y por una pendejada que cometí.

―No discutiré las malas decisiones que has tomado― me miro severo, entrecerrando los parpados y las facciones del rostro totalmente neutras.

―Yo, Liam, en verdad no quisiera hablar de esto― aclare cabizbajo.

Y en serio no quería tocar ni una pizca de todos aquellos errores que había cometido a lo largo de mi vida, a lo largo de todo aquello a lo que ni siquiera podía llamar “vida”. No quería tocar ni el más pequeño error que pude cometer, simplemente no quería recordar todo a lo que me había llevado una mala elección.