INTRODUCCIÓN E INFORMACIÓN

3.3K 233 28
                                    


¡Muy buenas!

Aquí os traigo un fic cortito que he tardado exactamente una semana en escribir.

Antes de la intro, me gustaría dar algunos datos que considero importantes sobre la historia:


-El fic está basado en los universos de Supernatural y Teen Wolf, aunque he quitado a algunos personajes de esta última y me he inventado algunas cosas.

-Al ser hijo de los Winchester, Stiles no se apellida Stilinski, sino que su nombre es Stiles como tal.

-Los pairings son Wincest (Dean/Sam) y Sterek (Stiles/Derek), pero el principal es Sterek

-He catalogado el fic como contenido adulto, aunque el verdadero raiting que le pondría sería +16

-SE ME HA IDO LA OLLA y, como me encanta complicarme la vida, voy a recrear las conversaciones de Whatsapp en imágenes, como si los personajes de verdad estuvieran usando la aplicación, ya que considero que las transcripciones textuales son muy liosas (sobre todo cuando hablen tres en el mismo grupo). De todas maneras, debajo de las conversaciones las tendréis igualmente transcritas por si hubiera algún problema y no pudierais ver las imágenes.
(Es probable que las transcripciones no sean exactas a las conversaciones de whatsapp. Esto se debe a que primero escribí todas las conversaciones y al publicar el fic se me ocurrió usar Photoshop para crear la imagen del whatsapp, y por apurar y no tardar mucho he resumido algunas cosas, pero no afecta en absoluto a la información)

Creo que no me dejo nada.

Os dejo una introducción rápida para contextualizar la historia.

¡Espero vuestros comentarios! ^^

__________________



Introducción

La vida de los Winchester nunca había sido fácil.

John y Mary habían contraído matrimonio y vivido juntos y felices hasta aquella fatídica noche. Un demonio entró en la habitación del pequeño Sammy, el menor de los dos hijos que tenían y que era tan sólo un bebé de pocos meses. Su madre entró, alertada por el llanto de su bebé, descubriendo el escorzo de aquella figura sumida en la semioscuridad de la estancia.

Creyéndolo su marido, Mary bajó al comedor y encontró a John viendo la tele. Entonces, presa del pánico, volvió a subir para intentar salvar a su pequeño.

John subió tras de ella, pero fue demasiado tarde: su mujer había encontrado la muerte y ese ser había desaparecido, provocando un incendio en la casa.

Dean apenas tenía cuatro años cuando aquello pasó. Recordaba muchas cosas, como los gritos de su padre, cómo le colocaba a Sam en sus brazos y le decía, entre lágrimas, que agarrara bien fuerte a su hermano y saliera de casa cuanto antes.

Pero fue imposible salvar a su madre, ya que el fuego había comenzado a arder en su propio cuerpo.

Desde entonces, John dedicó todo su tiempo a buscar venganza, dar caza a aquel demonio y hacerle pagar por el daño que había causado en su familia.

Dean y Sam fueron arrastrados con él, viéndose el primero contagiado por esa sed de venganza dirigida hacia el ser que le había arrebatado a su madre.

Fueron criados como cazadores, como pequeños soldados, yendo de motel en motel y llevando una vida tan sedentaria que les impedía hacer ni siquiera amigos. Toda relación que conocían era la que mantenían con Bobby, otro viejo cazador, que alguna vez se hacía cargo de ellos cuando paraban en ciudades cercanas a su hogar.

Una vez te convertías a cazador, lo eras para toda la vida y a todos los efectos. Ya no sólo valía buscar venganza con aquel demonio fugitivo, sino que se sentían en la obligación de salvar a toda persona que corriera peligro por parte de criaturas sobrenaturales: fantasmas, wendigos, hombres lobo... infinidad de monstruos que poblaban el planeta y cuya existencia sólo unos pocos conocían.

Al contrario que Dean, Sam nunca se sintió cómodo con esa vida. Odiaba ir de colegio en colegio, soportando malas miradas, siendo el rarito, ocultando cosas y dado explicaciones envueltas en mentiras a personas que no las merecían.

Esperó a cumplir la mayoría de edad, y entonces se matriculó en la universidad alejándose de Dean y su padre.

Él quería una vida normal, estudiando una carrera normal y teniendo problemas normales.

Pero él no contaba con que podría venírsele encima el mayor de los "problemas normales" que atormentaban a muchos jóvenes: dejar a su novia embarazada.

La noticia no fue acogida con mucha alegría. Barajaron varias posibilidades, ya que un bebé supondría un cambio radical en sus vidas, pero Jess no quería abortar y entre los dos decidieron seguir adelante con el embarazo.

Buscaron trabajos a media jornada, compaginándolos con la universidad, hasta que Jess tuvo que dejar de acudir a ambos sitios durante su último mes de embarazo.

Dean y su padre supieron de la existencia de Stiles cuando Sam les llamó desde el hospital. Desde que se había independizado hacía un año no había hablado con ellos, desapareciendo por completo del mapa.

Acudieron a verles días después, pero al marchar volvieron a distanciarse no sólo físicamente. Las ansias de encontrar al demonio tenían a su hermano mayor y a su padre completamente concentrados en la tarea, y Sam sólo podía pensar en su hijo y en que no le faltase de nada.

Tanto él como su novia tuvieron que dejar la universidad, incapaces de compaginar tantas cosas.

Meses después del nacimiento del pequeño, Dean se presentó en casa.

Su padre había desaparecido, y necesitaba que Sam le ayudara a encontrarlo.

Consiguió convencerle para que fuera unos días con él para intentar localizarle.

Tras hacerse cargo de un par de casos de fantasmas y trotapieles, Sam quiso regresar. Quizás su padre había querido desaparecer voluntariamente para no cargar a Dean con tantas responsabilidades, ya que llevaba haciéndolo desde que el rubio tenía tan sólo cuatro años.

Al llegar a casa intuyó que algo no iba bien.

Fue demasiado tarde cuando se dio cuenta de que la historia se repetía: el demonio, Jess estallando en llamas y el incendio destruyendo la casa.

Cogió a Stiles, que lloraba en su cuna, lo protegió con sus brazos y salió de allí todo lo rápido que pudo.

Dean llegó poco después tras ser avisado por su hermano.

Tenían un demonio que asesinar, un padre que encontrar y un hijo que educar.





EL LOBO Y EL CAZADORDonde viven las historias. Descúbrelo ahora