Capítulo 25

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Ilhoon buscó a su padre con la mirada pero no lo vio, se acercó lentamente y lo vio en el piso cerca del mueble.

-¡Papá! -se acercó rápidamente a él y lo ayudó a ponerse de pie pero él no respondía -¡Kyung! ¡Kyung!

La señora Kyung entró corriendo y dio un gritico de asombro al ver la escena.

-¡Llama al doctor, ya! -le ordenó Ilhoon y ella acató la orden.

-¿Qué pasa? ¿Por qué tanto escándalo? -Junsoo entró al despacho y gritó como loca -¡Aah! Por Dios, mi esposo -se acercó a él y simplemente se quedó de pie, un poco inclinada y con cara de horror.

Es una falsa.

-Aléjate -escupió Ilhoon sin pensarlo.

-¡Insolente! Es mi marido.

-Deja de fingir que te importa que esa faceta de inocente y desentendida no va contigo.

-¡Eres un mal agradecido...

-¡Señora! Por favor -habló el doctor entrando al despacho -Su marido necesita calma y usted gritando lo altera más.

Ilhoon ayudó al doctor a enderezar a su padre y juntos lo llevaron a la habitación.

-Doctor ¿Qué tiene mi marido? -el doctor le dio una corta mirada a Ilhoon y este negó levemente.

-Estrés, su esposo necesita descansar de vez en cuando -el doctor guardó su estetoscopio y cerró su maleta -Ahora si me permite me gustaría hablar con el joven Ilhoon.

Junsoon suspiró enfadada y salió de la habitación.

-¿Mi padre estará bien? -preguntó preocupado.

-Sí, es solo una pequeña crisis, la primera de muchas pero se pondrá bien, necesita mucho reposo y estar lo menos posible cerca del trabajo, eso lo estresa bastante -Ilhoon suspiró y miró levemente a su padre -Hijo, ahora más que nunca necesita tu ayuda, y sabes que más que su doctor soy su amigo, y te conozco de toda la vida, se como eres, pero él te necesita.

Ilhoon permaneció callado por unos segundos y luego asintió.

-Sí doctor Im.

El señor Im asintió y se fue.

Ilhoon se sentó junto a su padre y suspiró, estaba agotado, primero Sun evitandolo y ahora su padre, lo único que quería era que todo volviera a cuando estaba su madre, era un niño feliz, con una familia, pero cuando su madre los dejó, todo cambio, su familia y todo él, ahora era frío y distante, arrogante y egocéntrico, y hasta podía llegar a ser cruel.

Recordó a su madre, cuando le daba un beso en la frente antes de dormir, cuando abría delicadamente la puerta y se sentaba en su cama para despertarlo, cuando le hacía los desayunos especiales solamente para él, cuando solían ir los fines de sanan a la casa de su tía y ahora ni siquiera habla con ella. Sin darse cuenta comenzó a llorar, las lágrimas resbalaban por sus mejillas y no podía hacer nada para evitarlo.

-Ilhoon -su padre despertó.

Hoon se secó las lágrimas rápidamente y lo miró.

-Papá ¿Cómo te sientes?

-Tengo dolor de cabeza, pero nada más -su padre se incorporó en la cama y lo miró -¿Estabas llorando? -Hoon no respondió -Por mamá -Hoon asintió -Yo también la extraño, mucho.

Ilhoon volvió a sentir sus lágrimas salir, pero rápidamente las limpió.

-Hasta mañana -se puso de pie para salir de la habitación de su padre pero lo detuvo.

-No estás así solo por tu madre ¿verdad?

Ilhoon suspiró y miró a otro lado.

-No quiero hablar de eso -su padre lo soltó e Ilhoon salió de la habitación directo a su cuarto.

Al salir a la sala se encontró a las dos mujeres que vivían con él sentadas en el sillón, se quedó, quería saber de qué hablaban.

-¡Pero no es tan malo que muera! -se quejó Hyunsoo.

-¡Cállate! El malcriado te va a escuchar, y por supuesto que es malo que muera, en primer lugar es mi esposo y en segundo lugar, si muere dejará toda su herencia al mocoso, ¿y qué queda para nosotras? Nada.

-¡Ni siquiera lo quieres!

-¡Pero si a su dinero! -Hyunsoo bufó.

-Lo único que quiero es salir de aquí -Hyunsoo se puso de pie dispuesta para irse, pero en es momento Hoon decidió salir.

Ilhoon camino tranquilamente a través de la sala, pasando por ellas y haciendo Cómo que no existieran. Junsoo se puso de pie y se acercó a él.

-¿Cómo está? -le preguntó a Ilhoon.

-Ni siquiera te importa -contestó seco y siguió su camino.

Cuando llegó a su habitación se tiró sobre la cama y gruñó en voz alta. Todos sus planes planes de ir a hablar con Sunji se habían ido al carajo, ahora tenía que esperar hasta el día siguiente para arreglar las cosas.

****

-Sunji, hija, levántate ya.

-Papá, no me siento bien -Sun se sentó en la cama y arrugó su entrecejo.

El padre de Sun se acercó y tocó su frente, efectivamente tenía fiebre.

-Bueno, creo que en ese estado no podrás ir, llama a Geun, te traeré sopa y medicamentos.

Sun llamó a Shin y este inmediatamente contestó.

-¡Hija mía!

-No grites, tengo dolor de cabeza.

-¡Ay lo siento! Al parecer alguien se levantó de mal humor.

-No es eso, es que estoy enferma, me duele todo.

-¡Nooo! ¿Por qué? Que débil eres.

-¿Qué?

-¡Mamá, Sunji esta enferma! ¡¿Puedo faltar también?! -gritó Shin un poco alejado del teléfono -¡No! -respondió la madre de Geun -¡Dile a Sun que espero se recupere!

Sun se rió.

-Ya la oíste -habló Shin -Está bien, pasare más tarde pare ver como estas, mañana debes estar mejor -dijo el chico y colgó, no sin antes escuchar un "Sí señor" de Sunji.

Ilhoon llegó a la escuela y fue al casillero de Sun para esperarla allí,  pero no llegó y ya era hora de entrar a clases. Esperó que entrara, pero nunca lo hizo.

No la vio en todo el día, y lo único que quería era hablar con ella, no se atrevería a preguntarle a Joo y menos a Shin, así que prefirió ir a su casa, cambiarse y partir a casa de Sunji.

Fall AgainDonde viven las historias. Descúbrelo ahora