Mi dulce desconocido

Niñeras

Antes de comenzar el capitulo quiero felicitar a SabryCarranza por su cumpleaños, mi hermosa nefilim te dedico este capitulo, espero que hayas pasado este día genial y que lo sigas disfrutando *-* Te quiero y gracias por inspirarme a escribir esta historia, gracias por ser una de mis lectoras mas fieles.

*****************************

-Alexander Gideon Lightwood ¡¿Pero qué demonios te está pasando?! -Preguntó Isabelle tan pronto como Alec atravesó la puerta de la entrada - ¿te alcanzas a imaginar lo preocupada que estaba por ti?

-Lo siento Izzy, me distraje un poco.

-Lo siento Izzy me distraje un poco -gruñó Isabelle haciendo una mala imitación de la voz de Alec -eres un completo idiota Gideon, no puedes volver a hacerme esto, no puedes volverme a preocupar de esta manera, dijiste que te quedarías limpiando, pero no habías vuelto ¿te imaginas lo preocupada que estaba por ti? Casi me matas de un susto, creí que te había pasado algo malo, pero no ¿dónde estabas Alexander? Dime la verdad.

El chico se mordió internamente la mejilla y suspiró profundamente antes de contestar.

-Estaba con un chico.

Los ojos de Isabelle se abrieron de golpe y su enojo se evaporó, siendo reemplazado por la emoción.

-Oh Alec, eso es maravilloso.

-No Isabelle, no es lo que tú te imaginas, era un chico que estaba tirado en la calle, no podía dejarlo ahí, así que lo ayude -intentó razonar Alec, pero estaba hablando de Isabelle, ella no se conformaría con eso.

- ¿Y el chico era lindo? -preguntó emocionada.

Alec rodó los ojos.

-Bueno sí -Alec sonrió tontamente -pero ese no es el punto.

-Alec, se es exactamente el punto, conocer chicos lindos.

El ojiazul puso los ojos en blanco.

-Isabelle no hablé mucho con él, estaba ebrio hasta la médula.

- ¿Y es que eso acaso importa? -Preguntó Isabelle sonriendo con malicia -al menos dime qué te le aventaste.

Alec miró a su hermana con una expresión de horror.

-Isabelle sabes que yo no soy de las personas que se le avientan a los chicos.

Isabelle miró su hermano decepcionada.

-Entonces ¿Qué hiciste con el chico?

-Sólo lo ayude a tomar un taxi para que se fuera a casa, no pasó nada más.

La chica frunció el labio.

-No puedo creer que hayas desperdiciado tal oportunidad.

Ahora Alec miraba a la menor con molestia

-Isabelle sabes que yo no soy así y ahora si me permites, quiero dormir un poco antes de ir a trabajar, tú deberías hacer lo mismo -espetó mientras se acostaba en el piso.

-Alec, si quieres puedes quedarte en la cama esta noche -propuso la chica mirando con un tanto de pesar a su hermano, llevaba tres noches seguidas en el piso, pero Alec negó.

-Tranquila Izzy, tú duerme cómoda allí, yo estoy bien acá.

-Alec... -comenzó su hermana.

-En serio, tienes que descansar para mañana, yo estoy bien -la tranquilizó el chico.