Te Apuesto Mi Vida ❀ Blue Exorcist

-13-

Después de lo sucedido no podía dejar de pensar en las palabras de esa mujer.

- "Soy la que trae desgracia con el conocimiento... la que deja un sendero de sangre solo por diversión... la que se burla de los corazones de la gente... soy la que hizo caer a Akane del cielo al infierno..."

Chasqueé la lengua y seguí caminando en círculos pensando en cómo librar a Akane de aquella despreciable mujer. Todavía trato de comprender aquellas palabras que me había dicho, "hacerla caer del cielo al infierno"... puede que la respuesta sea sencilla a simple vista pero debe haber algo más oculto en sus palabras. Antes de que pudiese notarlo Akane ya estaba despertando, me acerqué a ella con rapidez para verificar que estuviese bien. Tenia tantas cosas que preguntarle.

- ¿Te sientes bien?, ¿no te duele nada? -Dije acariciando su rostro totalmente preocupado-

- Y..Yo... estoy bien... me duele un poco el pecho pero... estoy bien... -Sonrió levemente-

Suspiré y me senté al lado suyo, en verdad necesitaba hablar con ella. Con todo lo que sucedió ya no le queda mas opción que decirme todo lo que me ha estado ocultando.

- Akane, sobre lo que sucedió... bueno... quisiera saber... ya sabes... -No encontraba las palabras correctas para decírselo-

Ella había comprendido. Fijó su mirada al suelo con algo de desconfianza, y no sabía si iba a negarse o si me confiaría su secreto.

- No es sencillo de explicar... -Suspiró- yo jamás pertenecí a Gehenna. Assiah fue mi único hogar desde un principio... pero al morir me convertí en un simple espíritu más en este mundo. Era algo así como un ángel, ya que por alguna razón portaba unas alas blancas. -La pequeña sonrisa que tenia en el rostro había comenzado a desaparecer- No recuerdo cómo... o por qué... solo sé que había sido poseída por un extraño demonio de un día a otro... fui arrastrada hasta Gehenna y se me prohibió escapar. Me consideraban ahora un demonio...

Cada una de sus palabras me dejaban asombrado. Era algo difícil comprender lo que estaba diciéndome, debido a que jamás había escuchado de algo como eso. Preferí solo seguir escuchándola.

- Antes de que pudiese notarlo ya toda Gehenna me consideraba el peor demonio jamás visto. Nunca entendí sus palabras... y no quería entenderlas, hasta que una noche en mis sueños aquel demonio se presentó ante mí usando mi apariencia y haciéndose llamar como Artemisa. -Comenzó a lagrimear- Fue ahí cuando pude darme cuenta de que todo este tiempo ella estaba controlando mi cuerpo a su gusto... haciéndome caer a Gehenna... -Aprieta sus puños- yo jamás pedí esto... me tengo miedo a mí misma... ¡¡No importa cuanto lo intente, no puedo escapar!! 

- Basta -La interrumpí con voz firme- lo que está hecho, hecho está... y no puedes cambiar eso, o al menos no sola. Recuerda que me tienes a mí, así que deja de cargar con todo ese peso en tus hombros. Ya no te aferres a tus miedos que de eso y más se alimenta un demonio. 

- P..Pero...

- Lo se, no te sientes segura... pero créeme que mientras yo esté aquí no dejaré que te hagan daño o que te lo hagas a ti misma -Sabía perfectamente lo que le estaba diciendo y no mentía- confía en mí... 

- Hehe... todo este tiempo estuve tan sola... tan cansada de pelear conmigo misma. Y saber que ahora no me tengo que preocupar por este dolor me hace tan feliz... -Me sonrió- Te amo...

Al instante se acercó y se acurrucó en mi pecho. Habia sido tan repentina su acción, tanto como sus palabras. Correspondí acariciando y depositando un suave beso sobre su cabeza mientras pensaba en alguna manera de ayudarla, pues ya no quiero verla sufrir. Y ahora que lo recuerdo, tenia una ultima duda...

-Queria preguntarte... ¿por qué estabas tosiendo tanta sangre hace unos minutos? -Pregunté separándola un poco de mí-

- Oh, eso... bueno... cuando un ser vivo de Assiah o Gehenna entra al cuarto de Artemisa, automáticamente su alma se conecta con mi cuerpo. Por eso cuando Artemisa te atacó sentí un dolor en el pecho y comencé a toser la sangre -Suspira- por eso no me gusta llevarlos ahí por que soy yo la que termina lastimada...

Ahora todo tiene un poco mas de sentido. Supongo que ahora sabiendo todo esto podré ser capaz de protegerla. Por ningún motivo la voy a dejar.