Te amare por siempre

~Capitulo 26~

Género: Yaoi.
Subgénero: Trama/Suspenso/Hard/fanfic.
Autora: Yaoihistorysad.
Pareja: Yokozawa x Kirishima

Recomendación: Poner audio para tener mejor ambiente ;-)

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Te Amare por siempre.

¿por que no puedo ser feliz?

Yokozawa Takafumi.

Aquel vestido que se distingue por ser un color llamativo que ilumina las salas, aquellos labios pintados de un color rojo mas intenso que el del vestido, listos para besar, sus brazos delgados con piel blanca que rodean lo que es el cuello de un hombre, sus mechones largos y ondulados que cubren partes de su rostro, como si estos ocultaran la apariencia de aquella mujer. Sus tacones que la hacen parecer mas alta, sin poder enterarse que estos pueden llegar a colapsar al igual que un edificio.

Un nudo que impide el paso del aire, mis manos que tiemblan como si estas tuvieran miedo, mis labios se resecan perdiendo su color.

Su mirada fija en mi, sus mechones tapan sus ojos sin color, una mueca de degustación y alegría es dibujada en su rostro.

–Hola–se separa del cuerpo de Kirishima–¿quien eres?

Sus tacones que marcan el paso con un golpe en el piso.

–Él es Yokozawa, es-

–Soy un compañero de trabajo–lo interrumpo sabiendo lo que quiere decir.

Su rostro marca ahora signos y gestos de tristeza debido a la respuesta que acabo de argumentar.

–oh, ya veo–dice con sonrisa en rostro–¿tienen un tipo de junta o algo así? –pregunta curiosa.

–... Si... Algo así–contesto ante su duda.

Sus piernas avanzan hacia mi, sus golpes en el piso causantes por el tacón, cada golpe que se acerca mas hacia a mi.
Empiezo a tener nauseas, mi mente se abruma, mi vista borrosa y mis labios resecos que tiemblan, una respiración agitado pidiendo a gritos que se detenga, que hago algo para su detención.

Estira su delgado brazo y extiende su mano, mostrando su palma en modo de saludar. La recibo con nauseas, y estas se hacen mas grandes al tener contacto con su frágil mano.

–mucho gusto–sonríe–mi nombre es Yuko

Sonrió tratando de parecer que estoy bien y que me alegra su presencia al igual que su cordial y gentil saludo.

–mucho gusto–pronuncio.

Nuestras manos se separan y reina el silencio, pero no por mucho.

–¡Yuko! –la dulce y pequeña voz de Hiyo aparece a mi lado.

Sus piernas avanzan con rapidez, dirigiéndose hacia la chica, esta no duda en estirar los brazos y ponerse en cuclillas. Las dos se abrazan, un abrazo que se vuelve en poco tiempo en un tierno abrazo. Los brazos delgados que hace notar los huesos de la chica hacen cargar a Hiyo. Las dos no dejan se abrazarse, queriendo que dure mas tiempo, como si no se hubieran llegado a ver durante años.

Las miro y me percato que hacen una imagen de madre a hija, me quede por un momento pesando, pero sin dejar de mirarlas.

«Hiyo necesita una madre»

Desvío la mirada y veo por detrás de ellas, me encuentro con el rostro de Kirishima, quien me mira de la misma forma entristecida, sus ojos apagadas y su mirada clavada en la mía, tal vez mi rostro refleja lo mismo, no lo se, pero se que siento tristeza. No digo nada o no hago una señal mas que agachar la cabeza y desviar mi mirada.