Once Again - NCT (TAETEN)

17.

-¿Ya está todo bien?- preguntó Jaehyun.

Los dos asentimos.

-Dios escuchó mis oraciones- agregó DoYoung.

-No soportaba mas verlos así, incluso, la pasé tan mal consolando a Taeyong, no sabes como llora, se comportaba peor que un bebé.

-Pude verlo yo mismo, Jaehyun- reí- hace muchas expresiones en su rostro.

La semana  mamá llegaría e invité a los chicos al aeropuerto para recogerla. Cuando llegó, lo primero que hizo al vernos fue correr hacia Taeyong y abrazarlo, besarle, decirle cosas bonitas, saludó a los demás y por último a su preciado hijo.

Vaya madre.

-Taeyong, no sabes cuanto me divertí después que el problema fue resuelto, te traje una camiseta, cuando la vi te pude visualizar en ella.

-Oh de verdad, en serio muchas gracias, es tan considerada conmigo- le respondió.

-¿A mi me trajiste algo?- le dije mostrando mi sonrisa.

-Hijo, tienes tanta ropa que deberías donar la mitad de ella. Pero tu tía te mandó dinero, así que imagina que el regalo es de las dos.

Jaehyun y DoYoung rieron por debajo, los miré y se quedaron serios, alzando sus brazos.

-Uh, mamá, que gentil eres. Gracias- le dije.

-DoYoung, hijo, ¿cómo anda tu madre?

-Bien, gracias. Me preguntó por usted justo hoy, me pidió que la invitara a usted y a Ten a comer por la noche, ya sabe, la lasaña es su especialidad.

-Allí estaré, hijo. ¿Me presentas a tu amigo?

-Claro, él es Jaehyun...mi pareja.

-Tan guapo, y musculoso. Mucho gusto, soy la madre de Ten.

Jaehyun le sonrió, mostrando la perfecta linea de dientes y sus apreciables hoyuelos.

-Igualmente, sabe que tiene un gran hijo, Ten es muy bueno con nosotros.

Me sonroje.

-Basta mamá, siempre que llegas de viaje estás con una lengua, nadie te para.

-Jovencito, déjeme ser.

~

Había llegado el día, con miedo salí, las piernas me temblaban al caminar, miraba mi cabello en cada espejo que me encontraba por la calle. Conocería a los padres de Taeyong.

Cuando llegué a su casa, estaban todos tres en la terraza, con una sonrisa en sus rostros y ¡Necesitaba que me dejaran de mirar! Taeyong me recibió y me acercó presentándome.

-Mamá, papá, él es Ten.

Estire mi brazo abriendo mi mano, dándoles un apretón a cada uno, su madre rió y dio un comentario que me hizo reír un poco con la cabeza gacha.

-Tienes la mano helada, cielo.

Entramos y su padre comenzó hablar de su familia, sobre lo que habían hecho toda su vida, hasta el día que decidieron darle vida a Taeyong, que por cierto, no fue tan agradable el tema.

Mencionó que años atrás, su hijo fue muy rebelde, se iba de casa con amigos y llegaba a la hora que quería, hasta que un día él como jefe de la familia decidió tomar riendas sobre el asunto y le dio un regaño y castigo que lo hizo componerse.

Al rato yo les hablé de mi madre, de su fuerte mando en casa, que a la vez de madre era mi padre, tenía ese poderío , y esa dulzura. Ella era toda una guerrera, y que además, era lo mas importante para mi. Les pude contar sobre el amor que sentía ella hacia Taeyong, y cada vez que lo veía se volvía loca; ella no lo dejaba levantarse de la mesa hasta terminar todo el plato, incluyendo los vegetales, él le renegaba y los tragaba entero a escondidas de ella. La madre de Taeyong rió por esa historia.

-Aquí si no los comes- le miró.

-Sabes algo, Ten, jamás había visto a Taeyong tan deprimido, imaginé que esos días que pasó así, fue por causa del amor. Y lo comprendo, eres un buen chico. Espero que sigan juntos por siempre.

-Gracias señor, muchas gracias por recibirme en su familia.

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¡Solo falta un capítulo! :D