Capítulo 37. Maratón: Especial Skandar Keynes 2/3

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     -Bien-respondí-. Lo llamaré. Pero primero..

    -¿Qué?-se apresuró a preguntar.

     -Vuelve a la fiesta Luke-respondí.

     -No te dejaré sola aquí-replicó, cruzándose de brazos.

     -Ambos estarémos bien, en serio-insistí-. Ahora mismo llamaré a Chase. Ve a la fiesta, te estabas divirtiendo.

     Hizo una breve pausa, mirándome con ternura.

     -¿Estás segura de lo que dices?

     -De verdad-respondí, sonriendo-. Cualquier cosa te llamaré y lo sabes.

     -De acuerdo-sonrió-.Cualquier cosa que pase..me llamas, CUALQUIER cosa, ¿sí?-resaltó.

     -Lo prometo-estreché mi mano y la tomó, como si estuviéramos haciendo un trato. Luego me acerqué aún más y lo abracé fuertemente-. Gracias...por estar siempre conmigo.

     -Siempre estaré para tí _____-se apresuró a decir, dándome pequeños golpes en la espalda. Luego nos soltamos.

     -Ve...y ten cuidado al conducir.

     -Sí, mami-rió.

     -¿Quiéres que te acompañe hasta la puerta?-pregunté, tomando su chaqueta y pasándosela.

     -No, descuida..sigue cuidando de Keynes-dijo con sinceridad, arreglando las mangas de la chaqueta-. Cualquier cosa me llamas, lo sabes. Suerte.

     -Adiós-murmuré, viéndolo salir por la puerta. A los minutos se escuchó como abría y cerraba la puerta principal.

     Volteé a ver a Skandar, que aún seguía acostado, con los ojos entrecerrados y con el paño húmedo en su frente. Me acerqué a él y volví a sentarme a su lado. Quité el trapo y lo estrujé. Luego lo mojé un poco y volví a ponerlo sobre su frente.

     -Soy un estúpido _____-balbuceó Skandar.

     -No cariño..-respondí con ternura. Luego tomé otro trapo mojado y lo pasé por sus muñecas.

     -Sí-insistió-. Recibí esa pastilla...y ahora jamás querrás hablarme-dijo apenado.

     Lo miré.

     -¿Cómo que recibiste esa pastilla?-pregunté seria-, ¿quién te la dio?

     -Yo sólo me sentía mal _____-se apresuró a decir, alterándose-. Él me la dio...me dijo que me iba a hacer bien y que iba a darme energías para hablarte.

     -No hagas eso...no te alteres-dije tranquila, acariciando su rostro-. ¿Quién "él" Skandar? ¿Lo conocías?

     -Uno que era bien parecido a George Clooney, pero de joven-contestó y se encogió de hombros-. Capaz que viajó en el tiempo, ¿no crees?

     -Skandar, eso que te dieron es droga-repuse seriamente, pensando si eso último habría sido por la fiebre o si era una de sus respuestas sin sentido, en broma-. ¿Cuántas tomaste?

     -No lo sé..una o dos..-murmuró, moviendo levemente sus manos.

     -Vamos a darte un baño, para ver si baja la fiebre-me paré de la cama y busqué su bata.

     -¿Habrán peces?-balbuceó.

     -Sí Skan, vamos-contesté, ayudándolo a pararse. 

     Caminamos lentamente hacia su baño y quité su ropa, excepto el boxer. Cuando la tina estuvo hasta la mitad lo ayudé a meterte y recostó su cabeza sobre un borde. Mojé un poco su frente y me puse de pie. Sequé mis manos con una toalla y saqué el celular de mis bolsillos. Busqué en mis contactos: "Chase Butcher" y lo llamé. Mientras marcaba el tono observé a Skandar, ahora mudo y al parecer más relajado.

Un amor alocado (Skandar Keynes y tú)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora