*Sophia:
Mi cabeza me está matando, siento que me va a explotar y hasta ahora me doy cuenta que tengo hambre, tal vez si cierro los ojos se me calme un poco el dolor que siento.
-¡Sophia! ¡Sophia, despierta!
-¿Qué pasa? -¡Debes comer para que te tomes las pastillas! Dijo Ethan.
-¡Ah, ok! -¡Espera te ayudo!
-¡Estoy bien Ethan, gracias, puedo sola!
-¡Mira que eres terca mujer!
-¡Déjame que te ayude Sophia! En el momento en que Ethan se agacha para ayudar a Sophia a sentarse, ella lo hace quedando súper cerca su boca con la de él, Ethan sólo pudo quedarse viendo a Sophia y la forma en que ella lo hizo con él pero cuando él iba hacer su próximo movimiento empezó a sonar el celular de ella. -¿Dónde está mi celular?
-¡Ten! ¡Ya vuelvo se me olvidó traerte una servilleta!
-¡Aló!
-¡Sophia!- ¿Dónde estás? -¡Sabes lo preocupada que estaba, debiste estar aquí desde hace horas!
-¡Lo siento Stella, mira tuve un accidente!
-¿Qué?, -¿Cómo?, -¿Cuándo?, -¿Dónde?, -¿Estás bien?, -¿En qué hospital estás?, gritó Stella desde el otro lado de la línea. .
- ¡Hey, espera y cállate de una vez! -¡Estoy bien, estoy en mmm, no lo sé!
-¿No sabes dónde estás?
-¡Mira Stella estoy bien, el tipo que me ayudó es el que casi me atropella pero sé quién es, no te preocupes dentro de un rato llego al departamento!
-¡Ok, sabes que te quiero!
-¡Yo también Stella! En el momento en que Sophia se despedía de su amiga llegó a la habitación Ethan.
-¿Está todo bien? Le preguntó Ethan.
- ¡Si, era Stella que estaba preocupada por mí, eso es todo pero le dije que dentro de un rato llego al departamento!
- ¡Sophia no puedes ir a tu departamento! -¿Qué? -¿Por qué? Le dijo asustada Sophia.
-¡Porque yo te cuidaré, aún estás pálida y debes de reposar!
-¡Bueno, pues lo haré en mi departamento! Dijo Sophia enojada.
-¡No! -¡Fui yo el que casi te atropella y yo te voy a cuidar!
-¡Ethan!
-¡Come, se te va a enfriar!
-¡No me puedo quedar!
-¿Por qué no? Contestó él de forma seria.
-¡No tengo ropa!
-¡Yo te presto algo! -¡Tranquila y por favor come, te debes tomar las pastillas!
-¡El problema es que no te conozco Ethan!
-¡Tienes razón y disculpa no debí hablarte así, ten!
-¿Qué es esto?
-Mi licencia de conducir, mi madre se llama Mariana, mi padre Alfred y mis hermanos se llaman: John, Michelle y el menor se llama Gabriel. Mi papá es inglés y mi mamá española por eso manejo los dos idiomas.
-¿Por qué me dices todo esto? Le preguntó ella.
-¡Porque no quiero que sientas miedo de mí, sólo quiero cuidarte y que te recuperes!
-¡Porque soy tu responsabilidad y...! Sophia no pudo continuar hablando porque Ethan le volvió a tapar la boca igual que hizo anteriormente.
-¡Calla y no digas tonterías! Dijo él riendo -¡No eres una responsabilidad, si me siento preocupado por ti es verdad y no te lo niego, pero es porque por mi culpa estás así y casi te atropello!
-¡No fue tu culpa! ¡Yo no me fijé que venías, no te sientas así y por favor discúlpame, no quería hacerte sentir de esta forma! Dijo ella bajando la cabeza con pena.
-¡Hey, no, no hagas eso! Dijo Ethan levantando su cabeza al poner dos dedos en su mentón, cuando ella lo hizo ambos se quedaron viendo el uno al otro, pero esta vez nada los interrumpió por lo que él tuvo que tener voluntad propia y alejarse de ella.
-¡Debes comer y de seguro ya se te enfrió la sopa que tanto me costó hacer! Dijo él riendo.
-¿En verdad la hiciste tú?
-¡Pues mmm, no, de hecho la compré! Le contestó con media sonrisa.
-¡Bueno, ya que no hay posibilidad de que muera envenenada porque tú cocinaras, estoy más tranquila y me la comeré porque me muero de hambre!
-¡Ya vuelvo entonces, te dejo comer tranquila, debo arreglar unos documentos para mañana!
-¡Claro, ve anda! Le contestó ella con la boca llena.
Cuando terminó su comida Sophia empezó a buscar a Ethan porque debía tomar sus pastillas y no sabía dónde estaban por lo que recorrió el departamento de él, a cada paso que daba se asombraba más de lo hermoso del lugar y la elegancia que emanaba de cada adorno y de los cuadros que estaban en la pared. Cuando vio una luz que salía de una habitación, la cual tenía la puerta abierta, se dirigió hacia ahí, cuando llegó a la habitación Ethan estaba hablando por teléfono por lo que no quiso interrumpir pero cuando ella se iba, él la vio terminando su llamada.
-¡Te llamo luego! Le dijo a la otra persona, dicho esto colgó el teléfono.
-¡Sophia, espera!
-¡Lo siento, no te quise interrumpir, es que no sé en dónde están mis pastillas y la cabeza me está matando!
-¡Claro, no te preocupes! -¡Se me olvidó dártelas cuando te llevé la cena, pero ven conmigo y te las daré! Sophia lo siguió hasta la cocina quedando en shock con la cocina más grande y hermosa que ella ha visto.
-¡Oh por Dios esta cocina es hermosa! Sin querer se le salió la frase provocando en él una sonrisa y se le quedó viendo.
-¿Te gusta cocinar? Le preguntó. -¡Claro, me encanta! Contestó ella con un poco de rubor en sus mejillas.
-¡Cuando quieras puedes cocinar en ella! Le contestó él con media sonrisa provocando que el rubor de ella se hiciera más intenso.
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Destino y Seducción.
Teen Fiction¿Qué pasaría si te encuentras con el hombre más sexy y guapo que hayas visto en la vida, pero con el transcurso de los días te das cuenta que ese bombón, es tu nuevo profesor? Y ¿Qué pasará cuando su pasado y su presente se encuentren viéndote en me...