*Ethan:
Me voy a volver loco con esta situación, no puedo creer que ya Sophia se haya dado cuenta de que algo sucede, ¡Mierda! No la quiero perder pero esta situación se me está saliendo de las manos. *Sophia:
Ethan no me quiere contar lo que sucede pero sé que algo no anda bien, no es nuestra relación porque estamos muy bien pero no sé qué será, desde un par de meses está así, ya llevamos siete meses juntos y desde unos dos meses está nervioso, con todo se irrita, no es violento conmigo pero él no está bien y que se pusiera a llorar cuando me vio recogiendo algunas de mis cosas eso si me mató, no sé qué le sucede pero algo está pasando. No lo quiero presionar pero esto está muy raro.
-¡Ethan tu celular está sonando! Bueno nunca nos hemos ocultado nada y no le veo el problema de contestarlo yo.
-¡Aló! Dije al contestar el celular de mi novio.
-¡Hey nena, es para mí yo contesto! Y con esto Ethan agarra el celular, un poco nervioso y se va para la oficina hablar.
¿Qué bicho le picó a este hombre? Pensó Sophia volviendo hacer su trabajo para la universidad.
-¿Quién era amor? Le preguntó ella al salir Ethan de su oficina.
-¡Nadie importante, voy a salir un momento, vuelvo dentro de un rato! Y diciendo esto salió del departamento.
Ya no soporto esta situación, estoy harta de que él me esté ocultando esto, ¿qué está sucediendo?, no deja que yo le conteste el celular y cada vez está más raro, no lo quería presionar pero esta situación no me gusta nada, ahora que él vuelva, lo voy a confrontar.
-¡Mierda, no de nuevo! Diciendo esto Sophia sale corriendo hacia el baño para vomitar lo que tenía en su estómago. -¡Estoy harta de estar vomitando! Ya han pasado muchos meses desde el accidente para seguir con estos síntomas, iré al doctor.
Pensando en esto, ella se alistó y se fue al hospital donde estaba su doctor de cabecera, por más que trató de contactar a Ethan él no respondía su celular. ¡Divino el chico! A mí no me contesta.
Al llegar al hospital Sophia fue directamente donde su doctor pero no sin antes pasar al baño para volver a vomitar. -¡Esto no está bien Sophia, esto no es normal! Se dijo a sí misma. Cuando llegó al consultorio del Dr. Gabriels, ella tocó la puerta para ver si la dejaban entrar y efectivamente escuchó un - ¡Adelante! y así lo hizo.
-¡Hola doctor! Dijo ella de forma un poco animada ya que se enteraría qué iba mal con ella.
-¡Hola! Le respondió el doctor, asombrándola ya que no era la voz de su doctor, ya que la voz de su doctor era la de una persona mayor y esta voz era grave, un tanto sexy y la de una persona joven. Cuando ella lo vio se quedó asustada no por lo feo o mayor, todo lo contrario era un muchacho como de treinta años, de pelo macho, nada que ver con su doctor.
-¡Lo siento, creí escuchar que me dieron permiso de entrar, ya me retiro! Dijo Sophia.
-¡Está bien señorita Leighton, puede pasar y siéntese, por favor! Le contestó el joven que estaba sentado detrás del escritorio y con gabacha de médico. -Pero ¿Dónde está el doctor Gabriels?
-¡Él no volverá! Le respondió el apuesto médico.
-¿Por qué? Y -¿Quién es usted? Le dijo ella un poco nerviosa.
-¡Tranquilícese por favor señorita! Le dijo el doctor, -¡El doctor Gabriels es mi padre y ya él por su edad avanzada no va a trabajar más y yo tomaré a todos sus pacientes!
-¡Oh, ya veo! Le contestó ella, aún de pie.
Al ver el doctor que ella estaba roja, con pena y aún de pie le hizo seña de que tomara asiento y con una media sonrisa en su boca.
-¡Mmm si, gracias! Le dijo ella sentándose al frente de él.
-¿En qué le puedo ayudar, señorita Leighton? Ella le explicó que había tenido un accidente y los síntomas postraumáticos que ha padecido pero que ya ha pasado mucho tiempo y aún continúa vomitando.
-¿Puede estar embarazada? Le preguntó el doctor.
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Destino y Seducción.
Teen Fiction¿Qué pasaría si te encuentras con el hombre más sexy y guapo que hayas visto en la vida, pero con el transcurso de los días te das cuenta que ese bombón, es tu nuevo profesor? Y ¿Qué pasará cuando su pasado y su presente se encuentren viéndote en me...