Cuatro.

4.6K 665 165
                                    

Era Lunes por la mañana y Jihoon había decidido levantarse muy temprano para irse solo al instituto y no tener que soportar a su hermano.

Ya había llegado y afortunadamente el lugar se encontraba abierto.

Ingreso esperando no encontrarse a nadie, pero grande fue su sorpresa al ver a Seungcheol buscando algo en su casillero.

Dudo en acercarse o no.

Pero al final lo hizo.

— S-Seungcheol... —

Él rubio no parecía haberlo escuchado.

— ¿Me estas escuchando? — Le preguntó perdiendo un poco la paciencia.

En ese momento Seungcheol se dio vuelta.

— Ah, si, te estoy escuchando Jihoon, lo siento. — Le sonrió.

— Toma, gracias por prestarme tu camiseta él otro día... — Susurro extendiéndole una bolsa y sonrojándose al recordar lo que sucedió entre ellos.

— Oh, no fue nada, no podía dejar que te fueras con una camiseta mojada. — La tomo y la guardó en su casillero.

Ambos guardaron silencio.

Era en cierta manera algo incómodo, por alguna razón.

— ¡Tú! — Se escuchó como alguien exclamaba.

Se dieron vuelta y pudieron observar a Jeonghan yendo hacia ellos con paso firme y el ceño fruncido.

Jihoon puso los ojos en blanco.

— ¿Cuantas veces debo decirte que te alejes de él, Jihoon?

— J-Jeonghan...

— No, ¿No ves lo que el trata de hacerte?

— ¡Estoy cansado de estos espectáculos! ¿Crees que soy alguna clase de monstruo con una enfermedad contagiosa? ¡Pues no Jeonghan! ¡NO SOY GAY! ¡DEJAME EN PAZ! — Exclamó Seungcheol claramente harto de que Jeonghan siempre lo molestará.

Dicho eso se fue de allí.

— Ups... — Murmuro Jeonghan.

— ¡ERES UN IDIOTA! — Le dijo Jihoon para luego irse también.

— P-Pero... Yo solo quiero lo mejor para ti, Jihoonie... — Susurro, sabiendo que su hermano claramente no lo oía.

◇◇◇

Las clases del día comenzaron normalmente.

Pero a diferencia de siempre, Jihoon parecía estar mucho mas malhumorado que de costumbre.

Soonyoung se preocupó así que en un momento de distracción del profesor, decidió acercarse a él.

— Jihoonie. — Lo llamó.

— ¿Qué? — Preguntó el mencionado con el ceño fruncido y sin apartar la mirada de su cuaderno.

— ¿Paso algo? — Cuestiono.

— No. — Respondió fríamente.

— ¿Seguro? — Insistió.

— No. — Volvió a contestar.

— ¿Segu...-

— ¡Kwon Soonyoung! ¡Vuelva a su asiento! — Exclamó el profesor.

— ¡Pero...!

Confused » Jicheol.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora