Capitulo 11.

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Lapis:

Estaba recostada en mi cama, la luz que salía en un espacio de la cortina se reflejó directo en mi ojo izquierdo, me moví al lado contrario para que no me molestara demasiado, pero al final llegó a mi espalda, el Sol estaba en la superficie de mi piel trasera, digamos que... duermo sin polera y sostén, es cómodo. No podía creer lo desordenada que soy, mi cuarto es un asco, en la esquina hay ropa sobre mi escritorio para """estudiar""", en mi velador, todavía se encuentran restos de comida y bebidas.

Y repentinamente, me quedé pensando, todo lo que me está ocurriendo...

Ayer, Jasper, me hizo una visita, al parecer sus padres estaban muriendo lentamente por consumir abundantes drogas. Yo no sabía que decirle, él estaba triste, con una caja en sus manos, lo que me choqueó fue cuando me comentó "Ellos... podrían haber sido malos padres... pero, se me olvidó haberte contado de que... a veces... pocas veces... no siempre... ellos... ellos me ayudaban". Le pregunté con qué "...Con el colegio, iba a repetir mi sexta vez Lapis, pero ellos de nuevo hicieron todo para que yo pudiese pasar de curso".

Jasper será muy perezoso, pero, es demasiado atónita la noticia de sus padres, además, el Director de la escuela, es adinerado... como nosotros, así que los padres no pueden sobornarlo con nada más que palabras.

Lo único que hice fue disculparme con él y cerrar la puerta en su cara... no sé qué hacer, no sé qué decirle, no sé si llamarlo...

-¡Hey Lapis! ¡Hey Lazuli! -Gritaba constantemente Peri desde afuera.

Abrí mi ventanal, después de ponerme una polera, me acerqué al balcón -¡Oh Romeo!, ¿¡Dónde estás que no te veo!? -Imité la voz suave de una princesa en apuros, posando mi mano en mi frente y fingiendo dolor en el pecho con la otra.

-Julieta, Julieta, estoy debajo de tu -Una carcajada salió -....No lo arruines Lapis... -Continuaba riendo.

-¿Y a qué se debe esta visita mi amado? Sabes que los soldados de mi padre al verte te harán daño -De nuevo hice una pose dramática.

Veo que Dot se agacha en el césped recogiendo algo -¡No preocupéis Princesa! ¡Yo, el Gran Romeo, puedo pelear como un experto! -Había sacado una flor de mi jardín, la cual la movía como si fuese una espada.

Di una risita -Okay -Acepté la broma intentando detener la risa -¿A qué se debe tu visita Peri? -Me apoyé con los codos en la valla de mi balcón.

Me estaba mostrando la espalda, ya que, mientras me reía ella hacia movimientos con la flor, como si estuviese cortando algo. En eso, se voltea -¡Quiero que tengamos una cita! -Me sonrojé -Así que ve preparándote mujer, el príncipe Romeo os espera -Se lanzó a los arbustos por alguna razón.

Estaba sorprendida, Peridot invitándome a una cita, ¿Quién lo diría? Siempre pensé que yo iba a ser la tonta que la llevaría a pasear.

Agarré una de mis prendas preferidas, decidí usar un vestido... hace días que no muestro mis piernas por el motivo de las marcas que me había hecho Amatista.

Bajé las escaleras apresurada, estaba muy contenta, no podía siquiera pensar qué tenía planeado esa enana.

Abrí la puerta, y cuando estaba fuera la cerré con una tarjeta que tengo de seguridad, hasta he estado pensando irme a vivir a un departamento como Perla, pero... me gusta la soledad...

Perla... entonces... ¿Está en unos departamentos para no sentirse sola? Nunca lo había pensado de esa forma... ¿Qué estará haciendo ahora? Hace unos meses que no le he dado dinero para que pueda pagar el arriendo... -¿Lapis? -Escuché a mis espaldas -¿Ocurre algo? No te veo muy animada -.

My Nerd And My Clod Donde viven las historias. Descúbrelo ahora