Capítulo 7

1.5K 191 64
                                    

Cuando Jim conoció a Spock, fue en una situación bastante compleja, ya que al principio no le agradaba, después de todo lo acusaba de hacer trampa. Pero siempre tuvo ese extraño sentimiento en su interior hacia él. Cuando ya era capitán de la enterprise y Spock su primer oficial, pasaba que en ocasiones se encontraba a si mismo observando al vulcano por tiempos prolongados, ya fuese dentro de turno o fuera de este. No sabía a que se debía, pero algo en Spock le causaba un sentimiento tan agradable, y deseaba tener la atención que Spock le dedicaba a Uhura.

Jim Pov.

-¿Qué dices?-le insistí.

-Bien-Spock dijo-acepto tu propuesta-cedió y se saco su abrigo. Sentí cierto calor subir por mi cuerpo-Entonces, ¿Cómo lo haremos?

-Bueno pues...-la verdad no pensé que aceptaría, así que no tenía idea. Todo lo que se me ocurría era abrazarlo por detrás o viceversa-Podríamos rescostarnos muy cerca del otro.

-Intentemoslo-Spock me motivo. Nos acostamos y nuestros brazos quedaron muy juntos-Podríamos intentar de espalda-Sugirió Spock.

-Está bien-Dije y nos volteamos con nuestras espaldas bajas rozando. Era la cosa mas incómoda en la tierra. No quería que fuese así, y sabía que Spock iba a pasar frío, por lo que decidí arriesgarme y me di vuelta, pasando mi mano por debajo del brazo de Spock y rodeando su cintura.

-¿Jim, qué ha...-iba a preguntar pero le detuve.

-Shh, dame tus manos-dije ofreciéndole la mía. Lo sentía tenso hasta que se relajó y tomó mi mano entre las suyas.

-Buenas noches, Spock.

-Buenas noches, Jim.

Spock Pov.

Jamás había tenido tanta intimidad con alguien. Podía sentir el aliento de Jim cálido sobre mi cuello, causandome una afable sensación de calor. No sabía si Jim dormía, yo me tardé al menos media hora en conciliar el sueño.

--

Cuando Spock conoció a Jim le pareció tan ilógico, esa actitud tan irreverente. Realmente no le gustaba. Pero cuando comenzó a ver el verdadero potencial del humano y la forma en que le hizo ver las cosas de una forma diferente, le causó cierta fascinación. En el último tiempo sintió la necesidad de terminar su relación con Uhura, como si ya no tuviese sentido estar con ella.

Jim Pov.

Tener a Spock tan cerca causaba en mi cierto regocijo. Sentía su aroma tan agradable y su calor corporal. En dado momento Spock dejó de sostener mi mano y comenzó a moverse. Pensé que había despertado pero simplemente se dio vuelta, acomodándose, quedando frente a mi. Me puse nervioso, porque la cercanía era mínima. No sabía si Spock tenía el sueño pesado o liviano, pero acerqué mi mano a su rostro y le acaricie lentamente, con miedo a despertarle y arruinar el momento. Sus facciones eran apenas visibles en tanta oscuridad, y el fuego de la chimenea casi se apagaba. Me aproximé más aún para respirar mejor su aroma, quería sentirle tanto como pudiese, y me sorprendí ante tal anhelo. Alejé mi mano y la dirigí nuevamente a su cintura, apoyándola y bajando, suavemente, hasta llegar a su cadera, donde terminaba su camiseta de pijama. Dudoso, sostuve la tela, sabiendo que estaba mal lo que planeaba hacer, pero algo dentro de mi me gritaba que siguiera mi instinto. Levante cuidadosamente la pijama e introduje mi mano bajo ella y, sin más, toque la piel del vulcano, dejando de pensar por breves segundos, extasiado por la sensación. Pero el terror recorrió rápidamente mi cuerpo cuando la mano de Spock sujetó mi brazo. Quise retirar rápidamente mi mano, pero Spock no me dejó, mantenía el agarre fuerte, hasta que me soltó y dirigió su mano hasta la mía, debajo de la camiseta y sobre su piel. Sentía demasiada vergüenza como para mirarle, y demasiada confusión para hablarle. Comenzó a acariciar mi mano suavemente y luego la tomó, guiandola desde su cadera hasta su cintura, dejándome tocarle aún más. Él quería que le tocara.

-S... Spock-susurré y levante mi rostro. Estaba tan cerca, y no resistí más. Junté mis labios con los suyos, y el aceptó mi beso. Ansioso me subí sobre Spock, metiendo mis manos bajo su polera y tocando su piel, mientras él sujetaba mi rostro profundizando el beso. Me separé para sacarme la polera y, cuando estaba a punto de besarle nuevamente, desperté por el sonido de la lluvia.

Había sido un sueño. Me sentía avergonzado y, realmente, esto era nuevo para mi. Yo aún abrazaba a Spock, solo que ahora le sujetaba con mayor fuerza, mi cuerpo estaba pegado al de él y sus manos no sostenían la mia.

-¿Spock?-le llamé.

-Si, jim-me respondió con la voz ronca.

-¿Dormiste bien?-le pregunté.

-Se podría decir que si.

-¿Se podría decir?-inquirí.

-Dormí bien-dijo en un tono bajo-gracias por proporcionarme calor corporal. Ya puedes soltarme.

-De nada, Spock-dije un poco apenado y solté mi agarre.

Spock Pov.

Desperté porque sentí a Jim moviéndose. Se aferró a mi con más ímpetu, y su mano dejó las mías. Aparentemente estaba soñando. Me congeló por completo el sentir su mano bajar por mi estómago y meterla bajo mi polera, acariciando desde mi vientre bajo hasta mi pecho. Quería despertarlo pero una parte de mi descartaba todo intento de hacerlo, como si fuese necesario dejar que Jim me tocara. Y, contra todo pensamiento lógico, disfruté sus caricias, disfruté su tacto cálido y apasionado, su cuerpo queriendo el mio cerca, su respiración agitada sobre mi oído, hasta que se detuvo y, luego de un rato, escuche su voz. Había despertado.

Fuera de ley / SpirkDonde viven las historias. Descúbrelo ahora