Capítulo 44: Te amo, mi chico de los audífonos.

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SORPRESA, DOS DÍAS SEGUIDOS CON ACTUALIZACIÓN.

NI YO ME LO CREO. 

Ojalá les guste :3  Y el final definitivo será en el Epílogo (Aún falta un capítulo), ay que lloro al despedirme de esta historia, :( y de ustedes:(sus comentarios y ver que votaron en cada actualización, el decirme que actualice y el apoyarme, ay ashlakhs ahre, dejaré la sensibilidad para los agradecimientos, :')

Pero cabe mencionar algo importante, que lo haré en un anuncio que subiré después del epílogo y los agradecimientos. :3 una pista es el título de la historia, ¿Qué más tiene? xD, luego les explico. 

¿Les gustó el capítulo anterior? Espero que este también, xD. 

¡Disfruten! ¡Recuerden que los amo muchooo! 

En serio, gracias por todo, ustedes fueron de las únicas cosas buenas y hermosas que tuve en mi 2017 (y desde mi 2015). :3

Atte, LadyOfTheCrazyDreams. 

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Maddie.

—¡Felicidades por su graduación, cariños! ¡Estoy tan orgullosa de ustedes, mis niños! —chilló mi madre mientras me abrazaba a mí y a mi hermano a la vez, luego que culminara la ceremonia de graduación y todos (Después de haber lanzado los birretes al cielo de la emoción) se esparcieran en el campus para buscar a sus correspondientes familias y a la vez felicitarnos entre sí.

Me separé de mi madre y abracé a mi papá, éste me envolvió en un gran abrazo junto con las palabras "Felicidades", "Estoy orgullosos de ustedes". Al separarnos me acomodé mi birrete negro y observé como abrazaba incómodamente a mi hermano.

—¡Muchas felicidades por su graduación! —exclamó Jamie, mientras revolvía el cabello de Scott y se ponía el birrete de él en su cabello rubio—. Aguántense un par de años que el siguiente seré yo, y tendrán que venir a la mía sí o sí.

—Claro, enano—repliqué besándole sus mejillas.

—Universidad, ¡Allá vamos! —gritó un eufórico Dylan saltando y alzando su diploma al aire, en ese momento yo sabía que su emoción era más por terminar la High School que estudiar Medicina en la universidad estatal.

Después fue una ola masiva de abrazos y felicitaciones de parte de los padres de mi mejor amigo, en conjunto a los míos para ellos. Todos andaban tan eufóricos en ese día tan especial, el día en que marcaría el fin de una etapa de nuestras vidas, culminar la escuela media, y el comienzo de otra, el inicio de la Universidad.

Al pasar dos meses en coma, perdí mis oportunidades para ir a Inglaterra con Chad, y no me apeteció que mis padres metieran sus manos en el asunto para permitirme ir, así que juntos decidimos estudiar en la universidad estatal de la ciudad, era muy buena, reconocida internacionalmente y mi segunda opción de todos modos. Y lo mejor era que en tal universidad impartían nuestras carreras predilectas, sin recurrir a cambiar los planes del otro solo por desear seguir juntos.

El chico de los audífonos. [Borrador].Donde viven las historias. Descúbrelo ahora