Dos días después de volver de Milán, mi vida había vuelto a la "normalidad". Anne había vuelto a Miami y a sus estudios, y yo, bueno pues yo me había quedado en Calabasas en la casa de Kris. Llevaba dos días como loca organizando una super comida familiar para contarles a todos la noticia, ahora que por fin me había decidido. Solo le pedí que fuera algo sencillo y tranquilo. En casa a ser posible, no quería nada de paparazzis, aunque después de la otra vez...ya casi que daba igual el sitio.
-Cariño, sigo pensando que deberías de hablar con tus padres cuanto antes...-dijo acariciándome la mano. Era un gesto bastante maternal, creo que por primera vez en la vida sentía que de verdad tenía una madre que me quería.
-No, no estoy preparada.-dije.-La relación con mis padres es...demasiado difícil.
-Sabes que puedes contarme lo que sea, ¿verdad?
Asentí. Terminé de cenar y me fui a mi habitación. Estaba algo cansada y mañana me esperaba un largo día. Tenía mi teléfono lleno de llamadas perdidas de mi padre, pero las ignoré. A lo mejor si les hubiera importado lo suficiente ya habrían venido a buscarme. No creo que sea demasiado difícil encontrarme. Caí en un sueño redondo instantes después.
Me pasé toda la mañana cocinando con Kris y con Kendall para el almuerzo que Kris había organizado. Preparamos un poco de todo: carne, pasta, ensaladas...Habíamos estado al menos más de tres horas pero había sido muy divertido. No me había sentido en familia en mucho tiempo.
-Oye, confiaba en que sería la primera en enterarme de que si que eramos hermanas.-dijo Kendall.
-Bueno, técnicamente te has enterado la primera.-me encogí de hombros.
-Pero no vale, todos los demás lo intuyen.-protestó.
-Quería decírtelo, pero no sabía como.-dije siendo sincera.
-No te preocupes, lo importante es que ya está confirmado.-dijo abrazándome.-Es genial tener otra hermana más.
Sonreí y me aparté.
-Bueno, creo que voy a subir a vestirme. Ya mismo llegarán todos.
-Claro, yo igual.-dijo Kendall.
Subí a mi habitación y busqué algo de ropa en el armario. Prácticamente ya me había instalado. Me puse ropa bastante informal; unos vaqueros y una camiseta básica roja junto con unas botas negras. Me cepillé un poco el pelo y me lo dejé suelto. Me puse algo de maquillaje, pero tampoco mucho, no me gustaba demasiado. Cuando llegué al jardín Kris estaba terminando de colocar las cosas sobre la mesa. Hacía un día genial, no hacía un calor excesivo por lo que se estaba muy bien en el patio, pero tendríamos que entrar dentro demasiado pronto porque a la noche tenía pinta de refrescar mucho. Todos empezaron a entrar por la puerta del jardín. Me sorprendió bastante que mis hermanas trajeran a sus hijos, aún no los había conocido. Los pequeños corrieron hacia Kris. Kim se acercó a saludarme muy amablemente y estuvimos conversando durante unos minutos. Era un sol, aunque en televisión pareciera todo lo contrario. Su hermana mayor, sin embargo, era la más agria de todas. Me dió dos besos y se limitó a sentarse en una de las sillas junto con su bebé. Kylie llegó conversando con Khloé. Ni siquiera me saludó. ¿Qué le había hecho para que se portara así conmigo? Cuando ya estábamos todos y nos habíamos saludado nos sentamos a la mesa.
-Todo esto que veis aquí lo hemos preparado entre Dakota, Kendall y yo.-dijo Kris orgullosa mientras cogía el bol de ensalada.
-Esta riquísimo.-dijo Kim.-Me alegro que estés en la familia, espero que cocines más veces para mi.-rió.
-Gracias.-sonreí.
La comida transcurría medianamente tranquila hasta que Kylie decidió montar otro de sus numeritos y se levantó de la mesa.
-¿A dónde vas?-preguntó Kris preocupada.
-Quiero estar sola.-dijo.
-Ya voy yo.-Kourtney dejó a su bebé con Kendall y se levantó de la mesa seguidamente de Kylie.
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La guerra de las Jenner [Terminada]
FanfictionKylie Jenner; guapa, rica y famosa. Un ídolo adolescente en el mundo entero. Dakota Stevens; inteligente, astuta y quizás, demasiado madura para su edad. Pero, ¿qué tienen en común estas dos chicas? Ambas son gemelas. Ambas son las pequeñas del cl...