Perdida en el pasado

Capítulo 2

Marinett se encontraba en transe, no sabia como es que había llegado hasta aquel lugar, confundida se levanto para observar mejor su alrededor, parecía estar en un pequeño mercado pero lo que mas le llamo la atención fue el hecho de que la gente vestía ropa del siglo XVIII y eso lo sabia pues en su trabajo  había visto mas de un objeto perteneciente a ese siglo.

Un grito la hizo reaccionar obligándola a moverse pues una carreta había perdido una rueda desviando la carga que esta llevaba, esta se dirigía al mismo lugar donde se encontraba un pequeño grupo de niños callejeros  los cuales no tenían forma de esquivarla, la chica tomo una cuerda de un puesto cercano, con toda la rapidez que pudo, logro atar un extremo de esta en una reja de su lado opuesto, tiro de la cuerda soportando el peso de la carreta pero este fue mucho mas fuerte obligándola a soltarla, el impacto que tuvo contra la pared destruyó la carreta pero para su buena suerte los niños no se encontraban en aquel lugar, los busco con la mirada encontrándose a los niños dando gracias a un joven enmascarado por haberlos salvado, este al notar la mirada de la joven sobre él sonrió coqueto provocando que la peli-azul sólo se enojara aún más.

-Niños les falta dar gracias a alguien mas no lo creen?-mencionó sin apartar la vista de la chica, los niños dirigieron la mirada hacia ella para después dar las gracias en unison y salir corriendo de vuelta a lo que estaban haciendo.

El joven de cabellera rubia se acercó intentando causar en ella algún efecto, sin embargo la chica nisiquiera se inmutó, sólo lo observaba en silencio, tratando de entender que pasaba pues si no estaba equivocada aquel joven enmascarado que se asemejaba a un gato no era nada más y nada menos que el mismo sujeto  de la pintura de su trabajo "Chat Noir"

-¿No crees que eso fue algo peligroso para una damisela?-hablo él, sacando de sus pensamientos a la parisina.

-Sin embargo, sin mí ayuda tú no hubieras llegado a tiempo "gato"-respondió desafiante la chica pues no le gustaba para nada que la tratarán como si por hacer un poco de esfuerzo se fuera a romper.

El chico se sorprendió ante la respuesta de ella, no estaba acostumbrado a encontrar mujeres capaces de desafiarlo, por lo común ellas lo admiraban por su valentía y no faltaba una que otra que se le insinuara, sin embargo está chica parecía completamente segura de si misma, su ropa algo extraña y reveladora sólo le decía que ella no era de esa zona pues nunca antes la había visto.

-Eres muy atrevida para tu tamaño no lo crees "princesa"- enfatizó la última palabra sólo para seguir provocándole.

-y tu muy hablador para ser un "simple gato"-respondió  con una pequeña  sonrisa en el rostro pues no dejaría que aquel joven sé sintiera superior a ella.
Por un momento pudo notar como el chico se quedaba atónito, sin nada mas que decir, eso sólo ocasionó que ampliará más su sonrisa dándose por ganadora.
El en cambio estaba sin palabras nunca antes había conocido a una chica como ella sin duda, era única.

-Admiro su valentía princesa,
Chat Noir a su servicio-por fin hablo el rubio, aunque cambiando el tema por completo, hizo una pequeña reverencia tomando su brazo derecho para después besar su mano.

Está vez fue la peli-azul quien se quedó sin habla, por lo que apartó su mano rápidamente.

-E..e..eso ya lo sabia- mencionó algo torpe.
-Ah! Si sabes quien soy entonces debes ser una fan mia-alardeo sonriendo.

-No te hagas ilusiones, yo me enteré de ti hasta hace unos minutos. Cuándo encontré el cua...¡ELCUADRO!-  respondió alterada la chica pues hasta hace unos momentos no reparaba en el hecho de que ya no estaba en la tienda.
Se dirigió al lugar en el que había estado sentada seguida de Chat, buscando con la mirada aquel cuadro, pero el objeto ya no estaba...

-¡Esto no puede ser posible!-mencionaba Marinett  sin dejar de dar vueltas en el mismo lugar, mientras que  una divertida mirada no le quitaba los ojos de encima.

-Siento interrumpirla princesa, pero, ¿se puede saber el motivo de su angustia?-

-Tu!-grito la chica

-¿Yo?- pregunto algo confundido.

-Si tu, tu puedes ayudarme a encontrar lo que busco- las palabras de la joven parecían contener cierta esperanza.

-¿Y que es lo que busca exactamente?-

-Es un cuadro donde está pintada una de tus batallas- contesto con simpleza.

El chico sonrió con diversión
-Al parecer alguien ciertamente es una gran fan de Chat Noir- dijo en tono quisquilloso acercando su rostro al de ella.

-Te equivocas gato, primero ese cuadro no es mío, pertenece al lugar en el que trabajó, y segundo si no lo encuentro no se como voy a volver a casa- contraresto con un tono diferente, apartando el rostro del chico con una mano.

-¿En que lugar vive princesa? Si se puede  saber por supuesto- pregunto curioso por saber el origen de esta.

-acaso nunca te dijeron que la curiosidad mató al gato-Sonrió para sí misma la chica.

-Pero murió sabiendo - mencionó él, provocando una pequeña risa de parte de la joven.

-Además se ve que no eres de por aqui, yo podría llevarla hasta su hogar si desea-

Marinett pensó que podía confiar en él, no tenía nada que perder después de todo se suponía que Chat Noir era un héroe y tal vez él podría ayudarle a regresar a su ciudad.

-¿Puedes llevarme hasta París, Francia?-pregunto con inocencia esperando que su ciudad no estuviera tan lejos, pues ahora no importaba el como había llegado a ese extraño lugar, lo que necesitaba era volver a su hogar para pensar más tranquila en lo que pudo haber pasado después de su accidente en el trabajo.

El joven no pudo evitar que se le salieran unas cuantas carcajadas, al grado de tener que posar una mano en su estómago para aliviar el dolor provocado por la risa, en cambio la chica no entendía el por que de su burla, ¿acaso había dicho algo divertido?.

-¿Que es lo que se te hace tan gracioso gato tonto?-le replicó golpeando su hombro con su puño, mirándole enojada.

-El hecho de que al parecer si estás loca después de todo-contesto aún entre risas el rubio.

-¿De que diablos estás hablando?-ahora si estaba enojada.

-Por que quieres ir a un lugar en el que ya estas-

La chica lo miro sin entender que es lo que decía, y este al darse cuenta de que la expresión de la chica  mostraba seriedad no tuvo de otra más que explicarse.

-A lo que me refiero es que estas justamente de pie en el centro de París........

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Nos leemos hasta la próxima. Semana.

Atte: Zol🌺