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~*Capítulo Cinco *~

Dylan Miller era mas guapo de lo que Maïa pensaba que era, aquellos ojos azules la cautivaron, pero nunca a un extremo de encantarle, a ese muchacho de tan solo 24 años se le veia muy serio y muy maduro ¿qué habría pensado el de ella?
Jane había salido de su oficina mientras que la castaña se encontraba en la sala de espera aguardando que la encargada se desocupe con Miller.
-April querida- dijo Jane encontrando a Maïa- ¿puedes venir conmigo por favor?
-Claro Jane - Dijo Maïa mirando a la castaña.
Venia conociendo a Jane ya casi 2 meses y todo lo que ella le dijo en su momento era verdad Maïa se podia solventar los gastos, pero aun le faltaba el dinero para estudiar.
Ambas entraron a la oficina de Jane y vieron aún sentado a Dylan, el nuevamente poso sus ojos en la castaña. Ojos plomos y ojos azules habian una batalla por quien podían predominar si era cierto el que Dylan era un patético egocentrista Maïa se había topado con la horma de su zapato. Y no era que ella fuera una muchacha egocéntrica simplemente que aun teniendo dinero y siendo mimada jamas se sintió mejor o superior que los demas.
- Señor Miller - dijo Jane - le presentó a April Austin. Su madre de alquiler.
- espera Jane  ¿qué? - pregunto Maïa mirando a su jefa.
- El señor Miller busca un vientre de alquiler, y tu mi querida April eres en estos momentos la mas indicada para llevar el hijo del señor Miller.- Jane hablo con mucha naturalidad. Prácticamente lo mismo que le había dicho a Joseph y Abigail. Pero la diferencia era que durante 9 meses Dylan estaria pegado a ella como si fuera una goma de mascar.

-Un gusto señorita Austin -saludó Dylan mirando a Maïa fijamente, una sonrisa de alegría que tenía llegaba a sus ojos.

- El gusto es mío- arrastro las palabras Maïa mirando fijamente a Dylan.
-Bueno señor Miller en estos momentos nuestro agendamiento para la inceminacion esta recien para el día 20 de octubre. - dijo Jane aun mirando a su computador.
- éso  es todavía el proximo mes -Refuto Dylan.
- Si señor Dylan. -  asintio Jane.

El móvil de Maïa sonó, ella se aseguro de quien era el mensaje que habia llegado,  deslizo la contraseña de su celular y era un mensaje de su hermano " Te veo en la noche iraa conmigo a una cena de inversionistas ponte muy guapa hermanita" - Trav.
Maïa miro a todos en aquel cuarto, cuatro pares de ojos estaban enfocados en ella.
-¿Que decias Jane? -pregunto nuevamente.
-  Te dije April que aqui esta el contrato debes firmarlo - Refuto Jane.

Maïa tomo el bolígrafo que le tendió en la mano Jane ella miro fijamente a la encargada de albergue.  Firmo sin mirar el contrato. Y luego paso el documento a Dylan,este aun la miraba fijo y eso ya le incomodaba a Maïa.
- ¿Me puedo retirar?- preguntó la castaña.
- Eh a mi me gustaría conversar contigo Señorita Austin -Dijo Dylan - claro si podemos.
- Llámame April -Dijo la castaña con mucha delicadeza
-April me gustaría conversar contigo sobre unos detalles sobre la concepción y todo eso.
- Esta bien señor Miller- contesto Maïa sin quedarle de otra.

Como todo un caballero Dylan abrió la puerta del despacho de Jane para que Maïa pasara primero. Fuera los esperaban varios reporteros, parecia que alguien le había informado sobre que el famoso empresario de todo Los Ángeles se encontraba en un albergue donde ayudan a padres a tener hijos.

-¡Mierda! ¿April traes algun lente? - pregunto Dylan mirando fuera a los reporteros.
-Si - respondió ella sacando de aquel bolso unos lentes de sol Rayban ella se los coloco atandose el cabello en un moño alto enseñando aquel tatuaje que era uno de sus mayores secretos, una pequeña ave dibujado de tinta negra en la nuca de Maïa. Llevaba un short pequeño y una blusa con tirantes ya que afuera hacia un calor infernal para tan tranquilo verano  - Listo- dijo Maïa aun sintiendo la mirada de Dylan en su nuca. Ella cubrio aquel tatuaje con su mano. -Significa libertad. Siempre un tatuaje significa algo en la vida. Y el mío significa libertad en la vida.
Dylan solo sonrió tomandola de su mano caminaron ya casi hasta la puerta principal. Maïa estaba muy nerviosa si su hermano se encontraba en Los Angeles podría ver esas noticias. Esperaba que tal vez no le llegue a reconocer. Aunque tal vez ni lo hacia. Ella llevaba otro color de cabello. La hacía ver un poco mayor para su edad.
-Ven cariño -dijo Dylan-  Hoy el mundo conocera a mi "Supuesta novia".

Dylan salio de la mano de Maïa ella simplemente agacho la cabeza esquivando el flash de las cámaras siendo halada por Dylan hacia su auto. El puto egocéntrico de aquel muchacho contaba con un Audi R8 uno de sus autos favoritos de Maïa despues de la gama del  BMW.
Ella ingresó al auto sintiendo aun a los paparazzis con sus camaras agra vez de las luna polarizadas.

- ¿Acaso no te cansas de esta vida?- preguntó Maïa.
-No - sonrio Dylan dando marcha a su auto.- ya es parte de mi vidas.  Ahora nuestro destino es almorzar y a conversar.

Al llegar Maïa vio un restaurante muy eleganta el ballet parking llevo el auto de Dylan cuando bajaron de allí e ingresaron a la recepción. Los mozos saludaron a Dylan y a Maïa llevándolos a una mesa apropiada. Tras pedir el almuerzo el silencio inundo en aquella mesa. Maïa miraba por todos lados y Dylan solamente se fijaba en ella.
-Dime April ¿por que estas allí en ese albergue trabajando? - pregunto Dylan.
-Necesito el dinero- respondió Maïa.
- Yo te puedo dar mas dinero solo tienes que hacer algo por mi. - dijo Dylan encontrandose con los ojos serios de Maïa.
-¿Así?- pregunto ella- ¿Qué sería?
-hagamos creer a la gente que Dylan Miller ha cambiado que ya no es un casanova empedernido. Que quiere formar una familia y que encontro una novia que le haga cambiar en todo.  Saldra conmigo cuando lo necesite, te dare mensualmente el dinero que necesites. Y sobretodo te dare un departamento todo amoblado sin que pagues nada en un exclusivo lugar en Malibu tan solo por hacerte pasar por mi novia.
Lo del bebé seguiría igual. Solo quiero dar otra imagen a mi vida.
-Erea un farsante y egoista -Dijo Maïa enojada- mira afuera -apunto a la calle- hay millones de padres que desean tener un hijo y tu solo por querer cambiar el concepto que todo el mundo tiene de ti quieres concebir un hijo. -Maïa se paro de aquel sitio muy molesta por aquel egocentrista.

-Yo si quiero un hijo April-dijo Dylan- nunca he querido tanto como quiero ser padre. No fui solo por mi ego. Tengo 24 años y estoy solo, anhelo tener un hijo y darle lo que el se merece.

La sinceridad con la que Dylan hablo hirió fuertemente a Maïa,en sus ojos solo se veia deseo y anhelo. Y ella no era quien para romper aquella ilusion.
-Esta bien Dylan es un trato.