•» Capítulo Treinta y Nueve «•

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Penúltimo capítulo.

Dylan corrió al ver a su pequeña hija parada en la puerta de aquella casa,  se veía hermosa,  una hermosa pequeña de cabellos rubios y ojos celestes, la tomo en sus brazos y la lleno de miles y miles de besos,  amaba aquella niña,  amaba a ese ser de vida que nació de Maïa,  la amaba tanto que ahora si temía el haber podido morir. 

    - Hola Dylan. –  saludó  Louise  feliz de ver allí a aquel muchacho.  – Bienvenido a casa.

    - Muchas gracias Louise.  – dijo Dylan besando la mejilla de la madre de Maïa.- gracias por toda esa preocupación y por cuidar a Mia.

    - No agradezcas nada Dylan. – Dijo Travis al ver a su cuñado. – bienvenido a casa.  Fue un gusto cuidarla.  No hace ni lío.  – sonrió. 

El lugar era hermoso,  aquel departamento tenia todo ese ambiente de Maïa y de Mia  pero no era su lugar,  su hogar estaba en Los Ángeles,  el deseaba volver,  todo ese lugar le traía y le traerá ese mal recuerdo de haber estado sin las mujeres que ama 4 meses juntos.

- Ven cariño. – dijo Maïa tomando la mano de su prometido. – debes descansar  ¿no crees?

Los presentes en aquella casa se sorprendieron al verlos tomados de la mano,  aunque sabían que ella volvería con Dylan. Maïa había sido la novia perfecta , ella había cuidado día y noche a Dylan. Ella por cualquier error que había cometido el, lo perdonaría. Por el simple hecho de que ella lo amaba de verdad.

- Esta bien amor.  – dijo Dylan mirando a todos los presentes.  – Maïa y yo nos hemos. Vuelto a comprometer.  – sonrío al ver la sorpresa de todos ahí reunidos.
 
- ¡Vamos a casarnos!- dijo la castaña eufórica ante tanta felicidad.
Sophie la abrazo fuertemente  sintiendo aquella felicidad que ella expulsaba por cada uno de sus poros,  adoraba a su mejor amiga.
Como si fuera su propia hermana. 
- Tenemos una noticia para todos.  – dijo Trevor mirando a todos también. – es algo que no espere que me pasara,  pero de verdad me hace sentir feliz e ilusionado.

Los ojos de Maïa y de Dylan se enfocaron en Sophie quien tenía una dulce mirada,  que solo Maïa tuvo cuando estuvo embarazada.

- ¡No! – dijo Maïa con una sonrisa fugaz.  -¿Es broma?

Trevor sonrió detenidamente, tomando la mano de Sophie. La rubia miro fijo a aquel muchacho,  al gemelo de Dylan,  a quien ella aprendió a conocerlo,  casi dos años de conocerse les basta para poder saber que era lo mejor. 

- No queríamos darle la noticia cuando estemos todos juntos. – dijo Sophie quien era abrazada por Trevor.  – y ahora que estamos todos. – sonrió. –¡ Estoy embarazada!

Todo se quedo en silencio,  nadie dijo nada,  estaban sorprendidos,  los ojos de Travis bajaron hasta el vientre de Sophie,  quien era acariciado por Trevor,  en sus rostro había felicidad. 

- Mi hermano va a ser padre. – dijo Dylan. 
- ¡Estamos embarazados!- repitió Trevor haciendo reír a todos.  – voy a ser papá y estoy muy feliz por ello.  La relación que nació con Sophie fue de la nada,  éramos siempre amigos, estuve con ella en los buenos y malos momentos,  al igual que ella para mi. No se en que momento nació el amor,  pero la verdad.  – sonrió mirando a su mujer. – me saque la lotería,  es como si Soph y Maïa fueron cortadas con la misma tijera, hicieron que dos hombres casanova, en estos hombres que ahora Dylan y yo somos,  hombres responsables,  que respetamos a una sola mujer.  Sophie me hiciste creer nuevamente el amor,  la verdad me saque la lotería a tu lado.  Y ahora, me dad la mejor noticia del mundo a mis 26 años seré padre.  – sonrío emocionado. 

- Gracias amor.  – dijo Sophie. – gracias por todo esto.

- Jamás he pensado en que deseabas ser madre .- dijo Travis aun sorprendido. – es más jamás creí que tenías una relación con Trevor. 

- No queríamos decirlo aun. – dijo Trevor protegiendo a su novia.- al final estábamos o no, o decíamos o no era asunto nuestro. Si lo decimos o no es ahora nuestro tema  por que estamos dando otro paso,  no somos novios,  somos una pareja , seremos padres,  es mejor que tu busques tu vida Travis,  y dejes de buscar a mi mujer. 

Silencio, todo la habitación  estaba en silencio,  ojos verdes y ojos azules estaban en silencio por que sabían perfectamente que Travis aun buscaba la forma de que Sophie volviera con el. Pero esta vez  ella ya había realizado su vida, con un hombre que amaba.
- Felicidades .- dijo Maïa sonriendo. – felicidades Trev y Soph, ahora serán tres y se que serán más felices de lo que son ahora. Se lo merecen.

- Se que he lastimado a la mujer de mi vida. A mi hermano. A mi amiga,  les debo a todos una enorme disculpas. – dijo Dylan.-  tengo la más hermosa familia , tengo un hermano al que amo y cuidare siempre. Tengo una mujer que me ama demasiado como yo lo amo. Y tengo una hija que daría mi vida una y mil veces, tengo una suegra que me quiere. – miro a Louise. – gracias Lou.  Gracias Travis y Taylor por todo.  Gracias por formar esta hermosa familia,  gracias,  Sophie por dar un miembro más a esta familia,  por darme un sobrino o sobrina,  por darle una primo a mi hija.  Espero que sean felices siempre. 

~
Maïa dormía sobre el pecho desnudo de su prometido, mientras el acariciaba su espalda,  había extrañado ese tacto hacia muchísimo tiempo. Dylan amaba el perfume de su diosa,  aquel perfume suave que ella de sus poros emanaba.  Amaba sus suaves caricias,  sus dulces ojos color plomo,  amaba ese cuerpo delicado que tenia, lo único que deseaba era ella poder jurar frente al altar. 

- Te amo Maïa Pierce,  te amo con toda mi alma.  – falta tan poco para que seas mi esposa. - te amare por toda mi existencia. 

Sin hacer el menor ruido camino hasta la habitación de su hija, era hermosa mientras dormía,  la miro fijamente,  no perdía la vista de ella,  se perdería viéndola,  no se cansaría de verla. Mia era su adoración. Tan de el, jamás había sentido ese amor tan puro y tan sincero como el que Dylan siente por su hija.
Es ese amor que sienten los padres y lo demuestran al proteger, al querer calmar el dolor,  al verla sonreír,  es ese amor que no tiene una sola explicación pero que se da y es lo más puro del alma,  amaba a  Mia con cada fibra, con cada latido.  Era sinceramente el más grande y dulce amor que jamás sintió.  Quería tener todo una vida completa para ella.  Quería que jamás sintiera ese dolor de perder a alguien o de crecer sola.  Quería ser siempre su apoyo. 

Un año de vida un año que lleno su vida de alegrías.  La amaba y adoraba y lo hará siempre.  Acarició su cabello, dejando un suave beso en su cabellera rubia de aquel ángel. 

- Gracias por cambiar mi vida mi princesa. – dijo mientras la veía dormir. 

~
Hola a tod@s bueno antes que nada. Como dice este es el penúltimo capítulo de Alquiler de Amor.  No habrá segunda da temporada.  Se culmina aquí.  No se si haré otra historia,  aunque tengo una que me falta editarlo en mucho.  Espero les guste este capitulo lo hice de corazón. 
Bueno también la última parte de esta historia lo dedico al cielo donde esta mi ángel me inspire en el, en su amor. Es un capítulo lleno de emoción, lleno de recuerdos.  Gracias a cada uno por leer Alquiler de amor.  Gracias de corazón ❤

Las Amo❤
Xoxo

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