Los Sapos se Convierten en Príncipes 《Chunji》[Terminada]

Capítulo 29 ¤El sapo se convierte en príncipe¤

-Está muy hermosa el día de hoy señorita --halagó mi mamá cuando me vió-- ¿va a algún lugar?

-Sí, Chan Hee vendrá por mí en unos minutos. Iremos a pasear.

-Me parece bien --aprobó con una sonrisa tan grande como la mia--

Después de una agitada semana en el instituto, tareas y las clases particulares que seguía dándole a Chan Hee, a pesar de que ya no las necesitara porque sus notas habían mejorado mucho, nuestra costumbre de salir los domingos a pasear con Haneul, no se había perdido.

Pero lo que sí había cambiado, era el hecho de cómo me veía. Ahora me vestía más femenina, porque quería lucir linda para Chan Hee. Aunque seguía usando mis horrendos y grandes anteojos, como los llamaba él, ya que no me acostumbraba a los lentes de contacto.

El timbre sonó, y fui corriendo a abrir la puerta, porque sabía que el "Señor arrogancia" había llegado.

-¿Y Haneul? --pregunté extrañada al verlo sólo a él y su...¿auto?-- ¿desde cuando tienes un auto?

-Hola, te extrañé, y te ves muy guapo hoy. ¿no se supone que es lo primero que deberías decir al verme? --rodé los ojos y él rió-- de acuerdo, eso es lo que te quiero decir yo. Te ves hermosa, Tn --se acercó y depositó un beso en mi mejilla--

-¿Y esas flores? ¿son para mí? --pregunté emocionada al percatarme del ramo que traía oculto atrás suyo--

-No, son para tu madre.

-¿Alguien me llamó? --habló mi madre apareciendo de repente--

-Mamá...¿estabas espiando? --cuestioné sonrojada, ella siempre hacia eso cada vez que venía Chan Hee--

-No, claro que no --fingió inocencia--

-Madre, esto es para usted --Chan Hee le dio el ramo, y mi mamá lo recibió encantada--

Después de despedirnos de mamá, Chan Hee me abrió la puerta del carro y luego de subirse arrancó.

-Siempre le traes cosas a mamá, menos a mí --me quejé de brazos cruzados-- ¿qué acaso no soy tu novia? También me gustan las flores, los chocolates, y los peluches...y...--Chan Hee metió un dulce a mi boca, haciendo que me callara--

-Y los dulces, los helados... Sí, ya lo sé.

-¡¿Entonces por qué no me traes esas cosas a mí también?! --reclamé poniendo el dulce a un lado de mi mejilla--

-Porque a ti te doy otro tipo de cosas. Así como las de ayer...en tu cuarto --sonrió pícaro y no pude evitar sonrojarme--

-O...oye...fu..fueron sólo besos --titubié y Chan Hee se empezó a reír como loco-- cualquiera que te escuche podría pensar mal --abrí la ventana del auto y me aclaré la garganta para cambiar de tema-- ¿Por qué no trajiste a Haneul?

-Quería que hoy fuésemos sólo tú y yo. Ya sabes, una cita.

-¿Cita? --Chan Hee giró el volante para doblar en una esquina y asintió--

"Cita"...si tenemos que hablar de esa palabra, pues ésta no sería la primera vez que tendríamos una.
-¿Iremos a La Jungla como aquella vez?

-Esa vez no cuenta como una cita, ya que prácticamente te llevé a la fuerza.

-Pero terminamos abrazados y al final me llevaste de regreso a casa. Así terminan las citas.

-Eso fue porque nos asustó un gato. Y te llevé a casa, porque había llovido. No podía dejarte así, en medio de la noche y empapada.