Los Sapos se Convierten en Príncipes 《Chunji》[Terminada]

Capítulo 9 ¤¿Miedo?¤

NARRA TN

7:15 am.

Ya pasaron 15 minutos desde el inicio de clases. Creo que Chan Hee no vendrá hoy. Tal vez, por ser su cumpleaños se tomó el día libre.

8:00 pm.

Llegué a su casa y toqué el timbre. La joven del servicio dijo que había salido hace algunas horas, por lo que entonces le pedí ver a Haneul y me dejó pasar.

9:00 pm.

Aún no llegaba, y Haneul ya se había quedado dormida después de jugar un rato.
La acosté en su cuna, y fui al cuarto de Chan Hee.

Pasé y todo estaba en orden, tenía cosas muy bonitas y seguramente caras...típico de un niño rico.

Dejé la caja que contenía el pequeño pastel y la lata rectangular donde se encontraba su obsequio, en su escritorio.

Estaba por salir, cuando vi algo tirado en el piso. Me acerqué a levantarlo, se trataba de la foto de una chica...muy linda, por cierto. Su cabello era negro, con unas ligeras ondas, su piel blanca como porcelana, y sus ojos color café oscuro. Era tan bella, que parecía la actriz de algún drama.

Por lo que sabía, Chan Hee no era de tener nada serio, por lo cual no guardaría la foto de una chica, como si fuese un perdido enamorado. Entonces...¿quién era la de la foto?

9:45 pm.

Ni siquiera sé cómo me atreví a venir a "La Jungla", pero ya estaba aquí.

Al entrar divisé a L.Joe, quien conversaba con dos chicos. Al verme, les dijo algo y se acercó a donde me encontraba.

-Tn, que gusto verte de nuevo --me saludó con una sonrisa--

-Hola --también le correspondí el gesto-- disculpa...¿Chunji está aquí?

-Sí, llegó hace unas horas.

-¿Podrías llevarme con él?

-Claro, aunque...--parecía que quería decir algo, pero sólo negó con la cabeza-- no, nada. Vamos, te llevaré con él --lo seguí--

Nos detuvimos a pocos metros de la barra.

-Ahí está --lo señaló con la mano--

-¿Por qué él..? --pregunté confundida al verlo, Chan Hee lucía deprimente--

-No sé cuál sea su razón, pero el pasado 5 de octubre también fue así. Como cumplía años, pensé que haríamos algo para divertirnos. Pero él sólo se sentó ahí, y comenzó a beber. Al igual que ahora, se veía mal, por lo que traté de animarlo, pero nada resultó. Al final, terminó tan ebrio que me tocó llevarlo a mi casa. No lo llevé a la suya, porque se hubiese ganado un gran problema, si su padre lo veía en ese estado.

-¿Y no te dijo por qué se comportó así?

-No, no mencionó nada. Quién sabe cuál sea su motivo --se encogió de hombros--

-Iré a hablar con él --L.Joe asintió y regresó a hablar con sus amigos--

Me acerqué a Chan Hee, y me senté a su lado.

-Chan Hee...--ni siquiera volteó a mirarme-- oye, debes regresar a casa, ya es algo tarde.

-¿Qué haces aquí? --preguntó con un rostro serio--

-No te encontré en tu casa, así que supuse que podría encontrarte en el bar --se sirvió un vaso y lo tomó de un sólo trago--

-¿Quién te dijo que vengas a buscarme? --se volvió a servir otro vaso-- Vete --espetó con frialdad, tomandó un trago más--
-Yo sólo quería...--golpeó su vaso contra la barra, haciendo que me sobresaltara--

-¡Que te vayas! --gritó-- déjame solo. ¿Estás sorda? --cuestionó al ver que no me movía--

-Vamos a casa Chan Hee --insistí-- es tarde, ya estás muy ebrio, y te puede pasar algo.

-¿Te precupas por mí? ¿Por qué? ¿Vas a decir que porque somos amigos? -rió desganado, como si en realidad quisiera llorar-- Nada de eso es cierto, el amor, la amistad...todo es mentira, fingimiento, hipocresía...basura.

-¿Por qué dices eso? ¿Qué te pasa? --tal vez había tomado demasiado y no estaba en su juicio, pero aún así me dolía escucharlo hablar de esa manera, porque mi amistad hacía él sí era sincera-- Yo nunca he fingido contigo, siempre me he mostrado como soy, y las cosas que he dicho o hecho han sido porque realmente lo he sentido.

-Mientes, eres igual de sínica que todas las mujeres --escuchar aquello hizo que mis ojos se llenaran de lágrimas-- ustedes sólo quieren pasar un buen rato, dicen cosas bonitas para obtener algo, y luego traicionan cuando menos te lo esperas --en su tono de voz se podía notar la rabia que guardaba--

-¿Qué? --no entendía porqué decía todo eso, pero estaba siendo demasiado cruel--

-Sí, como ella...decía que me amaba, pero sin embargo, no dudo ni un segundo en meterse con mi supuesto "mejor amigo". No entiendo cómo eran capaces de mirarme a la cara y no sentir nada. No, tal vez sí sintieron algo...¿diversión? Seguro se habrán burlado de mí muchas veces, al ver lo patético y estúpido que era, por no darme cuenta de lo que se traían --en sus ojos se acumularon lágrimas de decepción--

Nunca imaginé que alguien como él, podría haber pasado por semejante engaño. Tal vez eso explica el porqué de su comportamiento con las mujeres. Chan Hee jugaba con ellas, porque en el pasado, también lo habían hecho él. Ahora todo tenía sentido, pero aún así, su actitud no se justificaba.

Pero, ¿por qué recordarlo el día de su cumpleaños?

-¿Sabes...lo que se siente enterarte de todo eso el día de tu cumpleaños? --y he ahí la respuesta a mi pregunta-- Ellos ni siquiera tuvieron el valor de hacerlo, sino que me llegó un mensaje de un número desconocido, diciendo: "Feliz cumpleaños, espero que te guste tu sorpresa". Se trataba de una foto, donde ellos dos estaban...besándose. Eran una porquería --limpió con brusquedad una lágrima que caía por su mejilla--

-Entiendo que te lastimaran, pero no todas las personas somos iguales. No todos te vamos a traicionar --aseguré, Chan Hee negó con la cabeza--

-No, yo ya no confío en nadie. Por eso...--se giró completamente en su asiento, para verme directamente a los ojos-- es mejor que esto termine, Tn.

-¿A qué te refieres? --pregunté confundida--

-A las clases, nuestras conversaciones, las salidas de paseo...todo. Cada vez que estás cerca mio, cada vez que te veo, hay algo que me perturba y...me da miedo.

-¿Miedo de qué?

-No lo sé, sólo...no quiero que empecemos una amistad.

-Pensé que ya éramos amigos --hablé a pesar del nudo que se había formado en mi garganta--

-Pues te equivocas, tú y yo...no somos nada más que dos compañeros de clase, los cuales terminaron hablándose, sólo porque mi papá me obligó a aceptar unas estúpidas clases.

-Estúpidas clases...claro --sonreí con desgano-- tienes razón, todo esto ha sido estúpido, ¿verdad?

-Así es --se levantó arrastrando su asiento-- te molestaba que te llevara al cuarto de limpieza ¿no? Pues ya no lo haré más. Tú tampoco tienes que volver a mi casa --concluyó--

Sacó unos billetes de su bolsillo, y los dejó sobre la barra.
Luego se fue, sin siquiera volver a mirarme o despedirse.

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(0.o)

Gracias por leer n_n