- ¿Estás bien enamorada, no? – le dijo Caitlin a Charlotte, terminándose de pintar una buena raya del ojo.
- Mucho. Más que nunca.
- Se nota, y el también.
- Pero tengo miedo, Cait.
- ¿Por qué?
- Por que cuando yo ya no esté... Temo como Justin se lo vaya a tomar. – sus ojos se humedecieron – No quiero morirme, pero es lo que me merezco, después de no haberme puesto el jodido casco de la moto...
- No, Charlotte. No mereces lo que estás pasando. Y te aseguro que Justin no sería el único que sufriría mucho. Tus padres, tus compañeros. Yo. – Charlotte abrazó por detrás a Caitlin. Ella dejó el maquillaje en su tocador y se giró. Besó la mejilla de Charlotte, la cual ya se encontraba húmeda.
- Esto no es justo. Tengo rabia, tristeza y felicidad a la vez, todo dentro de mí. – se escondió en el fino hombro de Caitlin, descubierto por ir con un vestido sin mangas, negro. – Rabia, por que se que cuando yo... me vaya, Jasmine estará allí, comiéndole el culo a Justin, como siempre ha hecho. Tristeza por todos los que me apoyáis, como tú lo haces, mi vida... y felicidad. – levantó la vista y tiró los mocos hacia arriba. – porque me habéis hecho la chica más feliz de este puto mundo.
- Charlotte... - ella la abrazó fuerte. – no me llores, dios, no me llores. – besó su frente – sabes que yo estoy aquí, siempre estaré. Sabes que si algún día te vas por lo que sea, yo protegeré tu nombre, lo mantendré en lo más alto, como tú y solo tú te mereces. Muy pocas personas te conocen de verdad. Y Justin no es de esos que se dejan engañar. Te aseguro que él será... - rió. – después de mi, claro... – miró mal hacia la nada. – la persona que más apoyo te dé.
- Gracias...
- Y ahora me contarás eso de la mujer más feliz del mundo... - se apartó un poco para mirarla. – porque creo que hay un doble sentido...
- Bueno, la verdad es que lo decía por diferentes cosas...
- Si, a mi me vino una imagen diferente en mente...
- A saber lo que ha pasado por esa cabeza tuya. – rió.- Bueno... es que... El otro día...
- ¿Si? – le frotó el brazo – Sabes que puedes contarme lo que sea ¿no?
- Ajá... - Charlotte sonrió. - ¡Cielos, Cait! Hice el amor con Justin...
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En 16 dias (Terminada)
Teen FictionCharlotte era libre. Si, un alma rebelde. Y ahora su pelo volaba libre, al viento. Esas ondas tan definidas de un color castaño muy peculiar, eran acariciadas por la brisa del aire, que soplaba al ritmo que corría la moto. Iba agarrada a la cintura...