Misión imposible: ¡Proteger al décimo!

¿¡Qué hacen aquí!?

El ambiente en la sala se había congelado justo en el momento que el nuevo profesor y el nuevo estudiante ingresaron en el salón, ambos lucían bastante peligrosos y por un momento los estudiantes de nami-chū sintieron lástima por aquel castaño al cual el azabache miraba fijamente, "Es su culpa por ser dame-tsuna".

–¿Crees que es correcto llegar tarde en tu primer día de clases, escoria?–La imponente voz del mayor estremeció a medio salón e hizo palidecer al recién llegado.

–¡Hiii!, ¿¡Qué hacen ustedes aquí!?–La sonrisa de cierto rubio le causo aún más terror al menor.

–Ushishishi~, también es bueno volver a verte, plebeyo–Los alumnos estaban confundidos, ¿Eso significaba que se conocían?.

–¡Entra de una buena vez, dame-tsuna!–El hecho de ver como alguien de gran importancia como Tsunayoshi era tirado al suelo por otro recién llegado no aligeró el tensó y gélido ambiente.

Enma suspiro al notar como las manos de los Varia se dirigían al lugar donde, obviamente, deberían estar sus armas más que preparadas para hacer volar cerebros y sangre, se permitió sentir lástima por su buen amigo y extrañar a los guardianes más fuertes y protectores de ambos, "Es una pena que Adel y Hibari-san hayan sido enviados por Reborn a Italia para que empezaran sus estudios universitarios".

–Muy bien, ignoremos todo eso y empecemos de nuevo, mi nombre es Xanxus di Vongola y estaré a cargo de ustedes este años, escorias–La simpática presentación del Varia altero a Sawada quien en silencio fue a sentarse junto a su pelirrojo amigo.

–Mi nombre es Belphegor, es todo lo que necesitan saber de mi, plebeyos, shishishi–El rubio fue a sentarse detrás de los capos con una sonrisa escalofriante.

Fuera del establecimiento un pequeño infante observaba las diferentes reacciones que tenían la décima generación al notar las presencias de aquel problemático grupo, Nono había tenido una excelente idea al poner a Varia como los guardaespaldas de su dame-estudiante.

–Ahora sólo queda retrasar los regresos de los guardianes más conflictivos–El hitman sonrió divertido antes de mirar a su casi discreto invitado.

–¿Te refieres a los guardianes de sol, nube, niebla, glaciar y bosque?–Viper suspiro al pensar en todo el dinero que se desperdiciaría en un intento por distraer a ese grupo.

–Hibari regresa casi todos los fines de semana para revisar que su preciada namimori siga intacta y que Tsuna sigue con vida al igual que Mukuro regresa para asegurarse de que M.M no haya dejado sin hogar a Chrome y a Fran–Reborn suspiro aburrido al igual que el Varia, sinceramente no entendían qué les preocupaba tanto.

–Hablando del aprendiz de Mukuro, según tu experiencia como tutor ¿Crees que ya éste preparado para unirse a nosotros?–La pregunta del ilusionista le devolvió la sonrisa al azabache.

–¿Ya te urgen unas vacaciones? Porque de ser así deberías desistir, ese chico necesita culminar su entrenamiento con Chrome para poder llegar al nivel que tenía su versión futura–Ambos infantes sonrieron antes de desaparecer, cada uno a su manera, dejando detrás de ellos un sentimiento de inconformidad en un francés y un Vongola.

Las clases pasaron entre cuchillos, balas y algún que otro boss, no encuentro a Mammon y Squalo esta teniendo problemas de parte de cierto travestí, cuando el descanso llego Tsuna no dudo en arrastrar a su mejor amigo en dirección a la azotea donde sus muy perplejos e irritados amigos les esperaban.

–¡Juudaime! ¡Tenemos problemas!–El grito de Gokudera no se hizo esperar, dejando sordos a los pobres capos.

–¡Tsuna!, ¡No vas a creerlo, Squalo es mi profesor de matemáticas!–La enorme sonrisa de Yamamoto incómodo a los menores, parecía ser el único feliz de ver a Varia.

–Boss, Lussuria-san es nuestro profesor de biología–Murmuró Chrome ruborizada, recibiendo un asentimiento de parte de Sasagawa.

Sawada suspiro al notar los problemas que seguramente se avecinaban, desde el momento en que vieron que habían tocado en clases diferentes había tenido un muy mal presentimiento que se había confirmado al ver a los asesinos con los que tendría que convivir de ahora en adelante, extrañaba demasiado a sus torturadores guardianes en esos momentos, se sentía tan desprotegido.

–Me pregunto para qué habrán tenido que venir–El comentario del otro dame saco de sus pensamientos a todos los presentes.

–Yo puedo responder eso–La cantarina voz del extravagante sol de Varia sorprendió a los jóvenes.

–¡Eso lo iba a decir yo!–Exclamaron tres voces al unísono, Tsuna suspiro al darse cuenta de la lluvia de balas y cuchillos que se avecinaban en su dirección, sin razón aparente.

–Como sea, se le ha ordenado a Varia que proteja al heredero de Vongola en su último año escolar en Japón–El comentario del único que no atacaba a Sawada interrumpió las peleas y discusiones.

–¿Qué? ¿Proteger a Tsuna-kun? ¿De qué tienen que protegerlo?–La inocente voz de Kyoko sobresalto a los menores que decidieron sacarla de allí.

–Sasagawa-san, olvide decírtelo pero Kurokawa-san estaba buscándote y no te preocupes por Tsuna-kun, no es nada importante–La chica miro al Simon con duda antes de asentir y retirarse para buscar a su mejor amiga.

–Muy bien, como decía...–La voz del antes conocido como arcobaleno de Varia fue interrumpida por un gruñido bien conocido por todos.

–¿¡Por qué demonios me dejaron solo, basuras!?–Los Vongola y los Varia se estremecieron al ver al azabache caminar en dirección a donde se encontraban, específicamente a cierto pelilargo que ni idea cuando llego.

–Boss, yo estaba con usted–Por obvios motivos Levi fue ignorado.

–Una vez todos presentes creo que lo mejor sera que les explique todo–El hitman sonrió divertido antes de apuntar con su arma a su estudiante y al hijo de noveno.

Las miradas carmesí y miel de ambos cielos se encontraron y el menor de ambos no pudo evitar estremecerse al notar la ira en aquellos orbes, "Y yo que pensaba que el abuelo me quería" un suspiro resignado escapo de los labios del omnívoro momentos antes de que Reborn empezara su relato.