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—¡Llévame a ver los cerezos, Kookie! —Exclama Suyeon haciendo un puchero.
JungKook había entrado a la universidad y ella a su último año de instituto, por lo que ambos tenían muy poco tiempo para verse, pero la chica quería aunque sea pasar un día con él en su lugar favorito.
—Nena... tengo exámenes esa semana, lo siento mucho, quizás podríamos ir mañana a pasear y aprovechamos de comer, pero no tengo mucho tiempo.
—Nunca tienes tiempo, JungKook... —Afirma con tristeza— ¿Recuerdas la semana pasada cuando te invité al cumpleaños de mi madre? La fiesta era con baile, y todos habían traído una pareja, ¿sabes quién quedo sola? Ajá, yo.
—¿E-era con parejas? ¡Me hubieras dicho!
—¿Y qué sacaba con decirte si estabas "ocupado"? Oye... entiendo que estés estresado y cansado por la universidad, los exámenes y todas esas cosas, pero creo que también deberías darme aunque sea media hora cada dos días a mi, viendo que sólo un día a la semana me vienes a ver.
—¿No es eso mucho, SuYeon? Debo estudiar también, además, deberías agradecer que estoy aquí.
—¿¡Media hora es mucho para ti!? ¡Lo único que has hecho desde que llegaste es hacer ese trabajo para la universidad! Ni siquiera me estás mirando ahora...
—¡Lo siento! Lo siento, ¿sí? No es mi culpa querer aprobar los exámenes.
El silencio inundó la habitación, Suyeon veía con los ojos cristalizados la espalda de JungKook, asintió con lentitud dos veces y sorbió su nariz antes de volver a hablar algo dudosa.
—Jeon JungKook, quiero terminar contigo. —Murmura con voz quebradiza, dejando caer todo su peso en la cama al sentarse.
El chico la mira, sin poder creer lo que dice suelta una pequeña risa nerviosa.
—¿Q-qué estás... diciendo?
—¿Ahora también estás sordo? Quiero que esto termine, no quiero seguir siendo ignorada.
—Nena, yo no estoy ignorado, ¿por qué dices eso? Es sólo que estoy muy concentrado en mi carrera, lo entiendes, ¿no?
—Faltaste a mi cumpleaños... ni siquiera lo recordaste, en nuestro aniversario del año juntos no viniste cuando te lo pedí, tenía un regalo para tí, pero faltaste también, cuando te pedí que me acompañaras al funeral de mi abuela...¿sabes qué me dijiste? "Estoy ocupado", ¿quieres que siga?
—SuYeon... —JungKook se iba a acercar a SuYeon, pero la chica lo detuvo y continuó hablando.
—¿Sabías que ahora tengo un gatito y se llama Kookie, o que me hice un tatuaje, que fui varias veces a tu casa para verte, pero nunca estabas, que iba a tu universidad para dejarte la colación, pero pasaba media hora y nunca llegabas a recibirlo, que Jimin volvió a ser mi amigo? ¿Sabías algo de esto? No... claro que no lo sabías, porque ya ni siquiera existo para ti.
