Capítulo 12

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No podía apartar la mirada, era como si el tiempo hubiese sido detenido y las personas hubieran desaparecido, sólo estábamos Jassid y yo, viendonos a los ojos sin decir absolutamente nada. No sabia que decir, no sabia que hacer, mi mente estaba completamente en blanco, lo único que pasaba por mi cabeza en ese momento era... ¿Que hace él aquí? ¿Porque no dijo que vendría a esta misma escuela? ¿Porque tenía ese efecto en mi con sólo mirarme?
Ninguno abrió la boca, él se giró hacia su nuevo grupo de amigos quienes estaban platicando tranquilamente dejandome como una completa estúpida viendo su espalda.

-¡Mia! -escuche que me llamaban a lo lejos, voltee y era Annette- ¡Ven, la clase está por comenzar-

-Ya voy -la sonreí levemente y voltee a ver por ultima vez a Jassid quien seguia ignorandome- Lo siento de nuevo -él sólo volteo un poco, se encogió de hombros y sigo en lo suyo Camine hacia mi salón- Hola, Annette.

-¿Que tal tus vacaciones? -me abrazo fuerte-

-Muy bien -me reí levemente mientras correspondía el abrazo- ¿Que tal las tuyas?

-Muy bien -terminamos de saludarlo y entramos al salón- ¿Quien es el chico? -pregunto con curiosidad-

-¿Que chico? -me hice la desentendida-

-Mia, no te hagas la loca -cruzo sus brazos- El chico de las escaleras, parecia que habias visto un fantasma.

-Oh, él -ella asintió- Es un... conocido.

-¿Conocido? -asenti leve- ¿Porque será que no te creo?

-No lo se -me encogi de hombros-

-Vale ya, Mia -me hinco las costillas haciendo reir- Cuéntame, soy tu amiga, ¿No? -me quedé observancia un momento, suspire y asenti-

-De acuerdo -voltee a ver el salón para asegurarme de que Pierce no hubiese llegado- ¿Recuerdas que te conté que me gustaba un amigo de Pierce? -ella asintió emocionada-

-Es él, ¿cierto? -asenti haciendo una mueca con los labios- ¡Que emoción! -me abrazo de nuevo- Lo tendrás cerca y lo verás todos los días.

-Tranquila -me reí ante su reacción- Eso no significa nada.

-¿Ya no te gusta? -me quedé en silencio un momento-

-No lo se -respondi suspirando- Es tan raro, me hace dudar de muchas cosas y nunca se como va a reaccionar, incluso me ignoró hace un rato.

-Mia, es un chico -voltee a verla- Creo que en cuestion de amor ellos son igual a nosotras, ni ellos saben que quieren -ambas nos reimos- Así que, tu tranquila. Deja que las cosas pasen a su tiempo.

-Si, tienes razón -sonrei- Aunque no me haré ilusiones -ambas sonreimos. En ese momento llego Pierce-

-Chicas, ya no lloren -entro al salón- Por fin he llegado.

-No sabes lo mal que me tenía el que no llegarás -dije sarcasticamente mientras fingia limpiar una lagrima-

-Que graciosa -me lanzo un envoltorio de algo que venía comiendo- Ya estoy reconociendo tu sarcasmo.

-De eso se trata, tonto -saque mi lengua y Pierce respondió imitandome-

-Hola Pierce -lo saludo Annette-

-Hola Ann -él le sonrio- ¿De que hablaban?

-De nada -ambas sonreimos inocentes-

-¿Me creerán si les digo que no les creo? -entrecerro sus ojos- Sus sonrisas tiernas ya no me dan confianza.

-Pues puedes o no confiar en nosotras -hablo Annette- Ese no es problema nuestro.

-Venga, díganme de que hablaban -se sentó a un lado de nosotras- Prometo no decir nada a nadie si quieren que sea secreto.

Me enamoré de un idiotaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora