Capítulo 25

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Jassid.

-1 año atrás-

Luego del accidente, había decido alejarme de Mia. Nuevamente me estaban buscando, estuvieron siguiendome todo este tiempo buscando alguna forma de hacerme daño y estando cerca de ella solo le traería problemas, no me perdonaría si algo peor le hubiese pasado en ese accidente. Mia no merecía eso, así como yo no merecía amar a alguien tan buena como ella.
La tarde que me dieron el alta, mi tía había pasado por mi y mi hermana, quien no se había despegado ni un solo momento, me ayudaron a subir al auto ya que estaba completamente adolorido y fuimos a casa. Una vez ahí, estábamos en la sala luego de comer un poco.

-Jassid, ¿nos dirás que fue lo que pasó? -preguntó Nayla, mi hermana y solo negué con la cabeza-

-Esa chica que estaba contigo pudo morir, Jassid -dijo mi tia- ¿Que estabas pensando?

-Ya lo se tía, creeme que lo se -me molestaba que me tratarán como niño- No puedo decirles que paso, pero si les prometo que no volverá a pasar

-¿Tan malo es? -dijo Nayla intrigada, ella sabía un poco de lo que había pasado años atrás. Asentí con la cabeza y ella solo suspiro pesadamente- ¿Y que harás entonces?

-Tomé la decisión de irme de aquí -se quedaron calladas- Al menos un tiempo

-¿A dónde iras? -mi tía siempre se preocupaba demasiado-

-Aún no lo se -respondí viendola- Y tal vez sea mejor que no lo sepan

-Solo promete que de vez en cuando te comunicarás -murmuro Nayla- Para asegurarnos que estas bien -asentí con la cabeza-

-Solo esperare a recuperarme para poder irme -ambas asintieron con la cabeza y finalizamos con la reunión- Ire a acostarme, necesito dormir un poco.

Las semanas siguientes mientras me recuperaba, me dedique a reunir dinero suficiente para irme y arreglar mi motocicleta. Había recibido mensajes de Ryan y Scott, mensajes que rara vez respondía ya que reunirme con ellos era tener contacto con Mia y sabía que nos dolería vernos de nuevo luego de la última vez que hablamos.
Una vez lista mi motocicleta, guarde mi ropa en una mochila, un par de cosas de valor y el dinero que había reunido.

-¿Es hora? -habló mi hermana desde la puerta de mi habitación, voltee a verla y asentí con la cabeza- Bien, espera un momento -fue a su habitación y volvió a la mía- También estuve guardando algo de dinero para ayudarte un poco en lo que encuentras una forma de ganar más dinero

-No tenías que hacerlo -me acerqué ella y la abrace- Te lo agradezco mucho Nayla, te mantendré al tanto de todo cada vez que pueda

-Por favor, sabes que mi tía se preocupa demasiado por ti -murmuro abrazándome también- Te quiero mucho Jassid

-Lo sé Nayla -nunca me había gustado tener que despedirme de mi hermana- También te quiero

Dicho esto, fui a despedirme de mi tía y salí de la casa. Me monté en mi moto y comencé a conducir, primero por la ciudad disfrutando de los lugares que más frecuentaba y en los que la había pasado increíble junto a mis amigos y luego, sin rumbo fijo saliendo de la ciudad.
Conduje por horas por la carretera, tratando de pensar cual sería el mejor lugar para ir y tratar de establecerme un tiempo. Al final, la noche cayó y el cancancio se hacía presente así como el frío comenzaba a ser más intenso por lo que me dirigí a la ciudad más cercana para buscar un hotel para descansar un poco, la noche pasó tranquila aunque dormí poco para el cansancio que sentía.
Al día siguiente, eran las 8:00 de la mañana cuando desperté, me di una ducha rápida y bajé al restaurante del hotel para desayunar algo antes de seguir mi camino.

Me enamoré de un idiotaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora