Vengeance (#2)

4. Don de gentes.

La reunión formada entre los concejales y algunos mandos de la ONE estaba en pleno apogeo. Ya llevaban un par de horas debatiendo sobre la situación de la joven hacker que les había ayudado a encontrar a la compañera de Leo.

A los pocos minutos llamaron a la puerta. Por ella entraron Tim Y Trey.

- Sentaos. Debemos hablar sobre la humana.

-Se llama Anne. Ahora ya no puede regresar a su vida cotidiana. En cuanto salga por esta puerta será detenida. Tiene a todas las agencias gubernamentales detrás de ella. Y la obligarán a trabajar para ellos a cambio de no meterla en la cárcel, y si necesitas a alguien como El Rata es porque lo que tienes que hacer es algo sucio. Y ella no estará dispuesta a mancharse las manos. Así que es cuestión de tiempo a que la encierren y tiren la llave.

Diferentes gruñidos se escucharon a lo largo de la sala.

- Yo digo que la paguemos y que le proporcionamos una salida segura de la reserva. Si ,es cierto que ha ayudado a encontrar a una compañera, pero tampoco veo que eso signifique que ella deba permanecer aquí.

Varias cabezas se movieron para enfocar a Jericó. Muchos sorprendidos por la aportación de aquel macho que normalmente no hablaba mucho. Tal vez otros podrían creer que Jericó no participaba por desinterés hacia su raza, pero realmente el solamente prefería no hablar si no fuera necesario. Bastante se asustaba la gente por su aterradora presencia. El sumar una voz tremendamente ronca no ayudaba a calma los ánimos.

- Le prometimos asilo a cambio de su ayuda.

Y entonces varios empezaron a hablar a la vez. Algunos a favor de ofrecerle a la Joven una vivienda permanente en territorio ONE , otros viendo arriesgado proporcionarle un hogar a una persona con claros problemas judiciales.
El único que no hablaba era Ven. Desde su posición apoyado en la pared escuchaba como se aportaban diferentes argumentos a favor y en contra de la permanencia de la joven humana con ellos.
Por eso fue el único que prestó atención a cuando en la puerta se abrió una pequeña rendija.
Aspiro hondo y detectó el olor de la pequeña roedora. El hecho de que ella no entrara le hizo ver que estaba escuchando detrás de la puerta. Y Ven le permitió hacerlo durante unos minutos. Le pareció justo que ella fuera consciente de sus diferentes opciones de primera mano y no por lo que otros pudieran contarle.
Todavía le resultaba molesto que el humano no hubiera acabado de convencer a los demás con respecto a proporcionarle a la joven un hogar.
En su opinión un macho debía proporcionar seguridad y estabilidad a su hembra y si no era capaz de hacerlo más le valía renunciar a ella antes de que otro la tomara para si mismo.
No es que el tuviera la más mínima intención de acercarse a la hembra, pero aún así decidido que en el caso hipotético de que decidiera hacerlo, el humano no se lo impediría.

Cuando los argumentos se empezaron a repetir se escuchó unos ligeros golpes en la puerta, después de los cuales ,entró en la instancia el motivo de discusión.

La joven iba vestida con un colorido y veraniego vestido de flores que le llegaba justo por encima de las rodillas. Su cabello gloriosamente suelto relucía como el cielo nocturno.
Era una visión digna de la portada de cualquier revista de belleza.
Tanto así que captó la atención de varios de los machos presentes.
El sus manos llevaba una bolsa rectangular. Ven se imaginó que dentro llevaría su portátil.

Entró en la instancia con paso decidido y no dudó en dirigirle al humano Trey una mirada furiosa antes de ponerse frente a Justice.

- Estoy lista para irme.

- Tu no te vas a ninguna parte. -Trey habló y desde diferentes partes de la habitación varios machos asistieron ( curiosamente también algunos de los que antes defendía que ella abandonara la reserva).