El Asesino Enamorado.

12-Sentimientos confirmados.

A la mañana siguiente desperté dándome cuenta de la situación, tenia al pequeño Haru entre mis brazos, su piel era tan blanca sobretodo suave, como me encanta.
Aspire su dulce aroma, besé su espalda hasta llegar a su delicado y sensible cuello; se erizo su piel comenzando a abrir los ojos.

-Buenos días.

-Hola Matsui...

Al parecer aún no caía en cuenta en al situación en la que estábamos, claro también que estábamos debajo de las sábanas completamente desnudos.
A los segundos después sentí como se tenso, reí internamente y besé su mejilla.
Para ese entonces Haru ya era más tomate que persona, acaricie lentamente su mejilla, esta mañana amanecí demasiado cursi con el.

-¿Qué pasa Haru?

-Eh... N...No puedo Cr...Creer que realmente paso.-Se hizo bolita cubriendo su rostro.

-¿No te agrado?.- Me desanime un poco.

-El problema es que si me agrado...

-No veo cual es el problema, Me gustas y te quiero esos sentimientos han quedado confirmados.

-Entonces... Yo sólo quiero ser tuyo.

-Así será.

Sonreí mientras lo atraía hacia mi nuevamente abrazando su hermosa cintura que tanto me enloquecia y hasta ahora tuve la oportunidad de hacerlo completamente mío.

-¿Vamos a desayunar?

-¡Antes una ducha!

Habló Haru.

Lo miré con una sonrisa pícara; este empezó a entender el por que de mi reacción y se sonrojo nuevamente.

-¡Eres un pervertido!

-No podemos negar que nos gustará, así que ¡RUN A LA DUCHA!

Hace mucho no sonreía tanto, hace tanto que mi corazón no sentía ternura, paso tanto tiempo y el destino me atrajo hasta Haru, mi pequeño uke.

Me paré de la cama mientras veía el intento fallido de levantarse que hacia Haru, okay no pude contenerme y solté una carcajada.

-¿Qué pasa Haru? ¡Vamos!

Me dedicó una mirada enojada y volví a estallar en carcajadas.

-Cállate tonto, estoy así por ti.

Mantenía su mirada sería, cuando pudo levantarse caminaba un tanto extraño; me acerqué a el y empecé a acariciar su trasero, dio un respingo.

-¿Me perdonas? Juro que traté ser lo más gentil que pude.

Sonrió.

- Claro que te perdóno.

Después de pronunciar aquellas palabras, tomo por primera vez la iniciativa de besarme, me sorprendió pero abrace su linda cintura mientras lo cargaba para llevarlo a la ducha.

Abrí el agua fría y entre con Haru en brazos, él tembló por el frío del agua.

-Matsui el agua esta helada.

-Dentro de poco agradeceras que este fría.

Este sonrió nervioso.

-Matsui ¿Qué paso con tu amigo?

Esta bien, eso casi me hace caer de espalda no quería pensar mucho en ello puesto que era demasiado triste para mi.
Suspire, cerré los ojos fuertemente.

-Tuvo que morir.-dije en seco.

-¿Lo mataron?

-Yo lo maté.

-¿Ah? Creí que...

Puse un dedo en sus labios.

-Era necesario o lo más probable es que ahora estuviera en manos de la policía siendo setenciado a cadena perpetúa.

Sólo se quedó pensando mirando hacia el techo.

-Bien pero ese acontecimiento no debe arruinar nuestra ducha.

Volví a sonreír, el asintió.

Tomé su cintura y lo atraje hacia mi abrazando su cintura, bese sus labios mientras dirigía mis manos a su trasero; las manos de Haru se sostenían firmemente de mi cuello. Con un dedo empecé a tocar la entrada de Haru viendo su rostro sonrojado además de que tenía sus ojitos cerrados.

-Haru... Abre los ojos por favor.

Negó con la cabeza.

- Me da vergüenza.

-Vamos Haru no tienes por qué, déjame apreciar el bello color de tus ojos, permíteme ver que te hago disfrutar.

Abrió los ojos lentamente y simplemente ante mis ojos es perfecto.

Lo acorrale contra la pared para después besarlo apasionadamente, tomé su lindo trasero, lo levante para que este enrollara sus piernas en mi cintura, fue lo que hizo el pequeño uke.
Bese su cuello y nuestras erecciones eran ya muy notables.
Introducí un dedo en su entrada para dilatarlo, quiero evitar lastimarlo; después de un tiempo estaba listo para recibirme.

Entre en él, un gemido salió de sus labios, me movía lentamente para que Haru se acostumbrara y evitarle todo el dolor posible, yo pensaba ir tranquilo mientras se lo hacía lentamente pero la vocecita de Haru me sorprendió con la siguiente palabras.

-M...Matsui... Más.

Y cómo me iba a negar a los deseos de mi pequeño Haru, ¡Nunca!

Entonces sus gemidos empezaban a retumbar en la habitación mientras que yo apretaba su cintura y movía mis caderas más rápido a las órdenes de Haru.
Volví a besarlo mientras me sentía realmente bien con él, realmente lo amaba; por primera vez deseé a una persona, Haru me volvía loco, hasta ahora caí en cuenta de que lo amo.

Terminamos nuestra "ducha" y fuimos a desayunar, mientras que Haru seguía con su caminar extraño, era tan adorable.
Quería consentir a mi Haru entonces hice chocolate caliente puesto que el día estaba un poco frío.
Lo hice ducharse con agua helada...
Soy malo :c
Fuimos a la sala a desayunar sentados frente al televisor, traje una manta para él puesto que tenía frío, le di su taza humeante con aroma delicioso del cacao, la tomó apenas sacando su mano de la manta, puse en la mesita de centro un plato con galletitas.

-Te quiero Matsui.

Casi escupo el chocolate, este soltó una carcajada ante mi reacción, abracé a aquel pequeño travieso y besé tiernamente sus labios.

-Yo también te quiero mocoso.

Ahora mismo parecemos una pareja normal y feliz que disfruta de convivir juntos una fría mañana. Encendí la calefacción para dejar de hacer sufrir a Haru por el frío que hacia, se acercaba el invierno y la navidad entonces era normal que el frío se hiciera presente ya.
Pasamos una mañana tranquila donde sólo estuvimos ambos disfrutando de nuestra compañía, era inmensamente feliz por tenerlo junto a mi.