33.Kick.

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Chapter 33.

Dylan condujo unos metros más, alejándose de aquel exótico club para aparquear el coche y que este no fuera reconocido.
Bajamos de el y nos dirigimos a una gasolinera que estaba cerca del club, Dylan cogió una mochila que tenía y la lleno con algunas cosas.

Rápidamente llegamos al local cogio unas gafas de sol, una gorra roja y unos chicles de menta, lo pagó todo y me condujo hacia los baños. ¿Qué planea?.

-¿Que hacemos aquí?.-Pregunte frenando mi paso.

-Venga, entra. -Dijo abriendo la puerta del baño de chicos.

-No voy a entrar alli, es de chicos, y soy una inocente chica.-Dije tratando de ocultar que había entrado más de una vez al baño de chicos por mi torpeza.

-Vas a obligarme a que entres a la fuerza.-Contesto cansado sin ganas de pelear.

Dylan se acercó a mi colocó sus manos sobre mi cintura seguramente para cargarme, pero le detuve.

-Vale, yo puedo sola.

Entramos juntos al baño, ese lugar olía a muerto, era un olor putrefacto, no entendía que cojones hacían en estos baños, si sacrificaban gente y las dejaban podrirse a las 12:00 y orinaban a la 1:00, mis ojos estaban a punto de llorar por el cutre olor; el piso estaba mohoso y suicio, a tal punto que habia lodo seco y parecía excremento embarrado; el espejo estaba empañado y asqueroso y sin hablar de los orinaderos creo que el monstruo del lago Ness está muerto con las sustancias que pasan por esos baños.

Observando horrorizada el lugar, y con las luces titileantes y los mosquitos volando, voltee mi mirada hacia Dylan quien estaba sin camisa, mi cuerpo se paralizó, comencé a sentir que mi temperatura subió.

Admire su cuerpo palido, delgado y marcado, era la primera vez que veía algo así, su torso estaba marcado, su abdomen con un camino que recorría hacia su fino pecho separándose en delicadas ramas por todo su torso, su espalda con una línea recta...

-¡Hey!, Despierta... No seas pervertida.-Dijo Dylan sacándome del trance.

-¿Porque te desnudas?, No necesito ver un esqueleto.-Pronuncie con mentira.

-Voy al gym; seguramente al único hombre que has visto desnudo es a Franklyn el cuerpo de plastico que está en el aula de biologia.-Se burló.

-No, digas tonterías.-Dije sonrojada, puesto que tenía razón nunca había visto a un hombre desnudo, bueno en su caso semidesnudo.

-Como sea, cógelo y póntelo.

Dylan me entregó la camisa formal de botones y cuadros que llevaba puesta junto con las gafas de sol y la gorra que había comprado anteriormente. Saco de la mochila una camiseta gris y se la coloco, introdujo su mano de nuevo y saco una especie de venda deportiva, me la entregó.

-Ponte esto te hará disimular un poco. Por cierto siempre que diga algo sígueme la corriente, no se que vaya a suceder allí dentro, pero será mejor esperar lo inesperado.-Advirtio y asenti.

Acomode mi pelo dentro de la gorra para que esté asimilare un pelo corto, me coloqué las gafas obscuras, coloque la venda sobre mi ropa y luego introduje mi cuerpo en aquella tibia camisa que Dylan me había dado hace unos minutos y la abotone, observe mi rostro reflejado en el espejo, no llevaba ni una gota de maquillaje encima, joder con el pelo así hasta yo saldría conmigo misma soy una galán... moriré sola, y con 7 gatos.

-Wow, de chico me agradas más.-Comento.

-Dylan, ¿Estas seguro que no eres gay?.-Dije ofendida.

Se Busca (Dylan O'Brien)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora