Homely [Ziall AU] #Wattys2016

Capítulo 17 parte I

[N/A: Dedicación para Zxynmylifx por acompañarme en Twitter hoy y para Ziall_is_so_cute por haberlo hecho hace dos días, asdfghj.

Y PARA LOS QUE NO ME SIGUEN, si me mencionan y tal y me siguen e interactúan conmigo (?) quizá también los ponga aquí, pos c:

Disfruten el cap, asdfghj]

El siguiente día, para mi sorpresa, Niall llevó un ramo de rosas al colegio. Quise morirme porque, es decir, le decía que se fuera de mi casa porque me había gritado, lo que técnicamente contaba como algo así como una pelea, y él lo que hacía era comprarle floras a su putísima novia.

Sin embargo, lo bueno era que finalmente sabría quién era.

Y, por el otro lado, eso era lo malo; que sabría quién era. Sabría quién era y qué cualidades tendría y vería cuán hermosa era y... y me deprimiría por no ser ella y, por lo tanto, no ser lo que Niall quería. No ser en quien pensaba.

No ser suficiente para él tampoco.

Se me ocurrieron mil pensamientos tristes más, pero luego... me enojé. ¿Así tan poco valía para él? ¿En serio? ¿Le había dicho que se fuera de mi casa porque era un imbécil y a él sólo le importaba su ridiculísima novia? ¿Qué clase de mejor amigo tenía? ¿Cómo era que no me había dado cuenta antes de lo poco que le importaba? ¿Cómo era que no me había dado cuenta de que —cuando, para mi desconcierto, me las entregó a mí.

—Lo siento por haber sido un imbécil —me dijo arrodillándose en medio del pasillo con las flores en la mano. Los demás, que si bien no eran tantos porque no era el receso pero, igual, había gente alrededor, nos estaban mirando; no obstante, le importó en lo más mínimo y siguió con su cursilería, como él lo llamaría si la situación fuera la opuesta.

Y yo, en cambio, estaba rojo como un tomate —la vergüenza me consumía vivo.

O, al menos, tan rojo como mi tez oscura me lo permitía.

—¿Por qué haces esto? —pregunté con voz seria y demandante, como si en realidad no me estuviera derritiendo por dentro por su gesto tan tierno.

Suspiró y agachó la vista.

—Porque en serio lamento lo que te hice el otro día. Sé que no tenía derecho y fui un idiota total y lo siento tanto, Zayn, lo siento tanto que no sé cómo hacértelo entender —Alzó los ojos para mirarme y bufé, haciéndome el irritado. Sabía que estaba siendo dramático, pero eso ya era propio de mí y él mejor que nadie lo sabía—. De verdad lo siento. No sé qué me pasó, yo...

—¡Sólo bésalo! —gritó una chica al fondo.

—¡Bésense, maldita sea! —salió otro.

Reí hacia adentro, porque hacia afuera no hacía más que mostrar una actitud fastidiada, y acepté el ramo, tomándolo con un brazo y llegando a percibir su exquisito olor.

¿Por qué las rosas olían tan bien? Tenía que ser alguna clase de trampa.

—Esto no significa que estamos como antes o que nada ha pasado —aseguré en voz baja pero cortante, y él asintió con la cabeza, emocionado y con una sonrisa.

—Al menos es algo.

Rodé los ojos y me acuclillé, llegando a su altura.

—¿Por qué rosas, campeón?

Y no dudó ni un segundo en responder.

—Porque son tus favoritas.