Llegue a mi casa y arroje mi mochila en el sofá, me dirigí a la cocina y me serví un vaso de Té helado.
Todo indicaba que no había nadie en mi casa. Un clásico.
Ni siquiera estaba la señorita que ayudaba en los quehaceres del hogar.
Me senté en la sala de estar y marque el número de mi madre.
-Hola- contestó Elena, su asistente.
-¿Está mi mamá por ahí?
-Si, ya te la paso...
Pude oír cómo Elena tocaba la puerta de la oficina de mi madre y le avisaba que era yo.
-Alex, ¿Ocurre algo?
-No, nada, estaba pensando si podía pasar a verte y tal vez podamos comer juntas en Lorenzo's.
-¿Enserio quieres almorzar conmigo?- me preguntó extrañada.
-Pues si, hoy no me apetece comer sola.
-De acuerdo te veo en Lorenzo's en 45 minutos.
Colgué y subí a mi habitación, me puse unos zapatos de tacón bajos negros y me cambie la blusa por una negra con flores rosas.
Subí a mi auto y conduje hasta el centro de la ciudad.
Entre al restaurant y pedí una mesa para dos; mi madre no tardó en llegar.
-Ordenaré la hamburguesa con doble queso, y una soda de limón por favor- le dije a la mesera.
-Y yo la ensalada del chef, con el pollo teriyaki, y un té de durazno frío, gracias.
La mesera se fue con nuestra orden, regrese mi mirada hacia mi madre quien me miraba inspeccionando.
-¿Como vas con Scott?
Tome un palillo de pan y lo sumergí en el aderezo que había en la mesa.
-¿De que hablas?
-¿Se porta bien contigo?
Lleve al palillo mi boca y saboree la salsa.
-Si, es buena persona.
-No termina de agradarme, pero te convenció de quedarte y no se que estaría haciendo ahora sin ti...
-No se porque no te agrada, ni siquiera le conoces.
-Es su aspecto, me recuerda tanto a tu padre...
-¿Por los tatuajes?-pregunte mientras comía otro palillo de pan.
-Deja de comer pan o te llenarás antes de que llegue tu comida- me regaño mi madre- y si, los tatuajes, la motocicleta, la pinta de chico malo...
-Chico malo- reí- suena tan cliché.
-Sabes a lo que me refiero-enarcó las cejas- no vas a decirme que el estilo de Scott no fue lo que te atrajo de el.
Reí en mi interior, en realidad había sido su humillante rechazo, pero no le diría eso a mi madre.
-Creo que si-afirme- y la moto influyó un poco.
Mi madre rió-cuando lo vi por primera vez, vi a Ray, me recordó a tu padre tanto, estaba segura de que solo te traería problemas, y aún no cambio mi opinión.
-Vamos mamá, dale una oportunidad.
-Lo estoy haciendo, espero que la aproveche.
La comida llego y ambas comenzamos a comer.
-Al rato hay partido, y tengo que ir.
-No regreses tarde- tomó de su té-por cierto, creo que es hora de que vayamos hablando de tu berrinche de hace unos días ¿Por que te ibas a ir?
Esto era el colmo, hasta apenas lo recordó, pero bueno debo de darle méritos por esforzarse en entablar una conversación conmigo, y más que nada por haberse sincerado respecto a Scott.
-Te lo diré; Matt me termino y comenzó a andar con Taylor Colt, ¿La recuerdas?
-Recuerdo a todos los de tu generación, desde que iban en primer grado van juntos, y por supuesto que recuerdo a esa chica, jamás te cayó bien.
-Me odia, y se dio el lujo de decir que me quito a Matt, así que no podía quedarme atrás y cometí un error, utilice a Scott para darle celos a Matt.
Mi madre dejo de comer y me miró sería.
-Scott tenía un mes de entrar a la escuela-seguí hablando-hizo pruebas para entrar al equipo y quedó, se convirtió en titular y en uno de los favoritos del entrenador en menos de un mes, todo el plan iba a la perfección, Matt se moría de celos, pero...
-Te enamoraste- afirmó mi madre.
-Si- le di otra mordida a mi hamburguesa- pero Scott se molestó por lo que hice y dejó de hablarme y durante ese tiempo me sentí mal, y tú no estabas y mi único escape era irme y empezar de cero. Mi madre me miró dolida.
-Pues Matt es un idiota, y Scott tiene suerte- volvió a llevarse un bocado a la boca- y yo prometo escucharte más a partir de ahora, ¿De acuerdo?
Asentí.
Pasaron unos minutos en silencio.
-¿Sabes algo de mi padre?-pregunte con miedo.
-De echo, si, su madre me llamo hace una semana para preguntarme cómo estábamos, y me dijo que Ray estaba en España, trabajando en el equipo de Roger Waters.
-¡Que!, eso es increíble.
-Le conté a tu abuela que estabas pasando por una etapa difícil, y ella quiere que vayas a su ciudad a conocer Ruiln creo que quiere tenerte por allá- movió las cejas.
-Ruiln, siempre me gustó esa universidad, lo pensaré.
Seguimos comiendo y hablando, sin duda está comida fue un acierto enorme, tenía mucho tiempo que no hablaba así con mi madre, hablamos de universidades, hablamos de mi padre, incluso de Roger Waters y de Pink Floyd.
Al terminar ella tuvo que regresar a la oficina y yo regrese a la casa para poder arreglarme para el partido.
Tenía un leve cosquilleo en el estomago por ver a Scott y saber si estaba molesto conmigo, me vestí con unos pantalones negros rotos de la rodilla y una blusa blanca con líneas negras en las mangas, me puse unos tenis blancos Nike y me deje el cabello suelto, me puse rímel en las pestañas y aplique un labial mate color rosa muy pálido en mis labios.
Estaba subiéndome a mi auto cuando vi acercarse una camioneta Hummer H3 amarilla, y me preparé para lo que venía. La camioneta se paró en forma diagonal frente a mi auto impidiéndome salir, Matt se bajó de esta con una sonrisa, traía en la mano un ramo de tulipanes morados envueltos en un papel brillante negro.
Me encantaban, pero no viniendo de él.
-Son para ti- me entregó el ramo y yo lo tomé.
-¿Perdón, que no era que tienes novia?- le pregunte regresándole el ramo.
-Ya no más- me volvió a poner el ramo en las manos.
Adam se bajó de la camioneta y sin decir nada me quito el ramo de flores y lo puso en el asiento trasero de mi auto.
-Alex, Matt ha estado pensando todo el día en ti.
-¿Desde cuando hablas tú por el?- le pregunte a Adam. Ambos vestían con la chamrra del equipo. Escuche unas risas tras mi comentario y gire mi cabeza hacia la camioneta para darme cuenta que medio equipo estaba dentro, se trataba de todos los descerebrados con piedras en él cerebro y bíceps enormes que siempre siguen a Matt y a Adam.
-No habla por mí, Alex me gustaría que me dieras otra oportunidad-Matt se acercó a mí y trató de besarme.
-¿Es una broma?- pregunté.
-No- contestaron ambos al mismo tiempo.
-Te preguntó si me estás jodiendo, ¿Eres idiota o solo estupido?
-Alex, sé que estás molesta, pero no pienso rendirme contigo- me acerco muy duro hacia él y me besó en la frente- te sacaré a Vaughan de la cabeza.
Luego los dos caminaron hasta su camioneta y se fueron hacia el partido supongo.
No pude evitar reír, al final de todo; el plan había funcionado, esto era lo que quería al principio. Matt rogando regresar conmigo.
Subí a mi auto y comencé a conducir hacia el colegio. Es una lástima para el idiota de Matt que ahora solo haya un lugar para un chico en mi corazón.
Aparque mi auto y camine hacia las gradas, divisé a Carlos con Thomas uno de sus amigos.
-Hey chico, ¿Haz visto a mi chico?-le pregunte a Carlos.
-No, creo que no ha llegado.
Los tres subimos las gradas y nos sentamos en un lugar de en medio.
-Maldicion, cuanto frío hace en Octubre-me queje.
-Y eso que apenas está comenzando el mes- me dijo Thomas.
Carlos se quito la chaqueta que traía encima de su sudadera negra y me la paso.
-Gracias, te amo.
-Están vendiendo chocolate caliente en el carrito de la cafetería, ¿No quieres uno?-me preguntó mi mejor amigo.
-Yo iré por el- baje las gradas y me formé en la fila para comprar en el carrito, sin duda el chocolate estaba siendo un éxito.
-Hey, conejita- oí la voz chillona que hacia tanto no oía, me giré para encontrarme con Raquel-¿Me has estado extrañando?
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Seduceme (2 temporada)
Teen Fiction*Segunda temporada de Sedúceme* Scott está dispuesto a hacer lo que sea por mantener feliz a Alex, pero después de descubrir algunos secretos de su pasado quedara en duda lo que es capaz de sacrificar. -Esta es una historia original y totalmente mía...