ToZ - ¿Un serafin y una humana?

Capítulo 5: Te quiero

Terminó el día y fingí estar dormida cuando Dezel regresó a la habitación, ahora que me he dado cuenta que me gusta me da vergüenza hablar con él, debía hablar con Lailah al respecto.

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—¡Rose! Finalmente te diste cuenta.

Las chicas y yo estábamos en las aguas termales, era el momento en que los chicos no podían molestarnos, siempre tenemos nuestra toalla puesta; Lailah parecía emocionada por la confesión que le hice.

—Ayer me percaté de eso, no puedo creer que realmente me guste, ni siquiera lo saludé en la mañana, me cambié rápido y huí de la habitación.

—Cobarde.— Como siempre Edna lo dijo con tanta seriedad.

—Chicas,— Habló Lailah toda feliz. —debemos hacer algo divertido, ¿se han preguntado cómo se comportarían los chicos borrachos?

—¡Wow!— Me sorprendió que Lailah dijera eso. —¿Qué tienes planeado hacer?

—¡Una apuesta!

—Te escuchamos.— Edna parecía estar interesada en el asunto.

—Me interesa saber quién aguanta menos al beber alcohol.

—¡Espera!— Interrumpí. —Tu nunca harías eso.

—No, pero me interesa lo que voy a apostar.

—¿Eh?

—Edna y yo apostaremos por uno y tu por otro, de quien se emborracha primero, elige.

—Bueno... sería estúpido votar por Dezel teniendo en cuenta que toma alcohol, aunque nunca lo he visto, creo que Mikleo.

—De acuerdo, nosotras votamos por Sorey, si Mikleo se emborracha antes haremos lo que tú quieras.

—¿Eh?— A Edna no le agradó mucho esa parte de la apuesta.

—¿Y si ustedes ganan?

—¡Te le confesarás a Dezel!

—¡¿Qué mierda?!

Me caí de golpe por la sorpresa, terminó más empapado mi cabello y me levanté, Edna se acercó más a mi.

—Eres tan estúpida como Mibo, él es un Serafin de agua, podrá quitarle el alcohol a cualquier bebida.

Me quedé callada y me di cuenta que Edna tenía razón, elegí al azar, estaba perdida, mi única esperanza era que Mikleo no hiciera eso...

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—Vamos chicos, siempre estamos relajados, bebamos.

Ya era de noche, teníamos cada uno un vaso de una bebida alcohólica, las chicas tomamos poco y hacíamos que los chicos tomaran lo mismo para que no fuera trampa, Sorey y Mikleo seguían normal, aunque no le gustó mucho a Sorey, Mikleo estaba normal como para ser su primera vez bebiendo, me di cuenta que si le estaba quitando el alcohol, estaba a pocos pasos de mi perdición, Dezel no decía nada, pero lo miré unos segundos y mi corazón se aceleró.

—Veo que no te molesta el alcohol.— Dijo Sorey a Mikleo.

—Le quité varias propiedades, así no podré ponerme borracho, no me quiero arriesgar.— En ese momento se le quedó viendo a Edna y ella volteó hacia otro lado con cara inocente.

Estábamos calladas viendo a Sorey, yo ya me estaba mentalizando para perder.

—¡No seas marica!

Todos nos sorprendimos al escuchar que Dezel le gritó a Mikleo, estaba muy ruborizado.

—¿D-Dezel?— Mikleo lo miró incómodo.

—¡Eso es lo bueno de tomar!

—¡¿Estás borracho?!— Grité sorprendida.

—¡No es cierto mujer!

Se levantó y como que casi se tropezaba por levantarse mal.

—Lailah...— Hablé en voz baja. —Dezel está borracho, el estaba dentro de la apuesta, ninguna gana.— Sonreí victoriosa.

—Aw, yo pensé que sería entre Mikleo y Sorey, nunca me imaginé que Dezel caería primero.

—¡Rose! No hables con nadie.

Dezel me agarró del brazo y me abrazó por la espalda, sentí que me moría por dentro, en ese momento estaba segura que estaba como un tomate.

—¿Q-qué haces?

—¡Eres mi Rose! Mi flor favorita, siempre me han gustado las rosas.

Todos nos quedamos callados, empezó a decir estupideces.

—Solo tomaste un vaso, muchas veces bebes, ¿cómo carajos lo lograste?

—Por lo visto le gusta el alcohol pero su cuerpo no lo soporta como él quisiera.— Habló Mikleo.

—¿Qué mierda?

Edna se fue junto con Lailah mientras se reían, le hicieron señales a los chicos y fueron con ellas, quedamos a solas.

—Rose.

—¿S-sí?

—Te quiero.

Debo admitir que me encantó escuchar eso, me hubiera gustado que estuviera sobrio, pero no sé si lo dijo porque estaba bajo los efectos del alcohol o era real... " No te preocupes, el amor de tu vida siente lo mismo por ti y pronto estarán juntos" Fueron las palabras de Lailah cuando me leyó la fortuna, puede que sólo lo dijera para animarme porque desde un principio se dio cuenta que me gustaba.

—Yo sé que no recordarás esto por estar borracho, pero yo también te quiero, me gustas Dezel.

Dezel dejó de abrazarme y me miró de frente, acercó mucho su rostro contra el mio y me puse nerviosa, estaba demasiado cerca que me imaginé que me besaría, pero en lugar de eso se recargó en mi hombro, como si estuviera cansado.

—Rose.

Debido a que todos me abandonaron, tuve que llevarme yo sola a Dezel a la habitación, lo ayudé a caminar debido a que perdía el equilibrio y al llegar al cuarto se quitó la chaqueta junto con el sombrero y lo ayudé a acostarse en la cama, aunque él siempre dormía en el suelo, no iba a dejar que se acostara en el piso.

—Si necesitas algo avisame.

—Duerme conmigo.

—¡¿Eh?!

Sé que siempre le había dicho que podía dormir conmigo, pero la situación cambió, estar con Dezel de esa forma realmente me pondría nerviosa, aunque por el otro lado me gustaría dormir con él, después de una larga crisis existencial decidí acostarme a un lado, sólo que le dí la espalda, traté de pensar que estaba sola, pero sentí que me abrazó.

—Te quiero Rose.

Mi corazón casi se salía del cuerpo, pero ese era Dezel bajo los efectos del alcohol, lo más seguro es que no sienta lo mismo por mi, siempre ha sido serio conmigo, por lo menos podía disfrutar del momento, no quería terminara...