¤Narra Hugo¤
La clase de inglés se me pasa volando, en realidad, no he prestado atención en toda la hora, la verdad es que hay algo que me preocupa. Todo esto se me está empezando a ir de las manos, lo que parecía tan simple como ligarme a la chica mala del instituto se está convirtiendo en algo que me está acojonando, cada minuto que paso con ella, cada cosa que descubro sobre su extraña vida hace que sienta la necesidad de no separarme de ella nunca, no puedo permitir que me pase esto, tengo que ceñirme a mis pensamientos iniciales y dejar de lado estos estúpidos sentimientos que amenazan con joderme la vida.
Cuando llego a clase de ciencias me la encuentro sentada al final de la clase con su móvil, sin dudarlo me siento con ella y parece que hoy es mi día de suerte ya que el profesor nos dice que tendremos que hacer con el compañero que tendremos al lado, es un trabajo bastante largo y la verdad es que ambos necesitamos sacar buena nota si queremos aprobar, lo que significa es que nos llevará unas cuantas horas hacerlo, perfecto, ya tengo una excusa para quedar con ella a solas.
-Acuérdate Hugo, sin sentimientos- me digo a mi mismo.
La digo la hora a la que iré a su casa y salgo de clase antes de que pueda quejarse.Son las cinco y media, tengo tres horas antes de ir a casa de Michelle así que decido ir un rato al gimnasio a dar unos cuantos puñetazos al saco, hace mucho tiempo que no voy por allí y la verdad es que me apetece bastante.
Cuando me quiero dar cuenta llevo más de dos horas boxeando sin parar, no puedo más, estoy muy cansado, además si no voy ya para casa no me dará tiempo a llegar a tiempo a casa de Michelle, me despido de unos chavales que no tendrán más de quince años y voy a mi casa.
Me ducho y cuando estoy en mi habitación decidiendo que ponerme aparece Mery, mi hermana pequeña con una coleta alta que recoge toda su melena rubia.
-¿vas a ver a tu novia?- pregunta mientras se sienta en mi cama.
-¿novia? ¿Qué dices enana? Yo no tengo novia.
-Venga ya Hugo, ¿desde cuando piensas que vas a ponerte? Además el otro día tu sudadera apestaba a colonia de chica, a mi no me engañas.
Mierda, a esta niña no se la escapa ni una.
-Pequeñaja, tú eres la única chica que hay en mi vida y ahora déjame vestirme o llegaré tarde.
-Ponte guapo para tu novia...- dice mientras sale de mi cuarto.Cuando llego a la calle de Michelle me doy cuenta de una cosa, no sé cual es su piso y tampoco tengo su número de teléfono, perfecto Hugo, te estas luciendo.
ESTÁS LEYENDO
No quiero enamorarme
Teen FictionSoy Michelle y tengo 17 años. Mi vida se podría resumir en fiestas, sexo y alcohol. Mi madre no sabe que hacer conmigo y la verdad es que no me importa. No tengo amigas, no las necesito. Todas las tías de mi instituto tiemblan cuando las miro y la...