Me senté con Sue en los penúltimos asientos dobles. El autobús no era muy grande, 22 asientos, tenía dos filas de asientos, una de asientos dobles y la otra de uno. Mi hermano, el chico de los ojos verdes y los dos hermanos de pelo negro se situaron en los cuatro asientos del final del bus, los otros dos hermanos se sentaron delante nuestro y Marco se sentó en el asiendo de al lado nuestro.
Me senté en el asiento de la ventana mirando el paisaje urbano. Alguien me llamó desde el asiento de atrás y me volteé para saber quien era. Era la chica que sobaba a mi hermano hace unos minutos.
- Hola, me llamo Mia Bynes - dijo con la sonrisa más falsa que he visto en mi vida.
- Soy Zoe Scott, encantada - hice el amago de una sonrisa pero desistí, no se me daban bien las sonrisas falsas.
- Hey Mia, ¿haciendo una nueva amiga? - dijo su hermano mientras le pasaba el brazo por los hombros - Zoe, por si no lo has notado, somos hermanos y, ah, por cierto, me llamo James - sonrió, y no como la sonrisa, sino una sonrisa bastante sincera, yo diría que incluso coqueta...
- Encantada, y sí, sí lo había notado - dije, esta vez sí sonreí, James era mucho más majo que su hermana.
Después de esto volví a mirar por la ventana mientras Sue me contaba que su hamster estaba resfriado o algo así, era tan interesante que me habían entrado ganas de contar los lunares que tenía el asiento que estaba delante mio.
Veinte minutos después el autobús aparcó en el parking que estaba al lado de un gigantesco edificio, parecía muy antiguo, la fachada estaba cubierta de grandes ventanales y con una arquitectura gótica. Bajamos del autobús y nos dirigimos a la entrada. Por la noche había helado y había placas de hielo en el suelo. Caminamos con cuidado, pensé que me había salvado de caer al suelo pero cuando estabamos llegando a la entrada di un mal paso y resbalé cayendo al suelo de cemento, mi culo se entumeció debido al golpe y lo frío que estaba el suelo. Toda la gente me estaba mirando, cuchicheando y riendose en mi dirección. Me ruboricé, toda la gente me miraba y eso provocaba que mi pánico escénico entrara en acción, me paralicé. Alguien me levantó agarrandome por la espalda. Pensando que era mi hermano me di la vuelta.
- Por favor llevame aden... - no terminé la frase pues me encontré con unos ojos verdes que no pertenecían a mi hermano.
- Que patosa que eres - dijo burlandose de mi - ¿en las ciudades no helaba o qué?
Me agarró por el codo al ver que me volvía a resbalar, sus ojos estaban aún más cerca y eso provocaba que mis mejillas se encendiesen aún más.
- Sí, pero no tanto como aquí - dije tímidamente. Me libré de su agarre con gesto molesto, ¡se estaba burlando de mi en mi cara!
- Me llamo Lucas Smith, tú eres Zoe ¿no?
Asentí, el rubor seguía en mis mejillas y aunmentaba conforme él me miraba. Gracias a dios Tyler apareció de la nada y se situó a mi lado.
- Hola chicos - dijo animadamente - ¿qué ha pasado?
Agarré su brazo y lo arrastré dentro del edificio. Ya en el pasillo, mientras estabamos apoyados en una de las ventanas le conté todo lo ocurrido.
- Recapitulemos, - dijo riendose - ¿te caíste delante de todo el instituto y después de que Lucas te levantase le pediste que te llevara corriendo adentro?
Lo miré furiosa.
- Primero no fue delante de todo el instituto por que muchos ya habían entrado, segundo, no sabía que el que me levantó era Lucas, pensaba que eras tú y tercero no le llegué a decir nada.
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¿Quererlo? No lo sé.
Teen FictionZoe Scott es una chica normal, no muy fiestera y amante de los libros que se va a vivir con su madre Alison y su hermano Tyler a una conocida villa en Florida. Allí conocerá a muchas personas, vivirá conflictos y amores y aprenderá un montón de cos...