Capitulo 9

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Después de poco más de un mes las cosas habían cambiado mucho. La casa que vieron después de esperar tanto fue la que eligieron para comprar. Con la venta de su casa y una pequeña diferencia, que la madre de Regina felizmente les regaló a la "pareja perfecta" para que no tuvieran deudas, compraron la propiedad y se mudaron. 

Regina llevaba ya casi 8 meses de embarazo y su relación con Emma había crecido. Tenían una amistad, ya que la rubia había acelerado las cosas para que pudieran tener todo listo antes del nacimiento de Ava; si, estaban esperando una pequeña niña, y hasta colaboró en la mudanza.

Unos días luego de la mudanza Regina no se sentía muy bien y Zelena llevó al pequeño Henry a pasear para que su madre pudiera descansar. Emma pasó por la casa para llevar los últimos papeles y cuando la morena abrió la puerta se dio cuenta que no estaba bien. sin saber por qué sintió la necesidad de quedarse con ella hasta verla mejor. Pero como no quería admitirlo utilizó la excusa de esperar a Robin para firmar documentos. Tras una hora de té y hablar de cosas triviales, Regina corrió al baño, las náuseas no le permitieron seguir la conversación. Sin pensarlo, Emma corrió detrás de ella para ayudarla. Desde ese día, sin decir una palabra más habían seguido en contacto y se veían algunas tardes para hablar por horas.

Emma no podía evitar sentir cada vez más fuerte la necesidad de estar cerca de Regina, de ayudarla, de cuidarla. Más aún cuando el destino la puso en el lugar correcto, en el momento correcto. Y descubrió algo que no debía...

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