Prohibido

Capitulo 18

Esa noche Emma estaba algo dispersa. Killian le había dicho que podían cancelar su noche de viernes si no se sentía bien, pero ella se opuso. No quería permitir que una mujer le hiciera bajar la guardia. Que una mujer casada y con dos hijos provocara el temblor que sentía y las ganas de dejar su vida se soltería eterna.
Cuando entraron al club eligieron un lugar para poder estar sentados más tranquilos., Ya que el ánimo no estaba para ocupar la barra como siempre. Killian intentaba animar a su amiga, al no lograrlo intentó al menos llenarla un poco de alcohol, pero nada era posible con la rubia esa noche, así que se limitó a quedarse sentado frente a ella pero mirando hacia la pista en busca de compañía. Llevaba unos minutos mirando hacia la puerta cuando algo llamó su atención... O alguien.
" Creo que deberías hablar con Regina" dijo muy serio y mirando a su amiga. "Estas loco?". "No, ya es hora de que la enfrentes". "No, voy a evitarla por el resto de mi vida" la rubia, ya molesta, se levantó y se dirigió a la barra, su amigo sonrió. Había logrado lo que quería y estaba preparado para disfrutarlo.
Emma encontró un lugar donde sentarse y pidió un trago, no iba a permitir que la morena en su cabeza e arruinara la noche. "Que tomas?" Le preguntó otra rubia acercándose a ella. "Sex on the beach" respondió, con su tono más seductor. "Una vez que lo probas se vuelve adictivo". "El trago o el sexo en la playa?". La rubia de ojos negros penetrantes se inclinó hacia el trago y de manera provocativa mordió el sorbete, luego dió un largo trago. Volviendo a su posición dijo "supongo que ahora debería probar la playa". "Mmmm... Atrevida y directa..." Antes que Emma pudiera terminar la frase algo la detuvo, en su cabeza ya no sonaba bien y menos podía decirlo. "Te gustan así?" La rubia se inclinó para intentar besarla, pero antes de lograrlo una mano firme la tomó por el hombro y la guió de nuevo a su lugar. "No, las prefiere morochas" dijo una voz conocida, ante una Emma que no podía cerrar la boca del asombro.