Después del primer encuentro entre ambas mujeres las cosas habían sido muy diferentes para cada una.
Emma no entendía su propio comportamiento. Necesitaba hablar con su fiel amigo Killian. Lo llamó y una hora más tarde, apareció en su casa con comida y vino. Sin dudas era el amigo perfecto. después de sentarse a comer Emma comenzó a contarle lo que había pasado esa mañana. Killian no podía creer lo que escuchaba. "Por que hiciste eso? Te gusta? Está embarazada! Creí que era tu límite. Junto con no repetir a tus 'víctimas', claro". La rubia no podía responder ni a una sola de esas preguntas. Su mente no paraba de pensar desde que había visto a Regina esa mañana. No había pensado en ella como mamá, como una mujer embarazada, como la esposa de un hombre. La vio como a una mujer. Como a una hermosa mujer. "Dios! Estoy loca!" gritó.
Killian la miraba sonriendo, la tomó por los hombros, plantó un beso en su frente y con dulzura le dijo "Bienvenida a la vida real". Su amiga lo miró con los ojos abiertos por demás. Ya lo había escuchado hablar de eso. Le había dicho varias veces que un día dejaría de ver a la gente como objetos y entraría en el mundo real. Pero se negaba, no quería pensar en Regina de esa forma... Regina. Que hermoso nombre. Perfecto para esa cara perfecta. "NO! Basta. No va a pasar. Es imposible. Está prohibido." Claro eso era, se convencía. "Quiero que sea mi amiga. Necesito una amiga mujer." Killian la miró con duda en su rostro. Pero sabía que esta situación requería de su apoyo firme. Cualquiera fuera el camino que esta tomara. "Van a ser unos meses largos" pensaron.
Por su parte Regina pensaba que esto era culpa de sus alteradas hormonas, la falta de atención de Robin, estrés, o cualquier otra excusa que su mente pudiera pensar. Porque eso era. Verdad? Emma y su hermosa figura insinuándose en la mesa esa mañana había sido producto de su imaginación. Nada. Nada de lo que había sentido era real. Todo eso estaba prohibido. Prohibido.
ESTÁS LEYENDO
Prohibido
FanfictionEmma y Regina. Vidas completamente diferentes. Mundos totalmente opuestos. La vida las cruza por casualidad. Lo que sucede después no es precisamente lo correcto. Por eso deben poner un freno a lo que sienten. Cuanto pueden hacer por lo que les pasa...